Capítulo 4:¡A la busqueda de María!

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Desayunamos unas manzanas que cojimos de un manzano cercano y un vaso de leche.

-Estoy Llena-Se quejó María-¡Ire a dar un paseo para perder calorías!-Dijo.

Los demás nos quedamos en él reyano.

Andrés y yo estuvimos comiendo patatas lays, y Rodrigo estuvo mirando las nubes.

-¡Es una bicicleta!-Dijo Rodrigo.

-No, es...¡Un pandicornio!-Exclame.

La verdad, es que esto de buscar formas a las nubes no se nos daba nada bien.

Andrés se fue a su tienda de campaña a leer.

María llevaba ya 3 horas fuer, así que decidimos ir a buscarla. Llame a Andrés pegando una voz, pero no salía. Entonces me metí en su tienda de campaña.

-¿¡EL CORREDOR DEL LABERINTO!?-Pregunte-Es mi libro favorito-Dije.

-¡El mio también!-Exclamo él.

Salimos de la tienda de campaña y fuimos a buscar a María.

-¡María!-Gritábamos,pero sin obtener ninguna respuesta.

Andábamos y andábamos, pero no encontrábamos nada, ni una simple pista.

Estábamos desesperados, y ya estábamos pensando volver al regañó, pero de repente grito Rodrigo.

-¡Mirad chicos!-Y señalo con su dedo a un trozo de ropa.

-¿Y que pasa? Es un simple trozo de tela.-Dijo Andrés.

-No, no es una tela cualquiera- Respondio Rodrigo.-¡Es un trozo del pañuelo que llevaba atado al cuello!.-

-¿Y como sabes tantas cosas de ella?¿Acaso te gusta?- Preguntó Rodrigo.

Él se rasco la cabeza y se puso rojo como un tomate, entonces yo no pude evitar soltar una carcajada que sonó en todo él bosque.

A la oscuridad del siniestro bosque.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora