Serendipia➳yoonseok one-shot

parte única

Yoongi solo era un observador pasivo en todo ese asunto de la búsqueda del amor. No sentía un deseo sobre aquello, le era indiferente.

Aun que tal vez no se sentía a gusto con su única compañía; el mismo.

Hace un tiempo atrás deseaba intensamente poder amar a alguien, pero su cometido nunca se logró, una fuerza mayor -tal vez el mismo- no lo permitía, Yoongi alguna vez pensó que el destino así lo quería, que la pareja perfecta llegaría a su debido tiempo, cuando sea necesario, cuando el la necesitara.

Pero se rindió. ¿cuántas veces necesitó que alguien lo apoyara? ¿que lo consolara? ¿que le dijiera un simple "te amo"?

Muchas. Si las tuviera que contar con las manos, le faltarían dedos.

Ahora, la sola idea de seguir adelante, seguir buscando a su alma gemela o pareja perfecta, le parecía agotadora, estaba harto de tener que esforzarse por algo que tal vez no existía, para el ni para nadie.

Su rutina consistía en siempre lo mismo. Levantarse a las 7 am mientras maldecía por no haber dormido mas horas, desayunar, ir a trabajar por 12 horas como un maldito esclavo mientras una corbata le recordaba que su patética idea de seguir su sueño nunca se cumplió y ahora debía trabajar para algún tipo gordo y con dinero, volver a su pequeño departamento y si lo necesitaba, ir al supermercado.

Como ahora, que siendo las 9 pm se dirigía hacia allá con un solo objetivo; comprar café.

Sin este probablemente Yoongi no podría vivir, era su todo, su única fuente de energía, su fiel compañero en la guerra contra el infernal sueño y los horribles ataques de ansiedad. El café hacia que todos sus sentidos funcionaran aún así no debieran hacerlo. Era algo así como su amargo mejor amigo.

La zona donde se encontraba el supermercado solía ser tranquila, sin mucho alboroto ni peleas entre pandillas enemigas. Yoongi sentía una satisfacción anormal cuando caminaba por esos lugares. Tal vez podía ser a causa de los árboles de cerezo que le daban de alguna forma la tranquilidad que el necesitaba, o tal vez los artistas callejeros que se encontraban por ahí ya sea cantando o tocando algún instrumento. Le daba nostalgia recordar los tiempos donde en Daegu salía a las calles a mostrar su pasión; el rap. Vivió con la ilusión de que algún día alguien se le acercara para decirle que lo hacia bien, que le diera una posibilidad para dedicarse a eso toda su vida pero, lamentablemente, no llegó jamás.

Solía hablar bastante con los adolescentes que se encontraban por ahí, preguntándoles sus historias y dándoles el animo que el muchas veces necesitó para seguir adelante y no rendirse. Deseaba de todo corazón que ellos pudieran lograr su meta, realmente lo hacia.

El, al conocer a todos los artistas que frencuentaban la zona, se llevó una sorpresa al notar que había un nuevo personaje y quedó impresionado por dos razones; 1.-se encontraba bailando, y eso era nuevo para el barrio y Yoongi ya que nadie se dedicaba a eso 2.-el chico era precioso en un sentido casi ficticio, su sola presencia tranquilizaba a Yoongi, casi como si fuera una combinación entre los árboles de cerezo y el café, en una sola persona.

Estaba tan fuera de la realidad, que le parecía casi imposible de que la tranquilidad estuviera tan centrada en alguien. 

Su aura parecía tan limpia, pulcra y pura que parecía casi tocada por la mano de dios.

Tenía prácticamente a un ángel frente a él y lo único que pudo hacer fue quedarse embobado mirándolo bailar, con la boca semi-abierta, capturado por los limpios movimientos que efectuaba al compás de la canción que terminó junto con el trance de Yoongi

El chico, jadeante levantó la mirada para poder agradecer a todas las personas que dejaban dinero en un gorro que se encontraba en el piso, y fue ahí cuando por primera vez en la vida Yoongi sintió una paz interior inexplicable 

Fue cuando el chico le sonrió cuando se dio cuenta de que tendría un futuro con el, y que gracias al café -o al destino, aun que no quiera admitirlo- probablemente encontró a la única persona que con su sola presencia calmó la tormenta que había dentro de su ser.

Simplemente, la calma nunca había sido tan buena.

                                                                             -❁-

hOLAAA, IM heRE AGAIN ❤️❤️

1k palabras wow #Proud. 

Este es el primer one shot de una saga

Son 5 en total❤️❤️

 y está dedicado a la persona mas importante actualmente para mí, porque simplemente nuestra relación partió como una casualidad. Yo solo le hablé para saber si estaba bien, no para que se transformara en mi otra mitad, en mi complemento.

Gracias, Frida, te amo.

Y porque la ocasión lo amerita, una Boo con trenzas✌🏻️

#NotKawaii

Creo que eso es todo. Besitos en la cola, min Boo jjang jjang man boom boom se despide, see ya✌🏻️❤️