- ¿Alguien tiene la respuesta a esta pregunta? –La profesora miró por todo el salón suplicante pero nadie hizo nada por contestar. – ¿Algún voluntario?
Nicholas miró de reojo a todos sus compañeros, podía escuchar como todos pedían a gritos que no les preguntaran a ellos ya que no sabían que responder, bueno, todos, todos excepto...
-¿Señorita Evans? –Preguntó la maestra mirando a la castaña que sentaba adelante en la primera fila, su uniforme perfectamente planchado, sus zapatos sin ni una gota de mugre, su cabello hermosamente peinado y sus respuestas... -- ¿Podría decirme usted cual es la respuesta?
-X es igual a 6. – Contestó ella después de unos segundos en silencio.
Sus respuestas tan condenadamente acertadas. A simple vista, se podía saber que aquella chica era la cerebrito del curso, siempre caminaba con rectitud y cargaba libros en sus manos, sus calificaciones no bajaban del diez, y su rostro estaba pegado en el muro como la mejor estudiante.
-¡Perfecto! –Exclamó la maestra complacida. –Como se esperaba de la hija del director.
Emily hizo una mueca mientras clavaba su mirada en su cuaderno como si estuviese apenada, Nicholas no entendía su reacción ¿Por qué se avergonzaba si de todas formas ella se esforzaba?
'Ahí va otra vez esa estúpida...'
El rubio levantó rápidamente la cabeza y buscó la fuente de ese pensamiento, sin embargo muchos más le siguieron a este.
'Cómo siempre la señorita perfección presume de sus habilidades'
'Cómo si fuese algo especial lo que ha hecho'
'Si yo fuera el hijo del director recibiría toda las alabanzas aunque respondiera todo mal'
'La odio'
Vaya, vaya... Así que Emily Evans no era tan perfecta como él lo pensaba... En realidad... Estaba sola. Miró a la chica quien únicamente se dedicaba a escribir en su cuaderno, menos mal ella no escuchaba todos los insultos que le estaban mandando en este momento. La gente era de lo peor... Decían que su familia era un grupo de Anormales pero ellos eran peores. Simplemente hipócritas.
-Formen equipos y resuelvan los siguientes ejercicios. –Dijo la maestra mientras se sentaba en su escritorio y calificaba unas hojas.
Todos procedieron a correr hacia sus compañeros y a sentarse juntos, sin embargo...Nicholas no pudo evitar sentir lástima, al ver como la castaña estaba sentada sola revisando su cuaderno.
-Eh... ¿Nicholas? –Lo llamó una chica pelirroja que sostenía su cuaderno y lo miraba con un poco de coquetería. – ¿Quieres trabajar conmigo?
Je, esa era una de las que había insultado a Emily en su mente, el rubio la examinó descaradamente de pie a cabeza y ella le brindó su sonrisa más coqueta al sentirse observada. Nicholas le sonrió mientras tomaba su cuaderno y se ponía de pie.
-Lo siento. –Se disculpó falsamente. –Pero no me gusta trabajar con chicas estúpidas.
Aquella pelirroja abrió su boca totalmente indignada. – ¿Perdón? –Le preguntó poniéndose una mano en el pecho.
El rubio sonrió. –No me gusta trabajar con chicas estúpidas y sordas. Prefiero las listas –La hizo a un lado y se acercó a la castaña quien no había notado su presencia.
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LAS DOCE DIMENSIONES OCULTAS
Romance-En el mundo existen veinticinco dimensiones diferentes, una de ellas es la tierra ¿Y las otras veinticuatro? Se conoce que doce de ellas son actualmente vigiladas por guardianes que mantienen oculta su dimensión, aun así quedan doce totalmente desh...