El placer del amor.| Romione.

Capítulo 30: La partida.

La llegada al colegio fue lo que esperaban, los estudiantes fueron llegando y se contaban como habían pasado sus días de descanso.

Cuando estaban en el comedor, Ron tomó por debajo de la mesa la mano de Hermione, ella le devolvió el gesto con fuerza.

-Duerme conmigo esta noche.- Dijo Ron casi en tono de suplica.

-No puedo, Ron, quiero estar con Ginny, no la veo muy bien.-Explicó ella, el chico giró su cabeza y miró a su hermana, su novia tenia razón, la mirada de Ginny estaba muy triste, sus ojos no brillaban, parecía apagada y débil.

Cuando la cena terminó, todos los estudiantes regresaron a sus respectivas salas comunes, Harry y Ginny venían más retrasados, de pronto el moreno tironeó de la túnica a la pelirroja y la metió en un aula vacía, cerró la puerta y sin aviso la besó, la besó con desesperación, ternura y pasión, no podía dejar de meter su lengua en aquella boca, la besaba como si fuera la última vez que lo hacía, ella se dejaba sintiendo en lo más profundo de su corazón que esa sería la última vez que lo vería en mucho tiempo. Luego de un largo beso, Harry la apoyó contra una pared.

-¿Quieres dormir conmigo?

-No, no podré separarme de ti si duermo contigo, cuídate mucho, mi amor, te estaré esperando...-Le dio un último beso y dejó al chico solo en el aula, sin poder contenerse, el muchacho se largó a llorar desconsoladamente, ella lo sabía, Harry no se explicaba cómo, pero ella sabía que él partiría por la mañana.

Luego de una hora regresó a su dormitorio donde Ron lo esperaba con su pijama puesto.

-¿Dónde has estado?-Interrogó su amigo, Harry abrazó a Ron con mucha fuerza, le dio unas palmadas en la espalda y luego se tiró en la cama.-¿Qué te pasa?, no has desempacado.

-Lo haré mañana.

Ron se tiró en la cama y colocó los brazos atrás de su nuca, no podía dormir, estaba pensando en esos maravillosos días que había pasado con su novia, ahora que ya estaba en el colegio y veía las cosas con más detenimiento, no podía explicarse cómo había llegado hasta ahí con Hermione, era más que quererla, más que amarla, más que desearla, se sentía atraído de una manera impresionante hacia esa mujer que descolocaba sus sentidos, cerró los ojos y recordó esas imágenes que tenía grabadas en la cabeza y en el cuerpo, ella besándolo, él sintiéndola, su piel, su aroma, sus ojos se pusieron pesados y su recuerdo se quedó en el rostro moreno de la chica, así finalmente se durmió.

Ginny lloraba en su cuarto amargamente.

-¿Qué tienes, Ginny?-Preguntaba la castaña, Ginny no decía nada, solo lloraba, Hermione se imaginaba lo que pasaba, Harry se iría, ese era el motivo por el cual su amiga estaba así.-No llores, no se va mañana, lo tendrás unos días mas.

Ginny seguía sin responder, como una buena amiga, Hermione se quedó junto a ella abrazándola por los hombros y haciéndole compañía, como a las dos horas, Ginny se levantó y se sentó junto a la ventana, Hermione se sentó en un pequeño sillón de un solo cuerpo que había junto a ella, y sin darse cuenta se durmió.

Las horas fueron pasando lenta y angustiosamente, el cielo comenzó a aclarar y Ginny contempló el amanecer, el colegio comenzó a tener los ruidos típicos de un día de clases, las compañeras del cuarto de las chicas se levantaron para desayunar y Hermione abrió los ojos con un terrible dolor de cuello gracias al bendito sillón, miró a su amiga y se dio cuenta de que seguía en la misma posición de la noche anterior, solo que ahora ya no lloraba.

Unos gritos desesperados se escuchaban desde la escalera.

-¡Hermione, Hermione!-La castaña salió corriendo.

Encontró al pie de la escalera a su novio que agitaba los brazos, ella se echó escaleras abajo, al llegar junto a él, Ron la tomó de los hombros.

-Se ha ido, Herms, se ha ido solo.- ella abrió mucho los ojos, entonces Ron sacó de su bolsillo una carta, el sobre decía claramente: PARA RON Y HERMIONE. Le extendió el brazo y le entregó otro sobre que decía: GINNY. La castaña tomó el sobre dirigido a ella y a Ron y lo abrió con apuro.

Queridos amigos:

No puedo llevarlos conmigo a pesar de que sé que ustedes quieren ir.

En estos días me he dado cuenta de cuanto se aman, no puedo arriesgarlos, me ayudarán mucho si cuidan de Ginny hasta mi regreso.

Espero que comprendan y respeten mi decisión, los quiero y no puedo permitir que algo les pase, sean felices, ámense con toda el alma.

Los quiere:

Harry.

Hermione derramó un par de lágrimas mientras Ron la abrazaba, luego tomó el sobre que era para Ginny y con pasos lentos se lo subió, la chica seguía parada frente a la ventana.

-.Ginny, debo decirte algo.

-No hace falta, Hermione, ya lo sé, se ha ido.

Hermione caminó hasta ella y le entregó el sobre, la pelirroja lo recibió mientras su amiga la dejaba sola para que ella leyera la carta, pero Ginny no lo hizo, siguió parada junto a la ventana.

Hermione bajó las escaleras y vio que su novio estaba apoyado contra la pared.

-¿Cómo pudo irse así?- Se quejó Ron, ella le acarició el cabello rojizo.

-Iremos por él, Ron, no lo dejaremos solo.

El chico asintió con la cabeza, y apretó la mano de su novia para darse fuerzas.

CONTINUARÁ...

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JAJAJAJAJA, perdón, tenía que animar un poco la dramática situación. Espero que les haya gustado muchooo, estamos en recta final, la tensión de los últimos capítulos es palpable. 

Un beso gigante, con mucho Ed Sheeran...

Att: LauraHillón<3.