—¿No irás a la escuela? —Yoongi se había recostado en el marco de mi puerta. Suspiré en alto mientras me tapaba con las sábanas de la cama. Odiaba los miércoles, eran como los estúpidos ombligos de la semana. No era ni iniciando, ni terminando—. Será mejor que te pares, Kim Taeyeon —él me sentencia, antes de salir al cuarto de Sarang, para prepararla para la escuela.
Ya me había acostumbrado a ver cómo figura paterna a Yoongi. Para mí y para Sarang era más que un simple hermano mayor. Las circunstancias habían hecho que a muy temprana edad Yoongi se hiciera cargo de nosotras. Si me preguntan, es el único padre que he tenido. Suena bizarro, comparándolo con la idea de que es mi hermano mayor, pero así lo sentía. Y, aunque aveces parecíamos perros y gatos, sentía que le debía algo que jamás podré pagar, y era su cariño y amor hacia mí.
—Párate ya, Taeyeon —él tocó la puerta estruendosamente, mientras llevaba a una somnolienta Sarang entre sus brazos.
Me paré, y caminé hacia mi baño. Recibí un mensaje de Tiffany, hoy iríamos a los bolos, creo que ha conseguido un par de citas para ella y Yuri y no quieren ir solas. Solo lo hacía por Tiffany. Era mi mejor amiga, mi hermana. Nos conocimos muy pequeñas debido a que su padre y el mío son socios muy confiados. Uno era la mano derecha del otro. Cuando solo éramos Yoongi y yo, y nos llevaban a esas fiestas aburridas en donde no entiendes ni una mísera palabra que sale de la boca de aquellos ejecutivos tan serios al hablar que te daban ganas de hacerles un chiste para ver si reían, nos escapábamos con Tiffany a cualquier jardín o patio, en donde solíamos jugar hasta que nuestro padre a cara dura nos llamara, y nos hacía escuchar de nuevo esas aburridas historias de gente adulta. Fuimos creciendo y mi amistad con Tiffany perduró. Ella era la única que podía sentir y entender lo que Yoongi, Sarang y yo hemos sufrido. Aunque, Yoongi y yo nos encargamos de que, si Sarang no tendrá alguna figura materna o paterna, lo sienta de esa manera mediante nosotros. Ha sido un poco ajetreado, pero no imposible.
Salí del baño con una toalla en la cabeza y otra alrededor de mi cuerpo. Saqué un crop cruzado blanco, falda blanca suelta y botas de tacón. Una chaqueta de mezclilla de Yoongi, y el cabello semi-recogido por un moño. Disfrutaba de este tipo de peinados gracias a mi corto y rubio cabello. Hice mi rutina de maquillaje, y ya estaba lista.
Cuando bajé hacía el primer piso, todo estaba en completo silencio; nadie se encontraba, como siempre. Cómo odiaba que en la noche se presentaran como que todo estaba bien, cuando nada lo estaba.
Saqué el cereal favorito de Sarang, y lo serví con leche descremada, debido a que la entera le hacía daño en el estómago, y lo dejé en la isla en espera de que Yoongi bajara con ella. No se hizo esperar, y ya La Niña estaba sentada, comiendo su desayuno. Nadie decía nada. Yo estaba apoyada, velando a mi hermana, mientras Yoongi me velaba a mi. Era una manera de comunicarnos que estábamos aquí el uno para el otro, y que jamás estaríamos solos.
—Hoy te esmeraste con su cabello —sonreí, jugando con las pequeñas trenzas de Sarang. Sé que yo, al ser "la mujer", debiera encargarme de estas cosas, pero Yoongi lo hacía mejor que yo, en todos los sentidos.
—Vi un tutorial ayer —él se alzó de hombros, manoteándome cuando no paraba de jugar con el cabello de Sarang. Era negro y muy lacio. Yo fui la única que salió con el cabello rubio de mamá. Luego Sarang y Yoongi tenían el cabello negro de papá. Yo lo fulminé con la mirada, y al escuchar como el bus de Sarang llegaba, tomé su mochila y la encaminé hacia afuera.
—Te quiero mucho bebita —besé su mejilla, luego de abrazarla. Ella me dio un beso en los labios antes de correr al bus.
—¿Vas a salir hoy? —pregunta Yoongi.
—Iré con Tiffany a los bolos, no me esperes —besé su mejilla antes de caminar hacia mi auto.
El viaje a la escuela fue corto mientras pensaba en como se suponía que debía hacer pagar a Seohyun y el desconocido de ayer. Él no debió retarme, ahora se las verá conmigo.
ESTÁS LEYENDO
cheerleading him»baekyeon.
Fanfic❝No querrás tener el nombre de Kim Taeyeon en tu boca, o será tu suicidio social. Era ella la chica más aclamada de toda la escuela, mientras él era el único que se atrevía a retarla. ¿Se arrepentirá luego?❞ »capítulos cortos. »disfruta la lectura❤