Victorious (Brendon Urie y tú)

Alone time

Cuando Dallon y Kenneth se van por la puerta me invade cierta incomodidad, me quedo mirando la puerta unos segundos hasta que Brendon me saca de mis pensamientos.

-¿Qué te apetece cenar? Nos pueden traer lo que querramos. 

Ahora que lo pienso, tengo hambre y el estómago vacío. 

-La verdad Brendon, tengo muchísima hambre, he comido una ensalada a mediodía. 

-Qué sana- comenta Brendon, con una risita- Hay un americano disponible, invito yo. 

-Brendon, no hace falta, podemos ir a medias...

-No, por favor, déjame invitarte- me mira directamente a los ojos y sé que no debo protestar.

Acabamos pidiendo dos hamburguesas bastante completas, dos coca colas y una fuente de patatas fritas. 

-Un concierto genial, de verdad, lo sé y llego a traer la cámara- comento, girada hacia él en el sofá.

-¿Qué? ¿no te lo esperabas?- sonríe con suficiencia

-No, no es eso- ya no sé dónde meterme

-Eh, tranquila, una cámara es aparatosa de llevar, ¿sueles hacer fotos?- pregunta Brendon, pero nos interrumpe el timbre- ¡ah! la comida. 

Se levanta y no puedo evitar contemplar sus pantalones y cómo se mueve, abre la puerta, recoge lo que nos entregan  y viene hacia mí con la bolsa de plástico, que deja encima de una mesilla que tenemos delante. Va poniendo las cosas y huele tremendamente bien. 

-No es lo más lujoso peeeeeeeero...- comenta mientras se sienta y abre su hamburguesa.

-No, es genial, créeme- le aseguro, una hamburguesa me sabe a gloria

-¿Les echo ketchup?- dice, mientras señala el plato enorme de patatas

Asiento y Brendon añade una generosa dosis de ketchup. 

-A lo que íbamos T/N, ¿haces fotos? 

-No suelo hacerlas mucho, soy más de grabar pequeñas películas

-Caray, esa productora- añade él con un tono coqueto- ¿de qué tratan?

- Ahora estoy "preparando"- hago comillas con los dedos- un corto sobre la pobreza en Londres. 

-¡Me parece un tema genial! Me gustaría ver tu trabajo algún día (T/N). 

-Lo llevo tremendamente retrasado, ojalá el trabajo me dejara un poco de margen para trabajar.

Comemos durante un rato en silencio. Veo que Brendon deja su móvil sobre la mesa y la pantalla se enciende. Es un fondo de pantalla de sus dos perros. 

-Oh, ¿son tus perros? ¡Que monos! 

Brendon se queda serio mirando un momento a su pantalla

-Sí... - me comenta distraído- son Penny Lane y Sinatra. Están en Los Ángeles.

-¿Los echas de menos?

-Sí, están con Sarah. 

Oh, tema espinoso. 

-Perdona si me meto dónde no me llaman, pero ¿qué pasó? 

Últimamente tengo menos tacto que el capullo de Jerry. 

Brendon deja lo poco que queda de hamburguesa encima de su plato y le da un trago largo a su coca-cola. Se gira hacia mí y clava los ojos en los míos hasta bajarlos al cuero del asiento del sofá. 

-Yo me iba durante meses a hacer tours por Asia, tours por Europa y ella metía en nuestra casa a otro tío, que se iba cuando yo llegaba. El chico este estaba durante meses vistiendo mi ropa, comiendo de mi comida y tirándose a la que yo creía que era el amor de mi vida... Un día tomé un vuelo desde México después del concierto  el día de nuestro aniversario de boda para sorprenderla y los pillé en la cama. ¿Agradable eh? 

Me quedo en silencio, bastante en shock por lo que acaba de contar. 

-Disculpa T/N si te he incomodado- dice Brendon intentando disminuir la tensión

-No, está bien si necesitabas contarlo, por supuesto, por mucho que trabaje en tele soy una tumba. 

Brendon sonríe, bastante aliviado.

-En este mundo de la fama, nunca sabes en quién puedes confiar. Hacía dos años que Sarah se llevaba este juego.- Se pone una mano en la cara- no sé cómo no lo vi venir. 

-Yo...

-Cambiemos de tema T/N, ¿tienes animales de compañía?

Sonrío de manera cómplice. Voy a seguirle el juego, no tengo ganas que se deprima por mi culpa. 

-Sí, tengo a Evie, una gatita negra. - Saco el móvil para enseñar que tengo una foto de nosotras dos de fondo de pantalla. 

-¡Qué bonita es! Bueno- carraspea- las dos salís muy guapas en la foto.

Me sonrojo. 

Seguimos hablando durante un par de horas, de todo y de nada, de mis invitados idiotas y de sus fans demasiado pasadas de rosca, me acaban doliendo las costillas de tanto reírme.

Me doy cuenta que ya es hora de irme, él me acompaña a la salida y nos quedamos cara a cara. No puedo evitar mirarle a los labios y cómo no me importaría que me besara. 

-Bueno T/N, ha sido un placer, hacía tiempo que no me reía tanto. 

 El corazón me late por las orejas. Tengo que volverlo a ver.  

-Oye Brendon, en mi país, cuando alguien invita a otro a comer, queda una cuenta pendiente. Me has invitado a comida americana, ¿puedo invitarte a comida española?

Brendon se echa a reír. 

-Claro T/N, me encantaría volver a verte.

El corazón me da un vuelco. 

-Hay un problema, por eso- continúa- al ser medianamente conocido depende en qué sitios es imposible comer tranquilamente conmigo.

-En mi casa.- le interrumpo- te mando la dirección y nadie, salvo Evie, te va a molestar mientras comas. 

-Sábado.

-Sábado.-respondo- ven con hambre. 

Brendon se adelanta hacía mí y me abraza. "Hecho". me susurra en la oreja. 

Me despido y me voy hacia la moto. ¿Acabo de concertar una cita con Brendon Urie?