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Conducir durante mas de 10 horas para volver a mi ciudad natal. La calefaccion se hacia menos util, mientras mas me acercaba a destino. Escuchaba ese maldito disco una y otra y otra vez. Recordando cada canción. Su carita cuando me lo dio. Acariciando la tapa decorada por el. Nunca estoy cuerda los aniversarios de su muerte. Nunca pasa suficiente tiempo para olvidarlo. Si pasan cinco lo olvidare? si pasan diez años? Entre mi padre y el, no se quien me doleria mas. El de mi padre es tal vez, mas doloroso. Pero con Gerard, ya me preparaba mas para eso. La entrada con rejas altas y negras, anunciaba que había llegado a destino. Sentia mis ojos arder por el sueño, y parpadeaba bastante para mantenerme a pie. Luego visitare a mis tios y el departamento. Tenia que seguir lucida, y con pocas ganas de morir, por supuesto. Luego de andar unas cuadras dentro del terreno, llegue a la baja colina en la que mi amigo estaba enterrado. Aparque el coche, y respire profundamente, antes de abrir la puerta. One Headlight, uno de sus temas preferidos que grabo para mi, sonaba en mi estereo. Lo apague. Las brillosas rosas rojas junto a mi brillaban, porque todavía tenían pequeñas gotas de rocío para que se mantengan frescas. Las tome, y baje del coche. Lentamente, subi la colima, Me pasaban las piernas del cansancio de haber cargado bastante a Matt anoche para que recupere el animo. Y mis músculos estaban agotados. Maldita familia de Gerard que puso a su hijo en lo alto...aunque no podria estar en otro lugar mejor: desde su parcela podias ver la ciudad que se alzaba imponente a unos kilometros del tranquilo lugar. Cuando mis cansinos pies llegaron, hice lo que acostumbraba: derrumbarme a los pies de su tumba. Las altas medias no abrigaban mucho mis piernas, y el piso helo mis muslos. Me acomode el vestido. Me gusta estar linda para el, por mucho tiempo que halla pasado. Por mas que no me vea.

-La docena de rosas tipica-le dije al trozo de piedra con su nombre y la descripción de "la mejor persona que piso la Tierra" (algo cursi a mi pesar). Deje las flores en el cesped- mantengo la promesa...lo que me enseñaste... de que si alguien no puede darme algo, tengo que darselo a ese alguien...por mas que me diste una rosa en mi cumpleaños, en el fondo me hubiera seguir recibiendolas de ti... maldito, no puedes morir el dia de tu cumpleaños..-solte una risa ironica. Gerard, se suicido al cumplir 17 años. Era increíble. Pero su depresión fue mas grande. Y ninguno pudo rescatarlo. Y todos fuimos culpables. Y sigo amándolo como si no estuviera la muerte entre nosotros. Me abrace las rodillas y apoye mi cabeza en mis brazos, mirando su nombre- sabes..? Me gusta un chico. Y creo que yo a el. Y lo quiero. Mucho. Pero el miedo es mas grande. Y tu sigues aqui todavia. Pero el es increible. Se llama Michael. Michael Green. Me recuerda a ti. Tiene una sonrisa muy bonita. Pero sabes lo mejor? Quiere que yo tambien tenga esa sonrisa. Crees que vale la pena arriesgarse?

-Por supuesto que si, idiota.

Me sobresalte mirando la tumba, esperando que los ojos verdes de Gerard esten frente a una extraña aparición fantasmagórica. Pero al escuchar las pisadas detras mio, me gire, y un rostro familiar comenzó a reir. Mientras se sentaba junto a mi, con un cabello peinado hacia arriba, muy lejano al flequillo que tenia cuando apenas lo conoci, otras dos personas me dedicaban una sonrisa inundabas en lagrimas. Estas ultimas, tambien habian cambiado bastante. Patrick se derrumbo a mi lado abrazandome fuertemente. Emily y Lauren, tambien lo hicieron. Mis viejas amigas, lanzaban hipos por el llanto. Patrick solo apretaba los ojos fuertemente.

-Eres una idiota!-el chillido de Lauren nos separo entre risas. Tanto ella como Emily se habian convertido en chicas muy lindas. Emily conservaba sus gafas y lacio y oscuro cabello, mientras que los rulos de Lauren, seguían tan alborotados y desastrosos como siempre. Patrick dejo de ser el emo con la mitad del rostro cubierto por su cabello, a ser un atractivo chico. Habian cambiado tanto...como seria Gerard ahora? No lo se. Pero frente  a mi se encontraban mis viejos amigos. Y no me había dado cuenta cuanto los extrañaba. Mi pecho ardía de felicidad.

-Eres un misterio aqui-agrego el.-Hasta verte aquí me hace dudar de si me habrán drogado o algo. Hace años no te veíamos, Bonnie.

-Los padres de Gerard y tus tios, siempre nos decian que te veian a la madrugada o anochecer por aqui-explico Emily.

-No tienes idea de las veces que hemos intentado atraparte. Ni cuando vienes por tu padre lo logramos.

-Vengo por mi padre los días de su cumpleaños, no para los aniversarios de su muerte-aclare. Sonrieron tristes, pero Patrick me miraba serio.

-Porque no hablaste mas con nosotros?-indago con una mirada herida.

-Dolio mucho...-comencé a responder, pero el me interrumpio:

-Nos dolió a todos. Pero que te hayas ido, me hirio mucho mas. Te necesitábamos. Intentábamos atraparte en la oscuridad o amanecer, pero no había rastro de ti. Tus tíos apenas saben que estas viva, con suerte nos dicen algunas cosas de ti, que tampoco nos tranquilizan mucho. Crees que no dolio?-los ojos de mi amigo no hacían mas que suplicarme una respuesta. Mire a las otras: tenían la cabeza gacha, y alzaban la vista silenciosas.

-Mi madre...-suspire. En verdad queria contarles todo lo que sucedió? Allí estaban los tres, seguían queriendo escucharme. Me seguían queriedno. Y para poder sentir que te quieren, con tan solo miradas, debe ser muy fuerte-las cosas se complicaron. Mi madre esta en pareja con alguien que no es lo mejor el mundo. Me convertí en alguien completamente distinto a lo que era, en un intento desesperado de sobrevivir a lo que me rodea. No queria que vean lo que soy. No queria que vean lo desastrosa que es mi vida. Y tampoco que queden atada a ella, los quise alejar lo mas que podía. 

-Porque no confiaste en nosotros?-pregunto con un hilo de voz Lauren-te queremos demasiado. Queremos estar par ti eso hacen los amigos.

No logre contestar. Acaso fui egoísta al sacarlos? 

-No estabas sola, Bonnie-agrego Emily-nosotros pudimos estar para ti.

-No-la voz de Patrick resonó. Al mirarlo, me dedico una sonrisa con lagrimas- estamos para ti.

Nos fundimos en otro abrazo, junto a la lapida de Gerard.

Hablamos. Le hablamos a Gerard. Llore junto a mis amigos por Gerard. Le dijimos cuanto lo extrañamos. Cuanto lo amamos. Y le prometimos que ahora estariamos mas juntos. Nos lo prometimos. Nos subimos a mi coche, y decidimos ir a comer algo en lo de mis tios. No habia razon para que alguien se entere de ello. Menos Robert, que no quería que tenga contacto con ellos. De cualquier forma, fue una linda tarde. Intercambiamos numeros telefónicos, y prometieron visitarme.

-Mas vale que las diez hora de viaje en coche valgan la pena para cuando vaya-dijo Patrick riendo.

No le dije nada a mis tios de Robert.

TEENAGERS: Dos gotas de aguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora