Capítulo 46

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Cansada apagué el despertador mágico. Me levanté con cuidado de la cama para no despertar a Severus y tomé mi varita de mi mesilla de noche. Me dirigí silenciosamente a mi vestidor y me arreglé para después dejar una nota al lado de la varita de Severus para que supiese que ya me había ido.

 Me dirigí silenciosamente a mi vestidor y me arreglé para después dejar una nota al lado de la varita de Severus para que supiese que ya me había ido

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Después llegué al comedor donde uno de los elfos me sirvieron mi desayuno para marcharme a la editorial Black.

Nada más llegar me dirigí hasta el departamento de libros de texto para hablar con su administrador, pero en el camino una secretaria me detuvo.

-¿Señorita, puedo ayudarla en algo?-Dijo con una sonrisa amable.

-Sí, ¿Podría llevarme al despacho del regidor de los libros de texto?

-Por supuesto, pero hay dos secciones. Está el que abarca los de hechizos y pociones y el que abarca los relacionados con el conocimiento mágico no práctico.

-Mi interés recae en los segundos.

-Perfecto, entonces nos dirigimos al despacho de Jefferson. Sígame señorita...

-Black, mi nombre es  _____ Black.-Dije con una sonrisa.

-Encantada señorita Black, sólo nos quedan dos pasillos para llegar.-Dijo con una sonrisa.

Difícilmente logré ocultar mi risa, ya que después de toda la atención que me habían dado los medios a causa del torneo de los tres magos me sorprendía que una de mis empleadas no me reconociese, aunque ciertamente no me importaba.

-Es aquí.-Dijo mientras llamaba a una puerta ancha de roble.

-Pasa.-Gritó una voz dentro del despacho.

Ante estas palabras la secretaria abrió la puerta, dejando ver a un hombre que rondaba los cincuenta en un escritorio repleto de hojas que estaba revisando. La estancia era amplia y con muebles de madera elegantes sin llegar a ser ostentosos. La pared del fondo estaba recubierta por una estantería de libros, mientras que las de la izquierda y la derecha tenían ventanas hechizadas.

-Señor Jefferson, tiene una visita.

-Ante estas palabras alzó la vista de los papeles para mirarme de reojo.

-¿Que desea? Como ve estoy especialmente ocupado. Tengo que entregar en dos días un libro y por un fallo de mi estúpido becario se ha desordenado completamente. Si simplemente numerase las páginas... Esa tal Gunly puede ser muy inteligente, pero no se le ha ocurrido.

Con un movimiento de varita reorganicé todas las hojas para que se colocaran correctamente.

-¿Cómo?-Dijo mirándome enfadado para luego cambiar su rostro a uno de sorpresa.

-Señorita Black ¿A qué debo el honor de tenerla en mi despacho?-Preguntó impresionado.

-Vengo a hacerle una consulta, pero no pude evitar ayudarle con el orden.

¿volver a amar? (Severus Snape y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora