Estiré mi brazo para alcanzar el botón de la alarma y apagarla de una buena vez, después abrí los ojos y me quedé mirando el techo por un momento. Luego de unos minutos me levanté y me vestí, ya que como la noche anterior me había duchado lo vi inecesario hacerlo ahora, tomé mis botas negras con tacón, luego me puse una falda de jean y junto con eso un sueter color vino, cuando ya estaba lista bajé al salón principal, en el cual se encontraba mi madre poniendo la mesa para desayunar, hoy habían waffles y yo opté para acompañarlo con mi café con leche.
-Sara amo tu cabello pero ya está bastante largo y creo que deberías cortar tu cabello—Mi madre estiró la mano hacia la cuchara que estaba a unos centímetros de ella para revolver su té con canela
-Buenos días para ti también y yo creo que mejor debería teñirlo— La verdad es que si tenía en mente teñirlo de algun color fantasía tal vez.
-No te hagas la chistosa conmigo, quiero que lo cortes hasta un poco más abajo de los hombros— Rodé los ojos
-¿Estás decidiendo por mi? No quiero que hagas eso mamá— Negó con la cabeza
-Mira, yo soy tu madre y sé lo qué es bueno para ti, mañana mismo pediré una cita en la peluquería— Bufé
-¿Mamá sabes lo que cuesta poder llegar a tener el cabello así de largo?No porque a ti te gusta llevarlo corto yo tendré que cortarmelo— solté un suspiro— además ya casi voy a cumplir veinte no puedes estar decidiendo por mi todo el tiempo y no puedo creer que estemos teniendo una "discusión" sobre mi cabello— hice comillas con los dedos.
-Bien, tu ganas, pero nada de teñírtelo— Quitó la cuchara de su taza y la acercó a su boca— Sonreí satisfecha y comencé a devorar los waffles, cuando ya había terminado lleve los trastes a la cocina y fui a ordenar mi habitación era un chiquero ya que aún no terminaba de desempacar desde que nos mudamos porque la verdad si me daba mucha pereza hacerlo eran como 5 cajas así que lo haré con el tiempo.
Cepillé mis dientes, tomé una chaqueta de jean y la puse sobre mis hombros, vi la hora en mi reloj13:15 Maldición llegaré tarde, aparté la vista del aparato, apagué la luz de mi habitación y bajé los escalones de dos en dos.
Jamás he sido impuntual, siempre me preocupo de llegar 15 o 20 minutos antes a algún lugar, pero hoy me pasé, me pone de los nervios llegar tarde y que todos me miren, odio ser el centro de atención, hoy volvería a la academia y retomaría lo que dejé hace un tiempo, el baile y estoy algo nerviosa llevo 3 años sin pisar ese lugar ya que mi madre y yo nos mudamos a boston por su trabajo y luego allí decidí no seguir con ello, no sería lo mismo pero ahora hace 2 meses hemos vuelto a Los Ángeles y me insentivó volver a la academia que tanto extrañaba.
-¡Mamá!— busqué desesperada las llaves de mi auto por todos lados y al no recordar donde las había dejado me desesperé aún más—¿¡Dónde están mis llaves!? A lo lejos escuché como mi mamá se quejaba que en esta casa no se puede dormir tranquila
-Sara, tus llaves están en la mesa—Mi madre las tomó y me las dio
-Oh, con que ahí estaban, malditas llaves, bueno má me tengo que ir, adiós—Le besé la mejilla y salí de casa
Llegué aproximadamente 30 minutos tarde al ensayo, tanto fue la impresión de los demás cuando llegué que todos hicieron un circulo a mi alrededor y comenzaron a preguntar en dónde había estado todo este tiempo y que me habian extrañado a lo que yo respondí a eso último con una sonrisa, luego de eso fui a la oficina de la señorita robinson la directora, ya me había contactado días atrás con ella y habíamos quedado de vernos en su oficina, toqué la puerta antes de entrar y lo primero que vi fue una chica pecosa y bajita, creo que es la hija de la directora, Sutton ella me miró por unos largos segundos rodó los ojos.
-Bueno iré a ensayar—Tomó sus cosasy salió con aires de superioridad. No le tomé importancia. Entré a la oficina la señorita Robinson y esta me recibió con un gran abrazo—¿Cómo has estado pequeña? He extrañado a mi mejor alumna— La directora me enseñó todo lo que sé del baile, siempre me decía que era una de las mejores, le sonreí por eso último—Extrañando el baile, aun que ya no soy tan buena como antes, no he vuelto a bailar de hace tres años estoy óxidada—Soltó una carcajada
-Querida siempre serás la mejor y no estás óxidada, sé que has estado practicando todo este tiempo—Negué.
-No claro que no, allá en Boston no estuve en ninguna academia, pero ahora he vuelto y quiero recordar viejos tiempos.
-Esa es la actitud Sara, es por eso que tengo una noticia que darte—Sus ojos brillaban de felicidad seguramente una competencia tiene que ver en esto es por eso que me anticipé
-No puedo competir si es lo que deseas, no ahora—Me crucé de brazos negando
-Por favor es en seis meses, tiempo suficiente para armar una coreografía además las finales serán en pareja así que te conseguiré una, sólo di que si—Me estaba rogando con la mirada, pero aún así me causaba temor sentía que no estaba lista.
-¿Estás completamente segura de esto?
-¡Claro que si! desde que hablamos el otro día te tenía en mente pero quería esperar a decirtelo en persona—Sonreí
-Bueno no esperaba que en mi primer día me dieran una noticia así—volví a sonreír—Bien y ¿quién será mi pareja?
-Sutton.
-¿Tu hija?—Asintió feliz y yo encarné una ceja.
-¿Ya no es tiesa?—Inquirí
-Pues ha estado practicando un año entero y la verdad es que ahora si se mueve muy bien—La última vez que había visto a Sutton fue hace tres años y para nada se movía bien, de hecho siempre que podía trataba de espiarme cuando practicaba y luego trataba de copiar mis movimientos.
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the feelings fade
Teen FictionJamás pensé que podía llegar a enamorarme, nunca habia creido en el amor, pensé que sólo pasaba en las peliculas que veía con mi madre pero todo cambió cuando comencé a pasar más tiempo con aquella chica. ESTO ES UN BORRADOR -22/03/2017