8. BOOM!

1.8K 110 7
                                    

Luego, de ver la rutina diaria de Loren, decidimos entrar a la universidad, no pudimos dejar de observar cada paso y acción que hacía Loren, así que alistamos rápidamente los libros y cuadernos qué necesitábamos para nuestras clases, por suerte la primera hora nos tocaba juntas, se trataba de la increíble materia de ilustración, para la cual soy terrible, en cambio, Lindsey era toda una experta, habían ocasiones en las cuales no realizaba nada, y Lindsey lo hacía rápidamente, y por eso también la amo, siempre me ayuda en todo, al lado de ella soy una torpe, ella es muy inteligente, aunque en algunas ocasiones yo le ganó en matemáticas, si eso es bastante raro.

Bueno, el caso fue qué tuvimos que salir corriendo hacia el aula y obviamente llegamos muy tarde.

— Buenas Noches, señoritas- dice el maestro levantando una ceja.

— Buenos Días, licenciado- dice Lindsey decentemente- Perdón por llegar tarde a su clase pero se me presento un problema, usted sabe- esta levanta una ceja, ya que lo último lo dice en forma de susurro.

— Oh, pues si ese es el caso, pasen señoritas, perdón por mi torpeza.

— Gracias!- decimos al unísono muy entusiasmadas.

Aun no podía creer a que se refería Lindsey, y porque el maestro nos dejó pasar como si nada hubiera pasado.

Volteo hacia la esquina del aula, y no puedo creer que Logan también se encuentre en esta clase, me siento observada, vigilada y intimidada. Ahora, siempre, en todos lados, en cada esquina lo veo, siento que lo veo cada 10 minutos como si me estuviera vigilando.

Le cuento sobre esto a Lindsey y ella también concuerda conmigo. Pero hoy no voy a tratar de pensar en Logan, y voy a pensar más en Scott ya que esta noche es la cita, y la verdad estoy entre ansiosa y nerviosa, Lindsey me va a ayudar a arreglarme, el pasara por mi a las 8:30 no tengo ni idea de lo que estará planeando, pero lo que si se es que esta noche si va a ser inolvidable.

Al terminar la clase de ilustración, nos dirigimos a la cafetería, donde cada una escoge lo que quiera comer, y nos sentamos en donde se encuentran todas nuestras amigas. Hablamos, de lo que haremos esta noche y al parecer Chloe también se va a ofrecer a ayudarme a arreglar. En un instante, me llega un mensaje del grupo que tenemos de Porristas y hoy tendremos entrenamiento en la tarde, así que hoy va a ser un día muy largo, y no va a ser fácil alistarme ya que el entrenamiento se acaba a las 6:00 de la tarde y solo tendre 2 horas en arreglarme así que más vale que tengas más de una plancha porque este cabello es muy, pero muy abundante.

— Lindsey malas noticias...

— ¿Que pasa?- dice preocupada.

— Hoy habrá entrenamiento- digo con tristeza.

— ¡Oh, diablos! Igual tu eres muy linda, y no importa si te arreglas, porque aquel que ama de verdad no le importa si te sale un grano, o te poposea una paloma, lo que importa es lo que esta aqui- señala mi pecho.

Rio ante su comentario y suelto un comentario sarcástico.

— ¿Lo que le debe importar es mi pecho izquierdo?- Chloe y yo reímos, mientras Lindsey se queda seria, pero luego de 5 segundos suelta una carcajada.

— Bipolar- decimos todas al unísono.

Sigue riendo, pero luego se atora, al notar que lo que se estaba comiendo se le fue por el camino viejo.

— Bueno mejor nos vamos, adiós bebés- digo despidiéndome de todas mis amigas, ya cuando terminamos, nos vamos felices de la vida al gimnasio de Porristas.

Al llegar, observamos qué solo se encuentra la entrenadora.

— ¡Hola!... ¿Entrenadora?

— Oh, hola chicas, es que estoy concentrada en unas cosas para nada importantes, pero sigan, llegan de primeras así que tomen todo el tiempo para cambiarse a ropa deportiva, mientras llegan los demás- dice casi sin aliento.

— ¿Se encuentra bien? ¿Le pasa algo?- dice Lindsey preocupada.

— No, no, no se preocupen porque no mejor van y se cambian en vez de estar perdiendo su tiempo conmigo.

— Recuerde que además de sus alumnas, somos sus alumnas, si hay algo que nos quiera comentar siempre estaremos ahi- digo honestamente.

— Dije NO y punto, ahora vayanse- dice enojada.

Intento reclamarle, pero Lindsey, me tapa la boca.

— Como quiera- díce Lindsey.

Ya cuando llegamos al vestier, le digo a Lindsey qué fue lo que acabo de pasar.

— ¿En serio solo le dirás eso?- digo exaltada.

— Mira, las dos sabemos que la entrenadora esta pasando por algo, y puede llegar a ser bastante grave, así que por el momento dejemos que cualquier cosa que le este pasando, debemos de respetar su opinión, y si no quiere nuestra ayuda es porque sabe lo que hace y va a estar bien.

En verdad, no se que le está pasando a mi Lindsey, esta muy poética. Pero igual estoy en desacuerdo con ella.

— ¿Pero que tal que lo que estés diciendo, no sea lo que en verdad esta pasando?- digo curiosa.

— En verdad no lo se Maddie, no lo se.

Cuando dice esto me callo, y empiezo a cambiarme de ropa.

***

Al terminar el entrenamiento, salimos en mi carro a toda velocidad, hasta llegar a casa de Chloe, la cual ya tiene todo listo, con mi vestido, varios peines, planchas y mis zapatos, ya que cuando se acabaron las clases, se fue a mi casa, a recoger lo que necesitaba de ropa, y a pedir planchas y peines en la casa de Lindsey, qué gran idea ¿no?

Tocamos el timbre y la mamá de Chloe, nos saluda para luego dejarnos entrar y guiarnos a la habitación de Chloe, en verdad, la casa es super gigante, casi parece una mansión, y al llegar a su habitación, dejamos caer nuestras quijadas ya que al parecer su habitación es super linda y grande, tiene su escritorio, su cama gigante, un sofá cama, un espacio exclusivo para todo lo de belleza, y hasta una parte para jugar just dance y todos los juegos de wii en verdad me fascinó.

Mientras me arreglaban el pelo y las sombras en los ojos comente porque Lindsey estaba tan poética.

Y lo que contesto me sorprendió bastante, no me lo esperaba....

Bueno esto fue todo espero les haya gustado, algunas partes son por experiencia.

Si quieren que les dedique un capítulo, voten...

Capítulo dedicado a: SCVarSan y a lalisyolo

¡Gracias por Votar!

un usuariomenciona un usuario


Guerra de ApuestasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora