Sus versos

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Jin se encontraba despierta tirada en su cama, pensando en aquella chica curiosa, en sus gestos, en su manera de hablar, ella se preguntaba a cerca de las manías de su compañera de clases, de si tenía familia, estando tan aburrida pensó en la probabilidad de que Yeon tuviera pareja, de alguna extraña manera sentía rabia al pensar eso, así que lo dejo a un lado y comenzó a cantar una pequeña parte de sus versos
《 Odio estar sola la mayor parte del tiempo
Tú sabes cómo soy
¿Cómo puedes no llamarme otra vez?
Pretendiendo que todo está bien
Tú nunca, ni por una vez, eres honesto contigo, conmigo 》
Observó a lado izquierdo de su cama, en donde se encontraba su despertador el cual marcaba que eran las 4:30 pm, sus padres no estaban en casa, pues ellos habían salido de viaje y no llegarían hasta dos meses después, así que decidió salir a caminar por ahí para poder distraer su mente y no pensar en Yeon, se dispuso a tomar sus auriculares y su celular y, bueno algunas que otras monedas por si le daba hambre, y salió de su casa para ir al centro de la ciudad que no se encontraba tan lejos, eran más o menos unos diez minutos caminando a su ritmo.
Llego sin prisas al centro de la ciudad, ya comenzaba a oscurecer, el sol comenzaba a ocultarse, no le importo, no tenía a quien preocupar, encontró un sitio que llamaba la atención, ya sea por los chicos que estaban plantados fuera, o porque solamente quería pasar el rato.
El olor a alcohol y cigarro predominaba en el lugar, junto con luces de colores y música entretenida en el fondo. Entre muchos hombres embriagados tratando de ligar a mujeres con ropa provocativa, pasaba desapercibida una chica callada que se limitaba a sentarse en la barra a beber mientras charlaba con su amigo, este suceso llamó la atención de Jin, conocía ese cuerpo, pero no estaba segura si era aquella persona que se le venía a la mente, sus dudas se aclararon hasta que la persona que la acompañaba pronunció su seudónimo fuerte, pues al parecer tenían una pequeña discusión.
— ¡Hani! Ya estás grande para que sigas soltera — decía su amigo mientras reía a carcajadas — Sabes, yo conozco a alguien que...que podría salir contigo— en un repentino movimiento él cruzo miradas con Jin a quien él le sonrió, Jin se sintió incómoda ante la acción de aquel chico, así que no volvió a voltear a esa mesa.
— ¡Hola, hola! ¿Cómo te llamas preciosa? De seguro tu nombre es tan bello como tu rostro — pronunció la voz que reclamaba a su compañera de clase — Puedes llamarme Heenim — siguió hablando para obtener una poca de atención de esa chica que estaba frente a él.
— Hola — pronunció muy seco — Yo no estoy aquí para salir con alguien... — tragó saliva — Ya tengo a alguien a mi lado — terminó el diálogo Jin, la verdad es que no quería entonar la charla con alguien y menos con alguien que fuera cercano a Yeon.
— Vamos Heenim, déjala en paz — Esa voz hizo que Jin levantara la cabeza para mirar a quien dijo eso — Tiene cosas mejores que hacer, que perder el tiempo contigo ¿vale? — dijo Yeon de una manera cruel para su compañero — Así que no la molestemos, igual creo que no podrás tener algo con ella — termino de decirle a Heenim con un tono de voz en forma de burla.
— Solamente te quería enseñar cómo podías llegar con algún chico para que consiguieras algo, mis intenciones son buenas, son para que no estés sola lamentándote de que no puedes hablarle a ese alguien de tu curso que...— Yeon interrumpió el diálogo de Heenim — Solo incómodas a Elly...— le dijo a su compañero mientras intentaba quitarlo de ahí — Pff, nada de eso, así que te llamas Elly, bonito nombre, ven Elly acompáñanos a beber, solo un poco — En un movimiento brusco tomo de la cadera a Yeon y la apartó mientras tomaba el brazo de Jin, esta acción provocó que Jin se levantará a fuerza y siguiera al inquietante amigo de Yeon.
