Yo no te obligue
–Shhh, ya zucki todo está bien.
Mi gato maullaba desesperadamente aruñandome las manos.
–¡ya solo déjate ir!–le grite llorando.
Sentía mi corazón estrujarse y un dolor invadía mi alma.
La cola de mi gato se enrolló en mi brazo haciéndome sentir como un monstruo.
Los maullidos de mi gato empezaron a hacerse más frágiles y mis lágrimas más gordas.–Mami te quiere–cerré los ojos tan fuerte como la ahorcaba hasta que segundos después la cola de mi gato dejo de abrazarme.
Solté su cuello y empezar a acariciarlo suavemente. Cuando vi su pequeña lengua salirse de su boca indicándome que está muerto rompí en llanto.
Jamás imaginé que mataría a mi bebe.
Seque mis lagrimas con la manga de mi camiseta y respire hondo.
Mate a mi gato por un estupido juego.
¿Podía elegir un gato cualquiera de la calle?
No. ¿Por qué?
Porque ellos saben cuál es mi gato
¿Como lo saben?
Fácil. Ellos saben todo de ti. Investigan todo sobre ti
Donde vives, donde estudias, tu familia, amigos y tus gatos gracias Facebook.Me quedé mirándolo unos minutos evitando recordar los mejores 4 años de mi vida con este felino.
Agarre mi celular y seleccione la cámara para sacarle una foto y mandársela al administrador.
No había ningún alma en el estacionamiento de este supermercado. Mire mi reloj y me percaté que estaba muy tarde 2:34 AM.
Arrastre la caja que traje conmigo y metí a mi inerte gato allí.
Buscaba un lugar digno para dejar a zucki y que nadie la molestará.
Mientras buscaba un lugar mi teléfono empezó a vibrar. Lo saque de mi pantalón para encontrarme con un mensaje.
Reto cumplido
"No hay que lamentarse por la muerte, como no hay que lamentarse por una flor que crece. Lo terrible no es la muerte, sino las vidas que la gente vive o no hasta su muerte"Cada vez que cumplía un reto salía un mensaje relacionado al reto. Odio tanto las frases.
Bloquee mi celular y seguí caminando hasta que encontré un pequeño parque. Camine hasta a él y deje la caja allí entre unos arbusto para que no llamará la atención.
–Lo siento mucho bebe, sabes que no quise hacerlo–le susurré y lo acaricie por última vez.
Me pare del césped y camine hacia mi casa cabizbaja pesando en cómo fui tan ingenua al caer en esto.
(...)
Me levante de la cama y me arreglé para ir a la escuela.
No tenía ganas de ir. Nadie tiene ganas de ir a la escuela después de una matanza. Pero tenía un examen muy importante que no quería perder, más bien, no podía perder.
Salí de mi casa y camine hasta llegar a la escuela.
Todos estaba en los pasillos hablando animadamente, yo solo ignore todo lo que me rodeaba y entre al aula vacía. Tire mi mochila al suelo y me acosté en mi pupitre tratando de dormir un poco.
–buenos días, saque papel y lápiz–el profesor ordenó.
Tenía una lista de lo que haría hoy:1) tomar el examen 2) decirle al profesor que iría al baño 3) salir de la escuela.
Estaba a punto de salir de la escuela cuando alguien empezó a llamarme. Voltee y busque con la mirada hasta que la encontré, Alexa.
Desde que comencé a jugar el juego no la e vuelto a ver. Falto todo un mes y no sabia donde buscarla ya que no tenía su número ni su dirección. Nada.
Desde que la vi sentí una rabia interna que crecía a medida que se acercaba.
Fruncí el ceño y apreté mis manos, las lágrimas empezaron a llenar mis ojos y la ira aumentaba.
–Hola, ¿cómo estás?–dijo que una amplia sonrisa, como si no hubiera pasado nada, como si no hubiera arruinado mi vida.
Solo negué con la cabeza sonriendo falsamente y aguantándome las ganas de llorar.
–¿Cómo que como estoy?¿Donde estuviste todo este mes?–le pregunte.
–he estado muy ocupada, muchas cosa que hacer- me miró confundida al ver una lagrima que caía por mi mejilla.
Después de unos segundos entendió el porque mi rostro.
-Estas jugando-susurro.
–¿Tú qué crees?–dije con sarcasmo-me engañaste, me dijiste que era un juego inofensivo, que me haría feliz y no me sentiría sola,¿pero te digo algo? Es todo lo contrario–intento interrumpir pero no la deje–me han retado de todo hacerme tatuajes, contarme, robar y matar a mi gato. Y todo a escondidas, nadie sabe y eso me hace sentir más sola de lo que alguna vez creí.
Después de desahogarme y decirle todo en su cara ella solo respiro hondo y se tapó medio rostro.
-yo no te obligue-susurro cabizbaja.
–¿Qué?
–yo no te obligue, yo no te puse un arma en la cabeza para qué jugaras, solo te di el número tú podías decidir si jugar o no.
Yo solo forme una o con mi boca. Tenía razón.
–¡Pero me engañaste!, Porque me dijiste todo eso si no era cierto, llevo un mes juntado esto, ¡un mes! Y no creo poder soportar otros cuatro meses más.
Bajo la cabeza ocultando su cara de arrepentimiento–Lo siento, olvidé que cada persona es diferente–suspiro–es que, creí que el juego te ayudaría como a mí me ayudó.
Ignoré el hecho de que a ella le hacía feliz jugar este juego infernal ósea ¿quien en su sano juicio le gusta hacerse daño y traumatizase. Nadie.
–Por favor, ayúdame a salir de esto, no quiero ganar, no quiero morir así– Le supliqué con lágrimas en los ojos.
–Sabes que no hay vuelta atrás, lo sabes bien. Lo siento– se disculpó y caminó por los pasillos hasta que la perdí de vista.
Choque varía veces mi cabeza en la pared repitiéndome a mí misma que soy una idiota y salí de allí tratando de que el portero no me viera. Camine hasta mi casa y me encerré en mi habitación nerviosa de que me pusieran otro reto.
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Muy pronto subiré el próximo capítulo para explicarle cómo son los retos, cada cuanto se lo ponen y como ganan.
Tengo mucha hambre.
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¡Que ingenuos!
Mystery / ThrillerLa vida de una flor se asemeja a la vida de un adolescente; fuerte, próspera y llena de hermosura. Las flores más hermosas mueren prematuramente. Inspirado en el "juego de la ballena azul"