La Furia de Lauren (Camren)

Capitulo#25 Hospital

Después de toda tormenta, siempre viene la calma...

Lauren Pov

El sonido de una cálida voz que tarareaba una hermosa melodía, me hizo despertar del que mas que un sueño, parecía una pesadilla.

Poco a poco fui abriendo mis ojos para encontrarme con unos ojos verdes mirándome con total adoración. —Buenos Días mi amor.-Mi corazón se lleno de alegría al escuchar la melodiosa voz de aquella mujer que había luchado tanto por mi. Frente a mi, con una amplia sonría en su rostro, se encontraba mi madre.

—Megan...-susurré para luego sonreír al sentir las caricias que ella me estaba dando.—¿Que haces aquí?.-le pregunte.

Mi madre cambio su rostro y una mirada seria fue lo que recibí. Ella estaba cruzada de brazos.—Ya me han informado en todos los líos que te has metió. Oh mi amor, si tan solo me hubieses dicho. Podríamos haber salido adelante las dos, no había necesidad de meterse con esa gente.

Yo baje mi mirada apenada.—Yo solo quiera que estuvieras bien.

—Y lo estoy princesa, gracias a ti pero eso no significa que este bien lo que hiciste. Pudiste haber muerto, y sobre todo... Lo que ellos te hicieron.

—No quiero recordar eso.-le dije.

—Tendras que ir con un especialista y lo sabes.-me dijo y era cierto, tenia claro que debía visitar a un psicólogo. Lo que había vivido y todo lo que había pasado me afecto tanto física como psicológicamente. Se que necesito ayuda y no me negare a nada.

—Lo se Mamá, es solo que.-en ese momento el recuerdo de un castaño vino a mi mente.—¿Mamá donde esta Zac?.¿¡Donde esta!?.

Sin que Megan pudiese detenerme, me quite las cosas que estaban conectadas a mi y con dificultad me levante.—Debo verlo Mamá, ¿Donde esta?.

Salí de mi habitación recibiendo gritos por parte de Megan quien intentaba hacer que regresara a la habitación. A mi no me importaba, debía verlo, el... El tenia que estar vivo.

Mire en la habitación junto a la mía y agradecí que en la etiqueta dijese Somerhalder.

Abrí la puerta sin tocar y lo que vi frente a mi me dejo sin habla.

—Recuerde joven Zac, debe tomarse sus medicinas.-

—Lo se, es solo que me gusta mas que tu me las des.-Le dijo el castaño con una sonrisa a la enfermera que prácticamente parecía un tomate de lo sonrojada que estaba.

Yo apreté mi puño con fuerza y con todo el enojo del mundo dije.—¿Podria dejarnos a solas?.-le pedí a la enfermera. La chica me miro confundida pero al ve la ira en mis ojos, no hizo mas preguntas.

La chica salio casi disparada de l habitación mientras yo caminaba hasta la cama de mi hermano.

—Oh Lauren querida, no te habia visto.-dijo Zac, quien estaba cambiando el canal en la Tv frente a el.

En la mesita junto a el, había un vaso con agua, el cual tome y Vertí sobre la cabeza del chico.—¡¿Pero que mierda te pasa?!.

—¡Me pasa que eres un idiota! ¡Fingiste todo!.-Le reclame y una risita escapo de sus labios.

—¡No fingí! Estaba actuando.-Dijo y tuve ganas de ahorcarlo por lo idiota que era.—Ademas la doctora dice que tuve suerte de que la bala entrara y saliera. Aparte no daño ningún órgano.

—¡Crei que moririas!.-le dije y mis ojos comenzaron a humedecerse con el recuerdo de ese momento.

Zac me vio y por fin pude ver la culpabilidad en sus ojos.—Yo... No quise asustarte Lauren pero... Las cosas que decías eran tan lindas que yo, yo solo no quería que te detuvieras.