Un día nublado, las hojas de los arboles caían, hay un profundo silencio en mi habitación, él único sonido que escucho es él zumbar del viento.
Y yo Ailann ahogándome en un mar de sentimientos confundidos y recuerdos agridulces. Nada tiene sentido, no en mi vida. Atrapada en mis propios demonios.
Miraba a mi ventana y veía las gotas de lluvia resbalar sobre ella, el cielo se veía igual que mis ojos, triste, y las gotas de lluvia eran las lágrimas que caían por mi rostro esa tarde.
Nadie sabe nada de mi, nadie me conoce realmente, nadie sabia lo que en ese momento pasaba por mi mente. Puse mi CD favorito, la música era mi única salvación. Yo me moría por dentro y nadie lo notaba, en realidad a nadie le importaba si estaba sola.
Mis pensamientos me estaban matando, él dolor estaba en mi mente, en este momento era una víctima de ella, aveces me asusta, algo estaba jodido en mi mente..
Siento que la lluvia me dice gritando que todo se acabo, aunque aveces solo sea él llanto de un día triste y mirando las gotas pensé "yo no seria lluvia, yo sería un huracán"
Me acosté en mi cama, tratando de dormir, aunque no serviría de nada si mi alma es la que esta cansada, sabia que mañana me sentiría un poco mejor, pero no, estoy apunto de darme por vencida, tener él corazón roto y lágrimas en los ojos es la peor de las torturas.