CAPÍTULO 19
NARRADOR
Ron observó la habitación que había decorado su hija, la pequeña se sintió observada y se giró para sonreírle a su padre, había un rastro de tristeza en sus ojos que Rose no podía ocultar, y él sabía el motivo de esa desolación. Entró para darle lo que le había pedido por mucho tiempo, una computadora, ella estaba muy pequeña para eso, sin embargo se sentía tan mal padre que últimamente consentía cada uno de sus caprichos.
—Gracias papito — le dijo emocionada colgándose a su cuello.
Ron no pudo responder, sólo le sonrió y le besó la frente. Comenzaba a cuestionar sus decisiones, lo cual era absurdo, cada cosa que había decidido había sido porque era lo más justo para él, porque él ante todo amaba a sus hijos, siempre se consideró buen padre, trabajaba para ellos y vivía por ellos, ni siquiera podía considerar que su esposa pudiera quitárselos, porque él no había obrado mal, todo lo contrario, sus hijos tenían que estar con él, por derecho.
Así se convenció una vez más que él tenía que estar con ellos, y procuró ignorar la tristeza de sus dos hijos.
...
Terminando el trabajo tomó esa deshonrosa costumbre de parar al bar que estaba cerca, era en un lugar muggle, lo ideal para beber a solas sin la interrupción de alguien a quién él pudiera conocer, el silencio y en ocasiones una grata compañía, que no le ocasionaría problemas el día de mañana.
Vio como el mesero llenó por tercera vez su vaso, el licor color ámbar lo llamaba a pedir más y más, la culpa lo estaba matando, el arrepentimiento y a la vez, el odio desmedido a su ex mujer.
—Y bien, Ronald Weasley — susurró la rubia jugando con el cuello de su camisa, en forma erótica, casi insinuante —. ¿A qué te dedicas?
—... a nada por ahora — respondió viendo sus ojos castaños, unos que lo enloquecieron por un momento.
La vio sonreír y sintió la mano de ella depositarse en su pierna, mientras se perdía en su mirada no podía olvidar alguna vez que alguien lo vio así.
Hermione sonrió coqueta su noche de bodas, recordó perfectamente que ella había tropezado con la mesa que había en el hotel, su ramo de flores se cayó, entonces ella rió nerviosa, creyendo haber hecho lo peor, y él sólo se enamoró. Se acercó a ella para que olvidara las flores, llenó dos copas con vino y le extendió una a ella.
—¿Quieres dejar de moverte tanto Hermione? — le preguntó riendo al verla tan estresada.
—Lo siento, lo siento, me puse nerviosa.
—Baila conmigo — le pidió, y sacó la varita para encender la música.
Ella aceptó aliviada, tomó su mano con suavidad y con eso logró que se tranquilizara, pero aquella táctica que él estaba utilizando para que el estrés abandonara su cuerpo, realmente tenía una doble intención, pues con la mano que descansaba en su espalda fue bajando la cremallera de su vestido, ella se puso seria y sonrojada, mordió su labio y sonrió.
—¿Se siente bien? — le preguntó.
—Se siente estupendo — respondió ella cuando sintió el vestido caer, y el cuerpo de su ahora esposo sobre el suyo, besándolo con devoción.
...
—Lo que me dice es una completa estupidez, Snape. Hermione se casó conmigo enamorada, — le gritó Ron al pocionista, después de que éste se inventara una historia absurda que justificaba la infidelidad.
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Una promesa no cumplida (Sevmione)
FanficTenía que hacerlo, el hechizo debía salir de mi varita, debía cumplir con la más grande promesa que le había hecho a ella... sin embargo el destino jugaba una vez más conmigo cambiando todo el curso de nuestra historia...