- Sí señor General... Tiene usted razón. Sí,sí, todo ha sido resuelto en menos de 15 horas.Un total de 13 bajas confirmadas, 4 guardias de seguridad, 2 médicos, 5 enfermeros y 2 asistentes administrativos. Ningún paciente. Yo? Sí, me encuentro cómodo con el nuevo puesto.Hay mucho papeleo que hacer, pero en menos de un par de horas... Sí soy consciente de la actual situación del complejo , y de que ahora está en el centro del foco de interés de los medios de comunicación tanto nacionales como internacionales... Sí, he visto el artículo del New York Times en primera página, no es precisamente halagador. Es una suerte que nadie todavía sospeche ni lo más mínimo sobre.... Un supervisor? No, no es necesario, entiendo su preocupación, pero... Vale, entendido, gracias señor - terminaba de decir Jason, en calidad de nuevo director del centro psiquiátrico más prestigioso e influyente en Occidente, ya oficial, al parecer . Mañana se publicaría oficialmente, tras la repentina desaparición del antiguo director, un señor que rondaba los 50 ,primo segundo de un senador bastante importante y que en las próximas elecciones se presentaría a Presidente, y que no estaba formado en nada , excepto en vivir del trabajo ajeno, o al menos hasta ahí había llegado su rápida investigación. Tenía el presentimiento de que aquella desaparición estaba relacionada con el fallo de seguridad ocurrido, el cual provocó tal masacre, más que con su prejubilación y posterior viaje a las Maldivas, según las fuentes oficiales.
Colgó el teléfono mientras suspiraba profundamente, cansado, y con la frente surcada de arrugas por el estrés.No se esperaba esto.
Hacía menos de dos días, era un conocido neurólogo y psiquiatra con un puesto de mediana categoría en un hospital general en el centro de París, con un sueldo lo suficientemente decente como para vivir cómodamente sin preocuparse demasiado por temas económicos, centrándose en la investigación. La noche pasada recibió la llamada que le cambiaría la vida ; el mismísimo Secretario de Defensa de los Estados Unidos de América le estaba hablando en persona!
Siendo natural de Londres, pero habiéndose mudado con sus padres a Francia a los 12 años, su inglés era todavía lo suficientemente fluido como para mantener una conversación cómoda , aunque bien es cierto que alguna que otra palabra tuvo la necesidad de buscarla en el internacionalmente famoso "Google Translator".
Dos horas más tarde, volaba en un avión militar estadounidense con destino a Texas, habiendo sido nombrado Director General del célebre hospital de investigación psiquiátrico "New Horizons Central Building" por teléfono, con un sueldo semanal de 6 cifras y con un general del ejército demasiado hablador, explicándole sus nuevas funciones y responsabilidades más de 50 veces en las 4 horas de trayecto.Además , la parte de los experimentos extraoficiales secretos millonarios y de existencia oficial nula para el resto del mundo, no le atrajo demasiado, pero al intentar insinuar cualquier objeción , el poco amistoso revólver del militar parecía temblar con facilidad , que sumado a la mirada carente de toda expresión de su portador , prefirió guardarse sus argumentos.
¿Y por qué él? Ni idea,y todas las veces que lo había preguntado , siempre le daban evasivas poco claras, y Jason no tenía intención de parecer muy pesado ni un incordio a sus nuevos y poderosos jefes. Ya lo descubriría más adelante, pero por ahora, le tocaba trabajar duro y mostrarse eficiente si quería llegar al próximo mes con vida, pensando solo en el factor científico, siguiendo las recomendaciones del propio Secretario de Defensa, por el bien del mundo, como decía , hipócritamente a parecer de Jason, su nuevo jefe político.
Ahora se encontraba sentado en su nuevo y lujoso despacho ( el cual se asemejaba más a un apartamento de verano), bajo la constante presión de la C.I.A. , el Departamento de Defensa, el de Estado, y muchos otros altos cargos del gobierno regional y nacional cuyos puestos ya no se molestaba en recordar, que no hacían más que agobiar y presionar.Lo peor de todo es que no se podía echar atrás, ya que seguramente su vida correría peligro.Cuando le hablaron sobre que el personal no necesario o poco rentable sería retirado de su puesto, durante el viaje a Estados Unidos, estaba seguro de que era una amenaza subliminal, y dudaba que solo se estuviesen refiriendo al despido sin indemnización.
El Dr. Ferguson se disponía a levantarse de su silla para prepararse un café bien cargado, y así un día más (el primero había sido demoledor), cuando su secretaria Emily, una joven y bella mujer que no debía superar los 25, y capricho del antiguo director, entraba de improviso en la sala.
-Doctor, los pacientes seleccionados se están finalmente despertando- su voz amable era bastante reconfortante.
-Gracias, voy en seguida- contestaba Jason. El café debía esperar.
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Inside The Darkness
Science FictionEn uno de los psiquiátricos más prestigiosos de EEUU, en Dallas, Texas, se oculta un centro de investigación clínico-psíquico secreto del gobierno en el que mantienen en cuarentena a un grupo de personas sin posibilidades en la vida ; asesinos, loco...