Heenim llevo a las dos al lugar donde anteriormente se encontraban sentados
— Elly, entonces de donde conoces a Hani — pregunto Heenim a Jin — Idiota, no deberías llamarla así, y más cuando ella no te a dicho su nombre— contesto Yeon dedicándole una sonrisa a Jin, quien solo agacho un poco la mirada pues, esa sonrisa hizo que se sonrojara — Me llamó Ahn Hyo Jin, puedes decirme Elly o Le, no importa cómo me llames, y conocí a... a Hani en... en el curso de la escuela— contesto  un poco nerviosa — un gusto Heenim— concluyó con una pequeña sonrisa que quitó al instante.
— ¿quién lo diría? —Heenim sonrío mientras le ofrecía una pequeña botella de alcohol a Jin — No te excedas, que no quiero cuidar a dos niñas, eso sería demasiado problemático — le dijo mientras le daba un sorbo a su bebida.
Para suerte de Yeon, en poco rato tanto Heenim como Jin estaban completamente fuera de si, entre ellos bromeaban o simplemente reían a carcajadas, en un abrir y cerrar de ojos ambos compañeros de bebidas se encontraban recargados en la mesa dormitando ¿cómo era posible que sucediera eso tan rápido?. Sabía de la poco tolerancia a el alcohol que tenía Heenim ¿pero de Jin?, no sabía nada de ella, así que decidió que a Heenim lo dejaría en su departamento debido a que le quedaba cerca y porque iba a conducir el automóvil de él, y a Jin, bueno la dejaría en su departamento para que pudiera descansar y al día marcharse a su casa.
Pidió ayuda a un mesero del lugar para poder montar a ambos al automóvil, la tarea para el mesero era demasiado fácil Heenim al ser delgado no pesaba nada y lo metió al automóvil acomodándolo en el asiento del copiloto rápidamente para poder ayudarla con Jin y colocarla en la parte de atrás del auto, en lo que cargaba a Jin prendió el automóvil, ya estando dentro los tres agradeció a él mesero y comenzó a manejar, condujo durante veinte minutos para llegar al departamento de su odioso amigo, lo bajo con cuidado dejando acostada a Jin, no tardó mucho en dejar a Heenim en su cuarto, volvió a entrar a el auto y siguió con el camino para llegar a su departamento, cuando llego a el, dejo estacionado el auto y prosiguió a cargar a Jin, era la segunda vez que tocaba a su compañera sin la agresividad de la primera vez que sintió el calor de su mano, la subió con mucha delicadeza a su habitación, Fati recibió de una manera amena a su dueña ronroneándole, Yeon solo sonrío y la apartó para poder conseguir llegar a la cama y acostar a su compañera, no tardó en dejarla acostada ahí.
—Yeon...— pronunció Jin de una forma tierna, Yeon solo apartó el cabello de Jin que estorbaba en su rostro, para su sorpresa Jin se levantó a abrazar a su compañera, intentando besarla — Elly...basta— le dijo a Jin un tanto nerviosa — Te iré a preparar un poco de café para que no te sientas tan mal ¿de acuerdo?— Yeon se encontraba muy cerca de su compañera, tan cerca que cualquier movimiento la situación se podría poner un poco más incómoda para ambas.
En un espontáneo movimiento Jin encontró los labios de Yeon y comenzó a besarlos con ternura, las imágenes que percibía Jin eran turbias a causa de su incidente con el alcohol, tal vez el alcohol le dio la valentía de hacer lo que deseaba, continúo besando los labios suaves de su compañera quien tímidamente correspondía a los movimientos de Jin, quien  se estaban inundando del sabor dulce de Yeon, era lo más dulce que había probado. La chica carismática beso esos labios rojos, está vez con más pasión y deseo, dejando a un lado su timidez, y los mordió un poco, haciendo que Jin se quejara un poco, quien sonrío por eso — El único café que quiero ver será el de tus iris alrededor de tus pupilas dilatadas cuando mis dedos entren a ti. —

Mis labios terciopeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora