Muchas veces dar todo por una persona no resulta bien.
Las palabras que salieron de su boca aquel día -en que indirectamente le pregunté si yo le podría llegar a gustar- resonaban en mi cabeza.
"No digas tonterías "~ Se carcajeó
Desde aquellas palabras sabía que mi corazón sería destruido en miles de pedazos.
"Eres insoportable, llorón, infantil y me das asco "~enumeró aquello con una sonrisa burlona.
"Deberías cambiar o alejarte de mí, no te soporto"
Ese había sido el cumpleaños más cruel y horrible que he tenido.
No iba a cambiar por una persona. Entonces prefería alejarme de Jeon antes que humillarme más. Le había dado mi atención, mis mimos, regalos, dulces palabras y promesas cumplidas, sin embargo yo sólo recibía miradas de desprecio, empujones y palabras hirientes. Al parecer me gustaba la manera en la que me trataba pues, había tolerado mucho tiempo.
¡Oh amado JungKook! ¿Por qué no me amas?
¡Oh querido JungKook! Me cansé de rogar.
¡Oh dientes de conejo! ¿Por qué no me amas?
—Tierra llamando a Chim Chim—NamJoon pasó su mano frente a mi rostro.
—Lo siento hyung—NamJoon sonrió y negó despeinando mi cabello.
—Debemos irnos ya—tendió su mano para ayudarme a levantar puesto que me encontraba sentado en el suelo.
—Gracias— el asintió y emprendió su camino.
Miré la figura alta frente a mí, caminaba con torpeza y algunas veces miraba sobre su hombro para asegurarse de que yo siguiese tras de él. Jamás hemos sido cercanos tal vez porque siempre la pasé tras de JungKook o YoonGi.
— ¿No vas a subir? — la voz del líder me trajo al mundo real.
Observé la camioneta, los otros chicos nos esperaban dentro. Sonreí levemente.
— ¿Puedo ir al frente contigo y Jin?
Nam sonrió de lado.
—Tendrás que sentarte en mis piernas y no creo que eso te agra...
— ¡No importa! — me apresuré a responder.
Quería seguir evitando a JungKook.
—Entonces subiré primero.
Abrió la puerta de la camioneta y se sentó, palmeó sus piernas y con un leve sonrojo me senté en su regazo.
—Tenemos un pequeño compañero—Jin me sonrió.
El camino fue relativamente tranquilo. El líder acariciaba mis caderas mientras admiraba el paisaje nocturno, habíamos acabado la temporada de comeback y ahora nos esperaban dos meses de descanso, no sabía qué hacer, tener a JungKook así de cerca no me dejaría bien, llegamos a casa y TaeHyung corrió a nuestra habitación, el pequeño flash ya estaba cansado.
—Descansa Chim Chim—Rap Monter acarició mi mejilla y le dio un leve apretón.
No respondí, solo sonreí, ya que mi mente estaba armando planes para escapar de JungKook.