Una maldita hora es lo que Erick llevaba esperando a Ryan, el susodicho no terminaba de vestirse, hay veces Erick se preguntaba ¿Cómo rayos Ryan fue a ser su amigo?
Pregunta que solo él sabia responderla-Vámonos-Erick volteó a ver a Ryan.
-Ya era hora- Erick caminó hacía la puerta, pero Ryan no podía mantener su boca cerrada, que sorpresa.
- Erick y ¿si me dice qué no?- Ryan debatía entre si decirle o no a la chica, se estaba arrepintiendo.
Muchas preguntas estaban en su cabeza, y todas ellas nada buenas.-deja de pensar así, es más tu tranquilo yo nervioso-eso es lo que más le preocupaba a Ryan, él hecho de haber confiado en Erick, sabía que América su hermana era la mejor ayudándolo en eso, pero no quiso de recurrir a ella.
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Thamara estaba en la plaza central, había decidido vagar esa tarde, miraba cada una de las boutiques, todo le llamaba la atención, pero lo que más le llamó fue la imagen que se reflejaba en él cristal, era Ryan con un ramo de rosas y un globo, volteo a verlo, en efecto era él, quien se encontraba esperando a alguien.
De seguro son para Amber pensó
-¡hey! ¿Te ocurre algo?- volteó a mirar a la chica que le hablaba, era Amber, justo ella.
-Dios mio- susurro al cielo
-¿Estas bien?- lo único que Thamara pudo hacer, fue asentir, no debía quitarle el tiempo a ella, de seguro Ryan la esperaba con Ansias-¿Te gusta verdad?
Thamara la miro espectante, no podía pronunciar palabras ante esa pregunta.
-¿Cómo lo sabes?- Amber sonrió, esta claro que Amber no sabía, ni estaba segura, pero tenía esa facilidad de adivinar sin que ella este segura, al final todos confirmaban sus hechos.
-No lo sabía, pero tu me lo confirmaste con tu silencio, y bueno no eres tan discreta que digamos- Amber le dio otra sonrisa cálida
-¿Creés qué él lo sepa?- se atrevió a preguntar Thamara, a lo que Amber negó
-Lo dudo, Ryan es sumamente distraído, no se da cuenta de las cosas que pasan a su alrededor, él sólo piensa en él y en la chica que le gusta- Amber era sumamente seca con lo que decía, pero al final era buena onda
-¿La chica qué le gusta?, ¿A casó tú no eres su novia?- Amber la miró incrédula, ella también pensaba en que Ryan y ella eran algo, Amber soltó una carcajada
-Claro que no, Ryan es como mi hermano- le dijo sincera
-ohhh- solo dijo Thamara- Entonces ¿Qué significa todo eso?- señalo a Ryan
Amber miró al chico, ella lo miro molesta, está claro que él y ella no tenían nada que ver, pero le molestaba el hecho de que no le contará nada, sabiendo que él sabe todo de ella.
-No lose, igual quiero saber quien es la afortunada- contesto cortante.
Ryan llevaba 20 minutos esperando a la chica, se empezaba a desesperar, quizá ella no quería nada con él, quizá Ryan sólo debió decirle lo que sentía directamente y no citarla para hablar de la escuela.
Rendido se dio la vuelta al parecer se equivoco con Maia, ella no iba a ser la chica de su vida.
Caminando por la plaza central, chocó con alguien.
-Hey tranquilo- miró a la chica de la voz, era Amber, justo lo que faltaba, estar derrotado por la hermana de su mejor amiga.
Si Amber y Maia eran hermanas.
Ryan sabe que es tonto compararlas, pero era necesario.
Amber era seca y directa mientras que Maia era dulce y tímida.
Pero creó que ni por ser como era Maia va a quitar el hecho de que es una persona irresponsable, y nada sincera. Todo lo contrario a Amber y lo peor de todo es que por Amber, él no siente nada.
-Maia ¿Cierto?- él solo asintió, Ryan no sabía como Amber hacía para adivinar todo lo que pasaba, siempre acertaba en lo que pensaba.
-Debí decírtelo desde un principio, tal vez tu me hubieras advertido, como siempre lo haces- Amber lo abrazo, conocía a su amigo, era demasiado sentimental para todo, y aunque ella no era tan afectiva lo abrazo.
Thamara sólo miraba la escena, sabía que no era de su incumbencia estar ahi, pero necesita ver si el no necesitaba de ella. Cosa que era poco probable.
Ryan notó la presencia de Thamara que perdió el control de lo que traía en sus manos, las rosas cayeron al suelo y el globo salió volando.
-Hola- le dijo Ryan
Thamara quedo en shock, sus manos sudaban, Ryan Maddox le había saludado.
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Thamara
Short Story"Si aguante dos años para no hablarle, no creó que un mes más sea un tormento o ¿si? "- palabras que Thamara se repetía en su mente, pero no le funcionó. ¿Qué tan difícil era hablarle al chico qué te gusta? ------ Obra totalmente mía, basada en hec...