Porque una vez
estuve enfrente de la mujer más hermosa del mundo
y cerré los ojos,
como se hace
para pedir deseos
cuando pasa una estrella:
en silencio,
pedí que se quedara
pero ella también
era fugaz.
Porque una vez
estuve enfrente de la mujer más hermosa del mundo
y cerré los ojos,
como se hace
para pedir deseos
cuando pasa una estrella:
en silencio,
pedí que se quedara
pero ella también
era fugaz.