Severus Snape y la princesa de ojos esmeralda (Las leyes del amor)

Un rescate y palabras de vida

Sin pensarlo dos veces...tomé aire e impulso y salté del puente...al sentir el contacto con el agua busqué alguna señal de Melissa, pero con la poca luz de los faroles de la superficie era imposible...¡¿Dónde estaba?! DIOS..si no la encontraba...jámas me lo iba a perdonar... me pasó una vez...pero no iba a volver a ocurrirme...volví a tomar aire y me sumergí más profundo...entonces recordé...¡Tenía mi varita en el bolso de mi pantalón! (Había convencido a Dexter que me dejara llevarla por si teníamos oportunidad de cachar al homicida) Volví a tomar aire y dije:

Me pareció original poner el soundtrack de la Sirenita de Alan Menken para cuando Severus busca a Melissa, la encuentra y la salva. Todos los derechos.

-¡LUMOS MÁXIMA!-

Me sumergí en las negras aguas y con varita en mano busqué por los alrededores...hasta que distinguí unos cabellos rojos que flotaban en la negrura del agua...¡Melissa! Inmediatamente la tomé en brazos y traté de impulsarla hacia arriba...pero me di cuenta de que se había amarrado una piedra en los tobillos que no había notado cuándo saltó....pensé en la cuerda rompiéndose y tal como a Dexter cuando pensó en ordenar su despacho así pasó....volví a intentarlo y está vez pude llevarla a la superficie del agua. Distinguí que alguién me llamaba del otro lado del puente:

-¡Severus! ¡Por acá!- Al acercarmé distinguí a Lovelace junto con sus amigos

-¡Nada hacia la orilla!-gritó Severine

Obedecí y con verdadero trabajo logré llegar a la orilla, manchando nuestra ropa de lodo y pasto. Con los dientes apretados, dije:

-Robert...la traicionó...intentó matarse- Me incorporé y le apliqué primeros auxilios a Melissa, mientras le susurraba :¡Vamos....respira.... por favor! ¡No me hagas esto!

Melissa abrió los ojos lentamente y empezó a toser el agua que había tragado...al vernos alrededor de ella, empezó a llorar. Severine la rodéo y le dijo:

-¡Nos diste un buen susto a todos! ¡¿En qué pensabas amiga?!-

-Él me traicionó, con esa...-y rompió a llorar.

Trató de incoroporarse pero se tambaleó...logré asirla a tiempo antes de que se cayera al suelo...al tocar su mano dije:

-¡No reclames Severine!....¡Ésta débil y helada! Será mejor que vayamos a casa...antes de que alguien más venga...- ella me miró sorprendida pero luego asintió con gravedad.

-¡Lakatos...vete adelantando por favor...dile a Stephen que preparé un baño caliente y caldo de pollo, por favor!- Lakatos asintió y corrió en dirección a la casa sin mirar atrás.

Melissa trató de caminar, pero al querer hacerlo volvió a tambalearse...realmente estaba débil por el frío del agua...Inmediatamente le pregunté:

-¿Puedo?- al ver que abría los brazos para cargarla.

Ella me miró sorprendida pero asintió leve..la cargué en brazos y dije:

-¡VÁMONOS! ¡Si nos quedamos más tiempo...se debilitará más!-

                                                                                      ...

Al poco rato Melissa estaba vestida con ropas nuevas, abrigada con una manta gruesa y tomando a intervalos una rica sopa de pollo para el alma. Lovelace y Aldridge estaban que hervían en rabia:

-¡MALDITO TAL POR CUAL! ¡MELISSA...DEJAMÉ IR A DARLE UNA BUENA!-

-¡QUE DIOS LO PILLE CONFESADO EN EL PURGATORIO!-

Severine también hervía como olla express, pero se calmó y abrazando a su amiga dijo:

-Señores...Melissa necesita tomar un respiro...pero...dime amiga...¿Cómo lo descubriste?-

-Cuando mis padres me llevaron en el coche a casa, no sé cómo, pero logré escabullirme entre los invitados y tuve una corazonada...y fui hacia el restaurante italiano dónde me llevaba varias veces...ahí lo vi...y no lo soporté más...- ella rompío a llorar. Entre todos tratamos de consolarla.

-Pero...¿Cómo me encontraron?-

-Fue gracias a Severo...Melissa...él sospechó de la ausencia del novio cómo nosotros...y al parecer tuvo una corazonada al querer buscarte...él te salvó la vida..- dijo Lovelace.

Melissa me miró con los ojos sorprendidos y me dijo:

-Gracias...creo que no sabía lo que hacía...estaba loca de dolor...siempre se lo agradeceré-

-¿Por qué no nos dejan un momento a solas, por favor?- pedí. Mis amigos me miraron sorprendidos pero Severine los instó a hacerlo, al subir las escaleras, sonrío pícara.

-No tiene que agradecer..sólo...no vuelva a hacerlo...-

-No sé si podré hacerlo...siempre he sido desdichada en el amor...todos han querido aprovecharse de mí de una forma u otra. Cuándo conocí a Robert..creí que mi "mala suerte" se había terminado...pero no fue así...¿Acaso hay algo mal en mí?- dijo para sí misma.

-¡No! ¡La culpa la tienen todos esos imbéciles que no saben distinguir a una gran persona como ud. Melissa!- dije convvencido. -Quién es infiel a su conyúge..tarde que temprano cargará con la consecuencia de su error...el ser infiel es uno de los peores pecados para personas tan bondadosas y amorosas como ud. Lo sé...Se le llama derecho de restitución. Si alguien hace algo malo, lo pagará mientras que a la persona afectada, con el tiempo, de una forma u otra recupera lo perdido. Claro que no cómo uno piensa o se lo imagina a veces...pero es una ley del universo.-

Melissa sonrió débilmente y tomando una cucharada de sopa, dijo:

-¿Usted ha sufrido también por amor Severo?-

Miré esos ojos claros y dije tristemente:

-Una vez...era mi mejor amiga...ella podía ver luz dónde otros no...me motivaba a ser mejor...me enamoré de ella..pero..cometí un error...por enojo...le falté al respeto cuando debí callarme y...ella nunca me perdonó...después se casó con otro y tuvo un hijo....me alejé de ella..pero nunca dejé de pensar en ella...cuidando de cierta forma a su hijo...ya que para ese entonces...había muerto junto con su marido....pero conforme lo hacía...aprendí a ser fuerte por amor.-

Melissa escuchaba atentamente y me acercó una mano cómo consolándome..

-Lo lamento...de verdad...debió ser una gran mujer para que ud. nunca la olvidará...-

-Lo fue...(y puedo verla otra vez frente a mí) y sé que si yo pude aprender de mis errores, sé que ud. también puede hacerlo Melissa.-

-Gracias Severo...creo que de ahora en adelante tendré cuidado con quién ando...es justo...debo aprender a dejar el pasado atrás y ver hacia adelante...sin dejar de amar...-

Asentí y le sonreí...ella me devolvió la sonrisa y acabó de comer su sopa para poco después subir a su cuarto mientras yo la veía en silencio...