1 año

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La pequeña Seira, quien nació en una noche oscura, la cual ella iluminó al momento de nacer, creció dotada de alegría, energía y belleza, quien la conociera la amaría, y admiraría, porque a pesar de ser una niña, sin importar que tiene solo 1 año de edad, ella sonríe en un mundo devastado, uno que parece morir a  cada segundo que pasa.
Y no solo por su sonrisa, su risa a carcajadas, su gran curiosidad o su gran valentía para adentrarse a lo desconocido, ella era admirada por el don mas grande que alguien podía tener (en este mundo al menos), ella soñaba, imaginaba y anhelaba, ella con tan solo sonreír le brindaba alegría inmediata a todo aquel que la rodeaba.

Y su madre orgullosa de ello, vivía asustada, temerosa de que un día los grandes vinieran por ella , su niña, su pequeña, de que se la arrebataran, de que llegaran a ultrajar en sus vidas y le quitaran su felicidad y su razón de vivir.

Porque muy al pesar de la madre, ellos algún día descubrirían que alguien los quiere desterrar, que alguien lo esta logrando, y que ese  alguien es Seira.

Mundo sin sueños Donde viven las historias. Descúbrelo ahora