Solos tu y yo

Sinopsis

Ya era de noche, el salón de clases estaba vacío, o bueno, casi vacío. Dos alumnos se encontraban aun arreglando sus cosas para ya poder retirarse.

-¡Apúrate imbécil! Ya me quiero ir -Dijo MyungSoo con desesperación.

-Que te esperes, ya casi termino- Respondió SungYeol con tranquilidad, acomodando sus cosas lentamente. Parecía que lo hacía a propósito.

-Eres un idiota- Dijo Myung y empezó a caminar hacia la salida.

-¡Espérame!- Gritó Yeol para después correr a él.

MyungSoo observó por todos lados y se dio cuenta de que ya no había nadie en el edificio, pero Yeol no se percató de que éste se detuvo y a causa de eso hizo que chocara con él.

-Eres un pendejo MyungSoo, ¿Qué crees que haces?

MyungSoo no dijo absolutamente nada, se dio la media vuelta y le sonrió a su amigo. De un momento a otro ya lo tenía acorralado en la pared.

-¿Q... qué haces?- Dijo Yeol nervioso.

-¿Tú que crees que hago?

Poco a poco acortó la distancia y empezó a besarlo lentamente.

Yeol estaba inmóvil, no sabía qué hacer. Los labios del más pequeño se movían con lentitud. Realmente se sentía bien el tener los labios del otro sobre los suyos.

Dejándose llevar, Yeol cerró los ojos y siguió el ritmo del contrario. Myung lamió los labios del más alto. El mayor supo de inmediato lo que su amigo quería, así que, abriendo la boca comenzaron una furiosa lucha de lenguas donde el dominante era Myung. El beso poco a poco se fue intensificando.

La falta de aire se hizo presente y ambos se tuvieron que separar.

-¿Qué... qué fue eso MyungSoo?

-Me gustas idiota

Yeol se quedó viendo a Myung por un momento mientras trataba de analizar lo que estaba ocurriendo, o más bien, lo que su amigo le estaba diciendo.

-No sé desde cuándo pasó o desde cuándo me empezaste a gustar, lo único que sé es que me gustas... y mucho

-Yo... tú... también me gustas

Ambos volvieron a juntar sus labios pero ahora en un beso necesitado, porque ambos tenían los mismos sentimientos.

Poco a poco caminaron hacia el escritorio en donde Myung acostó a Yeol en él.

Sin separarse del beso, el menor metió sus manos bajo la playera del más alto, acariciando la suave piel de su compañero, recorriendo cada rincón de su pecho. El chico que estaba debajo de él soltaba pequeños gemidos, que eran callados por el apasionado beso.

Myung, sin querer, tocó uno de los pezones del mayor. Yeol se separó del beso y dio un gemido ligeramente más alto. En los labios de Myung se dibujó una sonrisa por causar ese gemido con solo tocarle. Su mirada se posó en el rostro de su amigo y observó que estaba totalmente rojo. Era una vista verdaderamente hermosa. Sin avisar, el menor levantó la playera del contrario, quitándosela por completo y aventarla al suelo. Bajó su cabeza y comenzó a lamer uno de los pezones.

Los jadeos provenientes de Yeol no se hicieron esperar. La mano libre de Myung estaba acariciando el miembro del mayor por sobre su ropa, pero esto no era suficiente para el menor, quería hacerlo suyo de una buena vez. Dejó de acariciarlo, y con manos temblorosas empezó a desabrochar sus pantalones y bajarlos lentamente junto con su ropa interior, dejando expuesto su miembro.