Esclava~ Diabolik Lovers

Capítulo XII

Raito... Basta - solte un quejido - Me lastimas -

-Sabes que tu también lo quieres - dijo mientras dejaba un par de marcas en tu cuello y terminaba de quitar la camisa-

La puerta sono

-Quien - dijo Raito de mala gana -

-Reiji, voy a pasar - abrio la puerta y entro junto a Shin -

-Shin... - me cubri inmediatamente con la sabana -

-Que se supone que hace el aqui? - Raito te abrazo por la espalda -

-Quiero hablar con ella a solas - dijo Shin seriamente -

-Esta bien, si intentas algo no dudaremos en asesinarte - dijo Reiji mientras miraba a Shin - Raito vamos -

-Terminamos después - Raito te robo un beso y salio de ahi -

Ambos salieron de la habitación dejandote a solas con Shin, y cuanto salieron Shin se acerco y acaricio tu mejilla.

-Te tienen asi casi siempre? - siguio acariciando tu mejilla y miro las marcas de tu cuello -

Asenti levemente

-Es cierto que estabas embarazada? - bajo sus manos a tu cuello y te apreto un poco -

-No se de que me hablas - intente soltarme -

-Dime la verdad, estabas embarazada? - apreto aun mas tu cuello -

-Si... - dije con dificultad -

Te solto - Que fue lo que hiciste - se levanto -

Me quede en silencio y recupere el aliento

Reiji entro en la habitación - Ya es hora de que te vayas - miro a Shin

-Eres de lo peor - dijo Shin antes de irse -

Me quede en silencio

-Que te hizo - Reiji se sento a tu lado y miro tu cuello -

-Tu le dijiste sobre el embarazo - lo mire -

-Y si así fuera que? - se acerco -

-Para que decírselo? - dije aun igual -

-Para que se aleje, el esta enamorado de ti - te sujeto por la cintura - Es por eso que te ha estado buscando tanto -

-Pero... -

-Pero que? No me digas que llegaste a sentir algo por el? - sujeto tu mentón haciendo que lo miraras -

Negué

-Entonces no te importa que haga esto - se acerco a tu rostro y te beso-

Me separe - Basta... No quiero - me aleje -

-Porque no? No parecías incómoda con Raito - te acorralo contra la cabecera de la cama -

-Pues si lo estaba - lo empuje -

-Te recuerdo que tu aqui no eres nada - dijo con una sonrisa engreida -