Me he vuelto a enamorar

Odio+Odio= Voy a matarte.

Meid

Al abrir los ojos, tratando de ver que hay el en mi alrededor, observé con cuidado, me encontraba en un cuarto no había ni ventanas, no había prácticamente nada, solo una cama en la que me encontraba acostada. Tratando de recordar que había sucedido y cómo llegué aquí obviamente, hasta que empecé a recordar.

¡Max! Abrí los ojos bien abiertos al recordar todo lo que sucedió, pegué un salto de la cama, fui traté de abrir la maldita puerta pero no pude estaba atrapada, tristemente pensé en Nick ¿Dónde podría estar él? Nick... ¿Dónde estás? Me pregunté en mis adentros.

¿Dónde estoy? ¿Dónde está él? Debo encontrarlo y salir rápido de aquí y buscar ayuda pero ¿Cómo? Ni siquiera sé donde estoy. Espero que Max éste buscando ayuda, sé que él va a encontrarnos es muy inteligente y no se dará por vencido y Nick que ojalá éste bien.

Cuando observé moverse el picaporte, me hice aun lado volví y me tiré a la cama devuelta a mi posición anterior, ahí sentada en la cama. Un hombre sonriendo parecía más un bandido que más amigable, daba miedo, daba un aspecto espantoso, éste me mira de arriba a abajo con ésa mirada que tanto odió y desprecio con todo mi ser, pongo una cara de repugnancia a ése tal intención, pervertido de mierda.

—Veo que ya despertaste Linda, él jefe quiere verte-Dijo éste idiota.

—No me digas "Linda"-Dije con cara de desprecio. ¿Dónde está Nick? ¿Qué hicieron con él?- Pregunté con el ceño totalmente fruncido.

—Pronto verás, acompáñame, él jefe te está esperando- Responde el hombre. Lo sigo y me lleva a dos habitaciónes adelante de la mía.

Entró, y me agarran como si fuera a escaparme, me trató de soltar de su agarré (¿Dónde podría irme? ¿Bromean? Mierda si que se pasan) él hombre le dice algo en el oído a un hombre que está sentado en un sillón fumando, supuse de inmediato que él era que estaba a cargo de todo del secuestro, pero sospecho que había algo más, lleva más cosas a su siguiente plan y puedo reconocer que está llevándolos a cabo.

—Bienvenida querida, disculpa me presento mi nombre es Gabriel y ¿Cómo te llamabas? ¿Melany? ¿Maite? Ah ya lo recuerdo Meid. Tú nombre es Meid.

—¿Cómo mierda es que saben mi nombre? ¿Por qué estoy aquí? ¿Dónde está Nick?- Pregunto lanzándole una mirada asesina.

—Verás Linda Meid, yo manejé todo esto, el secuestro y otras cositas más, ¿Tú amigo? ¿Nick? ¿Nick? Déjame pensar a ver- fingiendo que está pensando y jugando con mis nervios. Ah sí él chico inteligente, si quieres verlo está en una de las habitaciones cerca de la tuya. Seguramente te preguntarás el ¿Por qué estás aquí? Bueno.- Lo interrumpí.

—¿Qué quieren dinero? ¿Éso quieren? Bien yo voy a conseguirlo pero liberenlo. Él y yo no tenemos nada que ver en lo que sea que estén preparando- Exclamé seca.

—No querida, el dinero podemos robarlo, vos y él son el motivo de todo esté plan que estamos realizando y llevándolo a cabo, ustedes son los principales protagonistas de todo esto y más- Responde con una sonrisa.

—¿Por qué nosotros?- Pregunté al maldito hijo de perra.

—¿Por qué ustedes? Primero él es un hacker y es muy inteligente, puede adentrarse a cualquier sistema operativo ya sea la fuerza armada y averiguar cosas desde adentro con ésa computadora y vos principalmente por que conocemos a tus padres que son uno de los mejores agentes de la CIA y por que sos novia de Max.

—Él y yo debemos arreglar algunos temas que no se han resuelto, y vos sos la más importante en ésta operación, eres la carnada para que Max venga a tratar de salvarte y ahí ya es nuestro, queremos que tus padres y tu querido lindo amigo Max vengan. Tenerlos a todos en donde lo queremos.

—Eres un maldito enfermo-Exclamé con unas tremendas ganas de matarlo yo misma. Entonces ¿ése fue su plan todo esté maldito tiempo? solo querías venganza-Respondiéndole con furia.

—Llevenla a la habitación 22- Dice él Jefe dándole una llave que visualice un número, número 22.

—Él hombre quien me tenía agarrada, me jaló del pelo, y me dirigió a ésa habitación, abrí la puerta, me tiró del pelo con fuerza y me empujó y lanzó directo al piso, grité del dolor, traté de pararme hasta que oigo a alguien hablar.

—¿Meid?- Dijo casi tosiendo. Estaba muy palido y débil.

—Nick- me arrastre y lo alcancé lo abracé con fuerza, estaba herido, todo ensangrentado. Tenía golpes en la cara y en el estomago también.

—No deberías estar aquí Meid- Exclama Nick.

—No hables, no ¿Qué sucedió? ¿Qué te hicieron Nick?-Pregunto con tristeza.

—Después de meternos al auto, me forzaron a trabajar para ellos pero me negué y me dieron unas parde golpizas- respondiéndome.

—Esto es mi culpa lo siento de no a ver ido aquél día a caminar en la plaza no estarías aquí, perdón Nick- Exclamé abrazándolo.

—No no fue tu culpa Meid, calma ya saldremos de éste maldito basurero te lo prometo-Dijo agarrándo mi mano.

No dije nada más solo me quedé allí pensando en como salir de ahí.