Capítulo 25 "Mi hermano..."

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Estaba en mi habitación con Amber. Hacíamos un trabajo practico de historia. Sobre la reina María de Escocia. Estábamos delante de mi laptop, buscando algo que nos pueda servir para el trabajo. Amber tecleaba el mouse cada dos por tres y yo golpeaba mis uñas contra en escritorio.

—Me rindo.—dijo Amber largando un profundo suspiro.

—Déjame a mi.—me paso el mouse y comencé a buscar lo pedido.

Intenté no enojarme y salirme de control. Busque por todas las páginas existentes pero ninguna servía. Cuando estaba a punto de perder las esperanzas hice click en una página.

—¡Bingo!—grite.

Una vez hecho el trabajo Amber se quedo a dormir. Bajamos al comedor para preparar una hamburguesas con queso y papas.

—Esto es una delicia.—dijo Amber con la boca llena de comida.—Tienes que invitarme más de seguido.

Asentí con la cabeza. Aún pensaba en Kai. Ambos salimos dañados...y no pude hacer nada. Si el supiera que hice esto por Kevin, necesitaba mi ayuda...no podía dejar que mi padre se quedara con su cuerpo.

Estoy segura que él hubiese hecho lo mismo. Si hubiese estado en mi lugar...habría hecho lo correcto. Ahora no sé dónde está, o que estará haciendo...y tengo miedo, porque sé que estará con alguna chica. Yo soy una estupida al no poder superarlo...pero tampoco tengo con quien....salir.

—¿En qué piensas?—dijo Amber.

—En nada.

—¿No te lo puedes sacar de la cabeza, verdad?

No respondí, simplemente agache la mirada. ¿Como podría soltarlo? Esa palabra retumba en mi cabeza..soltar. Es una palabra difícil de hacer, de decir.

—Sabes...—dijo Amber mordiéndose las uñas.—creo que...estoy enamorada.

La mire de soslayo y abrí los ojos como platos al caer a la realidad. Es hermoso lo que tienen juntos...hace muy linda pareja y son el uno para el otro.

Chille de la emoción.—¿Es enserio?

Amber se puso toda colorada y una risita salió de su boca. Se tapo el rostro con ambas manos por la vergüenza que tenía. La jale del brazo y la abrace. Al fin tiene a alguien a su lado, alguien que la hace feliz.

Una lágrima escapó de mis ojos sin darme cuenta. Amber me la seco sin pestañear. Me conoce y sabe lo que siento...

—No tienes que sufrir por ese idiota.—gruñó Amber.—Se que lo quieres pero hay mejores formas de que la bestia saque sus garras.

—¿Eh?

—Creo que debes vengarte por lo que te hizo...

Me golpeé la cabeza con la palma de la mano.—¿cómo te enteraste?

—Cassy.—dijimos al unísono.

—¿Puedes explicar eso de que la bestia saque sus garras?—dije mordiéndome el labio.

—Te lo resumo en una palabra.—carraspeó.—celos.

Fruncí mi ceño. ¿Celos? ¿Enserio?

—¿Qué?—dije estupefacta.

—Uy...¿te lo deletreo?—dijo con una ceja levantada.—C-e-l-o-s. Celos. ¡Tienes que hacer que ruegue por ti! ¡Y ponerlo celoso es la mejor solución!

—¿Solución?—dije sarcástica .—Eso se no se parece en nada a una solución.

—Él te lastimo y tú vas a hacer que ruegue por ti.

Oscuro Secreto: La nueva era. ~EDITANDO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora