Y si...?

Parte 1: En la Editorial

Edificio De la editorial Marukawa, departamento de edición manga.

Misaki trabajaba normalmente.

-¡Ah! ¡Termine! Dijo Misaki tranquilamente mientras estiraba los brazos aún sentado en la silla.

-¡Buen trabajo a todos! ¡Me retiro!

-¡Gracias por su trabajo! Contestaron sus compañeros de trabajo.

"Hoy fue un día genial, todo salió bien, no tuve ningún encuentro con él, así que Usagi-san no se enojara conmigo, ni sospechara de mi mirada, ahora solo tengo que pasar a comprar la comida para la cena, veamos, que cenaremos hoy..."

Misaki iba completamente sumido en sus pensamientos, tomó el elevador para llegar a la planta baja, sin embargo por alguna razón este no funcionaba y tuvo que salir por otra parte de la sala de editores para tomar las escaleras. En ese momento su celular vibró indicando un mensaje de texto, Misaki lo atendió de inmediato.

Remitente: Usagi-san

"Si aun no has salido de la editorial, espérame, voy en camino por unos asuntos de trabajo"

Misaki leyó con sorpresa el mensaje.

-¿¡Eh!? ¿Usagi-san viene para acá? ¿Cuánto se supone que tardara? ¿Por qué debería esperarlo? ¿Además que se supone que yo haga o diga cuando alguien me pregunte por qué no me he ido aun?

Misaki se imaginaba así mismo intentando dar una y mil explicaciones, todas para él absurdas, de cómo justificar el hecho de supuestamente estaría esperando a Usagi-san en la editorial.

-¡No lo hare! ¡Tengo que llegar a preparar la cena! Y él tiene asuntos importantes que atender, y por lo regular, aunque yo no me sienta importante, estoy completamente seguro de que estando yo cerca, él no se concentrará de manera adecuada... ¡Además! Usagi-san ni siquiera sabe que aun sigo en el edificio. ¡Sí! ¡Eso es! Saldré a toda prisa de aquí y le enviare un mensaje diciendo que ya no estaba en la editorial cuando vi su mensaje.

Misaki sintió que todo estaba controlado, por ello se apresuró a salir de la editorial, bajó las escaleras rápidamente a fin de salir de las instalaciones y llegar a la estación lo más pronto posible, iba tan concentrado en sus pensamientos y en mandar el famoso mensaje, que no se dio cuenta de que al bajar hacia el pasillo de salida, alguien se atravesaba en su camino, así que él y la persona que llevaba cientos de papeles en la mano chocaron de manera inevitable. Ambos colisionaron, Misaki y los papeles de la otra persona cayeron al suelo.

-¡Ah! ¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡No te vi pasar! ¿Te encuentras bien? Le dijo muy aprensivamente a Misaki el hombre que llevaba los papeles en la mano mientras se agachaba a ayudarlo a levantarse.

-¡Oh no! Por favor discúlpame tu a mí ¡Soy muy despistado no te vi venir! Fue culpa mía. Contesto Misaki muy apenado mientras ayudaba al sujeto a recoger sus papeles.

-No, no, está bien, lo importante es que no te lastimaste. Aunque... oh...

Misaki vio en la cara de sujeto que veía con pesar la enorme pila de papeles tirados en el piso, al parecer eran varios manuscritos de mangas, obviamente tenían un orden, pero ahora estaban todos desparpajados en el suelo sin inicio ni final. Por ello, él se sintió culpable por las molestias que había ocasionado.

-Por favor, permíteme ayudarte a organizarlo de nuevo. Dijo él con algo de pesar y vergüenza.

-No te preocupes, esto suele pasar todo el tiempo cuando un manuscrito se cae, fue mi culpa por no traerlos asegurados con un clip.

Aun así, Misaki comenzó a ayudar al joven a recoger los manuscritos, después unos minutos de concentrarse en la labor, ambos terminaron de casi ordenar la enorme pila de hojas, al menos si no en secuencia, cada manga estaba ordenado y ya solo había que acomodar de nuevo la trama de cada uno.

-Gracias. Dijo el joven con amabilidad.

-No, de nada. Por cierto, ¿Qué tipo de mangas son estos? No parecen ser del departamento en donde yo trabajo. Dijo Misaki mientras veía unas hojas de los manuscritos. – ¡Oh! ¡Por cierto! mi nombre es Misaki, Takahashi Misaki, actualmente soy empleado de medio tiempo en la editorial, pero pronto tendré una plaza de tiempo completo.

-No, dudo mucho que tú alguna vez hayas tenido contacto con este tipo de contenidos. Un chico normal de tu edad no lee mangas sobre romances. Contesto irónicamente el joven. -¡Oh! Entonces, bienvenido a Editorial Marukawa.

-¿Romances? ¡Oh! Entonces ¿Estos son mangas shoujo?

El joven se crispo y desvió la mirada como si hubiera sido evidenciado en alguna mala situación.

-S-si, así es, trabajo como editor en el departamento de manga shoujo.

-¡Oh! ¿En serio? Bueno, quiero decir, no lo digo en mal sentido, creo que no importa el género, yo en general admiro mucho a los editores de mangas, de hecho yo tengo la esperanza de que la plaza de tiempo completo sea en un puesto como editor manga ¡Creo que será genial trabajar con los manuscrito y los autores! ¡Y todo eso! Dijo Misaki con mucha emoción.

-S-sí, claro. Ese es el espíritu... contesto el joven con una falsa sonrisa. "Pobre alma inocente, no sabes lo que deseas..." Fue lo que en realidad pensó el editor de manga.

Misaki miraba al joven editor de ojos verde claro y cabello café, mientras recordaba que aun no le había dicho su nombre, pero no se atrevía a mencionarlo.