Si ya se que dije que el viernes, pero me aburrí hoy así que aquí tienen.💛
Falta epílogo, ¿ok?Instintivamente marque a la casa de Claudia. Uno, dos, tres, cuatro timbres... nada. Las manos y las piernas ya comenzaban a temblarme. Marque a su celular y rápidamente me mando a buzón.
Esto no estaba nada bien.
Opte por marcar el teléfono de Agustín, pero al igual que su madre, me mando a buzón.
¿DONDE DEMONIOS ESTABAN?Comencé a sollozar. No podía salir y gritar como una loca en la despedida de Karol, ella debía disfrutar no tendría por qué agobiarla con mis sospechas de que Jorge estuviera con mis hijos o me estuviera vigilando. Debía calmarme y tratar de buscar una solución.
Mi celular comenzó a vibrar. Poniéndose el número desconocido en la pantalla, que ya sabía que era de Jorge. Así que conteste.- ¿H-hola? - Hable más que asustada.
- Hola preciosa. - Mi respiración se agito un poco más. - Hay alguien que quiere saludarte.
- ¡Carolina lo lamento! ¡No supe que hacer! ¡Lo lamento mucho! - Claudia. Gritando. Llorando desconsoladamente.
Lo primero que se me vino a la mente fueron mis hijos. Mis hijos estaban con ese psicópata y temía mucho por ellos. La sangre se me helo al momento que supe que Claudia y mis hijos estaban en peligro.
- ¡Ya cállate! - Silencio. - Ahora sí... Bella y Eithan están dormidos muy tranquilamente, se ven tan tiernos mi niña. - Una lágrima corrió por mi mejilla. - No quiero lastimarlos Caro...
- Por favor no... - Susurre interrumpiéndolo. - Haz lo que sea conmigo, pero mis hijos no, por favor... - Soltó una carcajada.
- Ay mi linda Carito, si así lo quieres debes de seguir mi plan al pie de la letra. No le hablaras ni a Agustín, Karol, la policía o equis persona sobre esto, ¿quedo claro? - Solloce y dije un poco audible "si". - Vendrás a la casa de tu suegrita, y les inventaras que te sentiste mal. Al momento de llegar aquí, le dejaras una nota a Agustín y no te preocupes por su mamita, yo me encargare de que no intente sermonearte. Si haces algo que vaya en contra de mis reglas, tus hijos y la mama de la escoria no podrán tener un final feliz. Te adoro lindura, aquí te espero. - Y colgó.
Me pegue a una pared tratando de reflexionar en los últimos momentos lo que acaba de pasar. ¿Cómo llegue a esto? ¿Qué le hice para merecer tanto desprecio de su parte? ¿Qué quería de mí?
Mi celular volvió a sonar, esta vez la foto de Agustín y yo se encontraba en esa pantalla. Era él.- Hola mi amor, perdón si no te conteste, se puso muy bueno el ambiente, ¿paso algo? - Contesto muy entusiasmado. No pude evitar que otra lágrima corriera por mi mejilla, mientras él no se imaginaba lo que estaba ocurriendo en la casa de su madre, en contra de ella, sus hijos y contra mí. - Amor, ¿estas ahí?
- Ah sí si, aquí estoy. - Trate de sonar lo más tranquila que pude mientras limpiaba las lágrimas que salían de mis ojos. - Me alegra que te la estés pasando bien, sigue divirtiéndote.
- Preciosa, te conozco perfectamente, sé que te ocurre algo. - Insistió y más lágrimas amenazaban con salir.
- Lo siento Agustín, te amo mucho mi amor, eres lo mejor que me pudo pasar en toda mi básica vida y quiero que sepas que siempre cuidare de ti así como de nuestros mellizos, son lo mejor del mundo - Y las lágrimas hicieron su aparición. - Cuida mucho a Eithan, que sea un caballero como tú, protege a Bella de los malos hombres y dile que siempre estarás para ella cuando te necesite, te amo demasiado Agustín Bernasconi.
- ¿Carolina que sucedió? Mi amor ¿qué está pasando? - Estaba preocupado. No podía articular ninguna palabra más así que decidí salir, ignorando todo a mí alrededor. Tenía que hacer esto rápido y no poner en riesgo a las personas que yo más quería. - Espérame ahí preciosa ya voy para allá. - Colgué.
ESTÁS LEYENDO
Mi Gran Tentación • Aguslina
Fiksi Penggemar"• Agustín y Carolina se conocen de una manera no tan agradable. Al principio la tentación juega con ellos y antes de que se den cuenta, ambos caen enamorados el uno del otro, llevando así a está historia a otro nivel. Peleas, secretos y amoríos, es...