Dedicado a todos los lectores gracias por su ayuda.La velada no estuvo tan mal entre Gina y Gorka, hablaron de todo un poco y el tema principal fue Gael. En cierto modo Gina quería ayudarlo a pesar de todo el daño que la había echo.
Gorka no tardó en molestarse preguntándole el motivo por el cual debía ayudar a Gael.—Simplemente porque es el padre de mi hija. —Respondió algo avergonzada mirando su copa.
—Gina, mírame, entiendo que sea el padre de tú hija. ¿Pero tú acaso has olvidado todo lo que él te ha hecho?
Gina no pudo responder, en su interior había odio hacia Gael, pero tampoco quería hacerle daño a su hija con separarla de su padre.
Tras terminar la cena ambos se fueron a la casa de este para poder estar a solas dejándose llevar por la atracción que sienten.
Tumbados en la cama sudados y reponiéndose del asalto Gina probó con una simple pregunta a Gorka.—Gorka, ¿porqué no tienes novia, es por tú carrera?—Una breve sonrisa se dibujó en el rostro de ella emocionada por poder escuchar las palabras mágicas que tanto desea escuchar de boca de él.
—No es por eso, es porque me gusta mi vida, sin ataduras y subiéndose la adrenalina por mis venas cada vez que conduzco mi preciosa moto.—Al parecer esas palabras no eran las que quería escuchar Gina, por lo tanto se excusó y salió de la cama que momentos antes había hecho el amor con el hombre que la hace sentir tan bien. O eso creía ella.
Cuando su cuerpo se deslizó en el asiento atrás del taxi, Gina no pudo seguir mintiéndose a sí misma. Había sido una estúpida en volver a creer en el amor, creer que un hombre trataría de protegerla y quererla. ¿Acaso estaba pidiendo mucho?
De pronto su móvil soñó, el nombre de su hermana se reflejaba en la pantalla.
—Nayet que tal, ocurre algo.
—Gina por favor ven a mi casa se trata de Kendal. Ven por favor.
—Sí claro voy para allá.—Algo desconcertada Gina guardó de nuevo su móvil en el bolso, indicándole al conductor que cambiase la ruta.
Sus ojos platino iban abriéndose lentamente, confuso miró para todos lados, inmediatamente se sorprendió que la mujer que dormía junto a él no era su mujer. Se echó sus manos a su cabeza intentando recordar algo. Pero tan sólo recordaba que se encontraba tomando una cerveza con unos amigos. El cómo había acabado en la cama de Sara era todo un misterio.
—Buenos días mi amor.—Le susurró ella mientras intentaba besar a Kendal.
—Qué significa esto Sara, que me as hecho, responde.
—Yo, nada. Sólo estuvimos tomando unas cervezas y ya sabes el final.
Kendal sintiendo brotes de rabia recorrer por su cuerpo se levantó poniéndose su ropa para poder enfrentar a esa mujer.
—Jamás volvería ha echar un polvo contigo. Dime qué me has echo desquiciada.—El enfado de Kendal aumentaba por segundos.
—¡Basta ya! Yo no te hecho nada, tú solito has venido hasta mi cama y hemos echo el amor, te guste o no. O si no mira esto.—Sara le mostró unas fotos donde se podía ver como gozaban en la cama. Kendal apartó sus ojos de esas imágenes comenzando a ponerse nervioso.
—Te juro Sara que si me entero de que lo has hecho aposta para dañar a mi mujer te la vas a ver conmigo. Y te juro que aunque yo acabe en la cárcel, no voy a tener consideración contigo. —Seguidamente Kendal recogió sus cosas y se marchó. Necesitaba tranquilizarse y poner en orden sus ideas para intentar recordar algo.
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Sigo Siendo La Misma
Romance*** 2 parte de NO SOY PERFECTA ¿Y?*** Como olvidar todos lo momentos bonitos y no los no tan bonitos. Es una cosa imposible. Tras su matrimonio y feliz casada con su guapo doctor. Las inseguridades vuelven ha aparecer en forma de celos en Nayet, tra...