Los Ojos De Mis Sueños

Sueño 1: Lagrimas

Él calor de las sabanas me enreda tan fácil en un sueño que casi ni me doy cuenta

Él interior es frío, y siento mojado todo él cuerpo, mi respiracion se vuelve pesada, y cuando me intento mover siento la realidad, estoy en agua, pero... ¿Como es que puedo respirar?
Una luz verde se produce frente a mi y entonces, como si fuera telón, comienza a subir, pero no, yo voy bajando, siento como la parte detrás de mi esta caliente, con relieve y bellos, es... Es un rostro... Entonces las cosas toman forma.
Es una sala pequeña, oscura, y fea, solo hay una mesa de metal frente a nosotros, dos puertas mas allá y una lámpara arriba, y se que somos nosotros por que puedo sentir a alguien mas, tal vez es la persona de la que bajo por su rostro en una gota, o tal vez una lágrima.

–Daemon– una voz gruesa y fuerte se escucha pronunciando mi nombre.
Con él miedo en las venas y la confusión en mi cabeza, contesto:
–¿Si?–
–Oh, que bien que me escuchas, ¿sabes donde estas?, ¿tienes idea de quien soy?– la voz es lenta, y muy gruesa, probablemente suena en toda la sala, y llego a la conclusión de que puede que sea la persona por la que bajo, la cuestión aquí es... ¿Como es que él me escucha a mi?
–no– contesto dentro de la gota, con la extrañeza de poder hablar bajo él agua y respirar sin problema
–Estas en un sueño, pero esto es real, y nesecito tu ayuda...–
Las palabras que entran por mis oídos apenas las puedo razonar, ¿Un sueño?, ¿como es eso posible?, y... ¿esto real?, ¿me drogue antes de dormir?
–un... ¿un sueño?– pregunto acercandome cada vez mas al precipicio de la mandíbula de este enorme hombre.
–Te lo explicare si me ayudas a salir de aqui–
–okey..., y... ¿como te ayudo?–
–primero que nada, debes tener muy en cuenta que son sueños, así que puede hacer prácticamente lo que quieras con ellos, así que sal de esa gota, vuela hasta detrás de mi, y quita él candado–
–¿como dijiste...?, ¿volar?, ¿salir de la gota?–
–tu solo hazme caso, intentalo, solo imagina que lo haces, y las cosas se darán solas, claro, si te concentras y crees en hacerlo, si no, no servirá de nada–
–¿y por que no lo haces tu?– pregunto mientras puedo ver la caída enorme desde la mandíbula de este hombre hasta su pantalón. ya que esta sentado.
–por que tu estas en un sueño, yo no... Te explicare cuando me saques de aquí, pero por lo mientras... ¡Ayudame!–

Algo en sus palabras hace que la curiosidad me coma, y haga que le crea, por que aparte de que estoy dentro de lo que probablemente es una lágrima, y de que el es un hombre enorme, un poder dentro de mi llama.
Así que hago lo que dice... Creo en poder hacerlo.
Me levanto entre la gota de su piel y él aire pesado del exterior hace que casi me ahogue.
Separo una pierna de la piel de él, algo en mi deja que cede, un sentimiento de relajación y confianza corre por mis venas, y me dejo caer, él aire pesado de aquí hace que valla lento, abro los ojos y me detengo en él aire... VOLANDO!!!
Mi nerviosismo y entusiasmo casi me hacen caer, pero mantengo mi postura.

–¿ves?, te lo dije, ahora, el candado–dice el hombre, asiento.

Comienzo a volar al rededor de él, lleva una playera negra y sus pantalones son color beige, tiene un pecho y unos brazos musculosos, su respiración es agitada y fuerte.
Doy vuelta a todo su torso, y detrás, sus manos amarradas con cadenas, ahí esta un candado.
Me acerco volando rápido, aterrizo en la entrada para la llave y comienzo a entrar, pero se escucha un ruido extraño de fuera.

–ahi vienen, date prisa antes de que te detecten, y no hagas ruido– dice él hombre, y con él corazón en la boca, preguntándome ¿Quienes serán de quienes habla?, entró en él candado.
Aquí esta frío, es oscuro, pero siento relieves, y metal, así que aprieto todo, dejando todo en su lugar al mismo tiempo, y él candado hace un "Click".
¡Ya esta abierto!
Él sonido de una puerta abriéndose  se escucha mientras salgo del candado y me pongo en la silla donde esta sentado él hombre, que por cierto, esta su trasero aquí.

–Valla, Valla, miren a quien tenemos aquí... Al mismísimo David Rokenham, que milagro que te dejas ver, ¿Que te trajo aquí David– dice una voz, esa voz se me hace conocida, aunque él tamaño hace que la voz se distorcione, él tono y un pequeño acento en las palabras hacen que las entrañas se me muevam, tratando de encontrar en mi serie de archivos mentales de quien es esa voz.
–tus hombres me trajeron aquí–dice sarcástico David, una pequeña carcajada fingida viene del otro señor.
–Ja-Ja-Ja... No te intentes hacer él gracioso conmigo David... Ahora dime... ¿Que información me traes del sospechoso?– Dice él hombre... ¿sopechoso?, ¿de quien estará hablando?
–no mucho, cometió estupideces–
–como todos los días... bueno, ¿alguna señal de sus anomalías?–
–no, nada en particular...– un silencio se produce y puedo ver ciertas partículas pequeñas de color rojo flotando por la habitacion– a menos que  el que ya comience a soñar cuente –
Esa frase me produce escalofríos, y una corriente eléctrica recorre mi cuerpo.
–¿Ya comienza a soñar?– la voz del hombre se escucha de preocupación, como si de algo malo se tratara
–en definitiva, y para que me creas... Esta aquí...– algo en mi recorre mi cuerpo y me levantó flotando de la silla – ¡AHORA DAEMON!– Entonces algo en mi se activa y las cosas cambian de tamaño rápidamente, o mejor dicho, yo cambio de tamaño, pero entonces... Entonces veo al hombre... Es... Es mi padre.

Su mirada transmite miedo y preocupación, pero rápidamente se convierte en odio, mientras que dentro de mi, algo se produce, una combinación entre sorpresa, miedo, confusión. y trizteza.
Él frunce él ceño expresivamente y lanza algo con su mano, una bola blanca, que parece luz, luz esférica.
Mis reflejos actúan, dejando de lado a los sentimientos, y mis manos se ponen frente a mi, deteniendo la bola de luz blanca a unos centímetros de mi, levitando entre mis palmas.

–¡SAL DE AQUI DAEMON–grita David, y mi cuerpo se mueve, corro hacia la izquierda, donde se encuentra una ventana, un estallido de escucha detras de mi, salto hacia la ventana, haciendola desaparecer con solo pensarlo y comienzo a volar, volar hacia arriba sin voltear, él aire es pesado y mal oliente, me detengo un segundo, y veo algo de lo cual me arrepiento ver.
Es una ciudad negra, atascada de smogh y edificios grises, la lluvia cae tan pesada y salada como lágrimas, lágrimas de la pena de esta gente, entonces volteo, y una bola blanca se acerca...
Se acerca tanto que apenas la distingo... Y entonces... Un dolor en él pecho hace que despierte, él color gris de la cuidad desaparece junto con la bola blanca, al aire entra a mis pulmones como si fuera mi primera no bocanada en mi vida.

Entonces lágrimas salen de mis ojos, mis sentidos vuelven en si, puedo sentir mi alrededor, escuchar maquinas y a personas suspirar, y cuando abro los ojos, veo que me encuentro en un quirófano.