Isabelle Clarkson era una mujer de unos 25 años. Ella acababa de graduarse de contaduría en la universidad. Era la carrera que sus padres querían para ella.
Isabelle siempre deseo ser artista. Le encantaba el baile y la pintura, ella lo disfrutaba muchísimo. Pero sus padres querían un mejor futuro para ella por lo que la habían inscrito para estudiar contaduría.
Ella sabía que su pasión era el arte, pero si le gustaba un poco la contaduría. Isabelle decidió que sus sueños no se romperian. Ella estaba determinada a seguir con sus sueños y mezclarlo con su carrera, creía firmemente en esa posibilidad. Aún no lo había logrado.
Isabelle trabajaba para varias personas y dos empresas. Estaba libre los fines de semana, por lo que los aprovechaba para ir a ver una obra de teatro o para inclusive bailar en su casa.
Ella estaba yendo a ver una obra sobre el amor. Cuando compró el boleto le dijeron que tenía un poco de inspiración en Romeo y Julieta. Llegó al Teatro Candoll y se colocó en la fila para entrar.
***
Mark Dickson tenía 26 años. Él respiraba y vivía el arte. Consideraba que si no de dedicaba a ello moriría. Él había estudiado actuación y canto. Desde los 12 años estaba actuando en obras, lo cual le permitió reunir el dinero suficiente para comprar el Teatro Candoll.
Mark ahora era director, y con un grupo de apoyo escribía las obras. Sus sueños se estaban haciendo realidad.
Estaba entusiasmado por la obra que hoy estrenaban, se llamaba "Un Pequeño Cambio". Era sobre una pareja de enamorados que no contaban con el apoyo de sus familiares, pero a pesar de ello siguen con su romance. Sus familias cada día estaban mas molestas por la relación por lo que los novios se escaparon y estuvieron lejos por muchos años.
Las familias estaban muy preocupadas, no sabían dónde podrían estar, así que decidieron unirse para conseguirlo. Hicieron un buen equipo y encontraron a la pareja. Ellos estaban sorprendidos por el hecho de que estaban juntos. Ambos novios recibieron regaños pero después todos se unieron, los rencores y el odio quedaron en el pasado, terminaron siendo una gran familia feliz.
A Mark le encantan los finales felices y cada vez que recordaba la obra una sonrisa se le dibujaba en el rostro.
***
El teatro no era inmenso, pero si tenía el espacio suficiente para unas 150 personas. Al Isabelle entrar y mirar el lugar le encantó.
La decoración estaba inspirada en la era antigua, como un teatro del siglo pasado. Todo el lugar estaba limpio y tenía un olor agradable.
Isabelle se sentó en su puesto de primera fila, esperando con emoción.
***
Mark estaba detrás del telón rojo, supervisando y organizando todo el escenario. Estaba nervioso y emocionado.
– Mark, relájate – dijo uno de los bailarines –. Me he asomando, no hay nada de que preocuparse. El lugar se está llenando.
Mark sonrió.
– Esas son buenas noticias.
– ¡Excelentes noticias!
Mark comprobó por su propia cuenta el lugar y para ese momento solo quedaban dos asientos vacíos. Minutos después la obra comenzó.
Todos los espectadores la estaban disfrutando, pero Isabelle cada segundo se conectaba más con el espectáculo.
Cada minuto que pasaba lograba que no pudiera concentrarse en otra cosa. En el final de la historia ella casi llora, tuvo que resistir las lágrimas, le había encantado.
ESTÁS LEYENDO
Theatre
RomanceIsabelle tiene mucha frustración, pero al conocer a Mark encontrará su cura. El amor de ambos logrará hacer de Isabelle una mujer feliz... ¿Y quién sabe? Tal vez feliz para siempre...