Una luz golpea delicadamente mis ojos, indicándome que ya es el otro día mientras los pájaros cantan y veo la nieve. Me estiro un poco y al sentir que el otro lado de mi cama está vacío, me siento sobre esta rápidamente, me cubro con las sábanas e inspecciono nuestro cuarto. No veo a Michael, así que me arrastro hasta la orilla de la cama para salir de esta, me dirijo al baño y seguido de esto me cepillo los dientes, me lavo el rostro para despejar mi cara de zombie y salgo, doy un respingo cuando veo a Michael sentado en uno de los sofás del cuarto y mando mi mano a la zona del corazón dando un fuerte suspiro.
—Pensé que te habías ido a trabajar —Supuse mirándolo de reojo y me dirigí al closet.—
—No, estaba abajo desayunando, subí a ver si ya habías despertado —Siendo como se dirige hacía a mí, entre zancadas y me abraza por detrás dando un pequeño beso sobre mi hombro derecho.
Oh, desayunó solo.
—Pensé que desayunaríamos juntos —Murmuro mientras juego con mi cabello— En fin, me vestiré para bajar a desayunar también —Digo mientras busco con mis ojos alguna prenda en mi closet.
Michael se aleja y responde.
—Bueno, es que me toca ir a la empresa. Tenemos que empezar a mirar cómo vamos a sacar la boletas, donde vamos a dar los conciertos y otras cosas pendientes —Me giro y lo miro, él me sonríe tiernamente.
—¿Puedo ir contigo? —Pregunté esperando que me dijera que si, luego vacilé porque después de todo Sofí está aquí con Janet, me podría quedar con ellas. Él me mira sorprendido.
—Pero te aburrirías ahí —Indicó, mientras lleva un mechón de cabello detrás de mi oreja — Mejor quédate aquí con Sofí y mi hermana, ellas quizás son más divertidas que un montón de trabajo —Dice mientras yo juego con los botones de su chaqueta.
Después de unos minutos pensando, él tenía razón, así que le acepté esa propuesta, giré otra vez al closet, busqué un vestido, unas sandalias y los puse sobre la cama, luego me puse de puntas y le di un beso casto y me fui al baño a darme una ducha, pasaron 15 minutos, ya Michael no estaba, empecé a vestirme, me maquillé natural y me recogí el cabello en media coleta dejando mis rizos caer sobre mis hombros.
Llegando al comedor, me encuentro con Janet y Sofí que estaban tomando una taza de café, me acerqué a ellas, las saludé de un beso en la mejilla y me senté a platicar, llega Karlota con mi desayuno y me dispongo a comer mientras escucho a mis amigas hablar sobre varios temas.
Hago una pausa y las miro.
—¿Y Michael? —Pregunté observando el lugar, Janet fija su mirada a mí y me sonríe.
—En la biblioteca, querida —Me responde mientras me hace me mira dulcemente.
—Oh, aún no se ha ido —Balbucee y ella me seguía mirando, yo sacudí la cabeza y la miré de vuelta con una sonrisa— Pensé que ya se había ido.
—No, todavía no —Responde Sofía.
Un aroma muy familiar inundo mis fosas nasales, era él quién se hizo presente en el comedor. Todas giramos al verlo, se veía hermoso, irresistible y mío. Le dimos una gran sonrisa, él se acerca, deposita un beso sobre mi cabeza, luego saluda a su hermana de un beso en la mejilla al igual que a Sofía e indica que ya se irá a la empresa. Me paro frente a él, le arreglo un poco la chaqueta, inhalando una vez más su aroma y él me toma de las muñecas, con un gesto que me toma por sorpresa.
—¿Qué pasa? —Pregunto asustada, él me mira igual de sorprendido.
—Nunca nadie había tenido ese gesto conmigo.
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Casados a la fuerza © [TERMINADA] #Sakura2019
Romance"No podía verlo, me daba ira máxima, con sólo sentir su presencia". Lo que ella no caía en cuenta, es que del odio al amor, sólo hay un paso. María, la criada mas joven de la mansión Neverland, donde actualmente vive Michael Jackson, el famoso c...