La verdadera Marie.

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Por suerte me libre del incidente con mi madre, pero aun queda resolver los problemas en la escuela, como haré para sacarme a todas las chicas de encima.

¿Me desfigurare la cara?, o mejor me cambio de sexo, no se?, y todas estas opciones suenan muy poco probables y estúpidas porque nunca lo haría, pero...

En ese momento sonó el timbre de mi casa, y mientras abría la puerta, no podía creer lo que mis ojos vieron.

-¿Marie?

-Ah si hola, emmm... solo pasaba por aquí y... me decidí a saludarte.

Creo que esa fue una muy mala excusa de su parte ya que hace unos minutos prácticamente la eche, note sus intenciones desde que la vi en la puerta. Hay que dejar claro algo sobre mi, con otros hombres nunca me llevare bien porque aquí yo soy el rey, pero las chicas, son mi maldita debilidad, en verdad es una maldición.

-Marie, estas segura de que solo pasabas por aquí, vives a 5 casas, tampoco es tan lejos, y hace un rato estabas aquí.

No puedoo negar que se veía hermosa, con ese vestido blanco floreado, y su pelo rubio en una cola alta, esas pecas en las cuales me pierdo... demonios, mejor dejo de pensar en esto. 

-Eh si, pero bueno es que pensé algo y quise venir a hablar contigo, perdón por mi tonta excusa, pero es que con respecto a lo que paso hace unas horas, no me eh quedado tranquila después de eso.

-Ah si, jajajajajaj, no te preocupes no tiene importancia. oh em... perdón, donde quedo mi caballerosidad jajajajaj, pasa, si vamos a hablar no se ve bien estar en la puerta.

En que estaba pensando cuando la invite a pasar, rayos después de lo de hace rato, creo que esta no ha sido una buena idea.

Mi madre observaba desde la cocina y de repente vino hacia nosotros, y mi semblante...es muy incomoda esta situación, Porque a mi? soy idiota, ya no hay forma de retractarse, y mucho menos zafarse de esta.

-Ummm, ¿quien es esta linda chica que nos visita hijo?

-Em, M-ma-maría luisa- miento, en ese momento cubro mi boca con mi mano un poco desconcertado, por mi facilidad y rapidez papa mentir, pero dudo que mi madre crea mis mentiras con mis titubeos, son años de practica, no debía decir su nombre luego de lo que mi madre oyó.

Marie me mira con el seño fruncido y dudosa.

-Buenas tardes señora- dijo Marie mientras sonreía.

- Mamá qué tal si le traes algo de tomar a Marie- y termino jodiendo la mentira, porque no es fácil bajo tanta presión.

-O claro ¿que quiere tomar la nueva amiga de mi hijo?

yo me muerdo la lengua al escuchar la... y cuando terminó la oración sentí alivio.

 Marie me miro con cierta cara de duda, y yo la miraba con cara de "tranquila, todo esta muy relajado", estaba metido en una muy fea situación y sabia el interrogatorio que pasaría por los siguientes 5 días sobre "mi amiga" y el interés que mi madre depositara en ella.

En ese momento mi madre se retiro, no se adonde porque supuesta mente buscaría una limonada, pero me pareció algo sospechoso que tomara el pasillo a la habitación y no a la cocina.

Luego de un rato en silencio sentados en el sofá de la sala Marie rompió el hielo.

-Eh, la razón por la que vine es porque quiero disculparme contigo por lo que hice.

- pfff no entiendo ¿que me hiciste?- en ese momento pensé, no me ha echo nada que yo no esperara que hiciera, y me eh armado mas líos de los que ella me armo, quizá la culpe mal y le eche mas culpa de la que en verdad tiene, pero en el fondo, no es tan simple para mi admitir que no tengo razón y que soy culpable, me ahogo fácilmente en un vaso de agua.

El mejor peleadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora