La noche era tan oscura, como el color de su cabello. Ya todos se habían ido a dormir y podía tener mi momento de tranquilidad, por lo general mi lugar de paz se encontraba en la terraza de lo que llamaba hogar. Con los auriculares podía escapar a donde yo quisiera, recordar mis libros... además de intentar crear historias pero no encontraba una forma de comenzar las historias.
Recordé los susurros que me decía al oído, repetía mil veces mi nombre con tanta timidez, pero seguro de lo que sentía.
El calor de mis mejillas ya era tan insorpotable, estos sentimientos no podía controlarlos; aquellos susurros se transformaron en pequeños gritos, aguante hasta que lo escuchaba tan claro y subí el volumen de mi mp3 para tratar de olvidar lo ocurrido.
-piensa en otra cosa, en libros, ¡la tarea del colegio! creo que me toco hacer una exposición en biología con... - mierda, piensa en otra cosa, ¿acaso eres un niño?. Me sentí totalmente patético hablando conmigo mismo.
Tenia que acudir a alguien, que me aconsejara. Mis dos caminos del destino eran fríos, asechados, por personas que conocía por su crueldad, podrían insultarme, juzgarme, e incluso llegar a provocar una violencia física, un sin numero de posibles situaciones hicieron que un escozor invada mi cuerpo, a partir de la planta se los pies hasta llegar a mi nuca.
ESTÁS LEYENDO
Después de clases
Teen FictionSi pudiera corregir todo, lo aria. lo amo y soy capaz de dejar todo atrás para estar con él, aunque nos juzguen con la mirada o nos insulten. No dejare de amarlo con locura y protegerlo de aquellos enemigos que por ahora debo decirles mi familia. T...