Sinopsis

212 10 0
                                    

Lauren Jauregui es un imán atraer las enfermedades. Al nacer debió someterse a un trasplante de corazón, pues el suyo tenía grandes problemas. Antes de cumplir un año ya había sufrido de varicela, sarampión, meningitis y otitis, esta última al menos dos veces. Al año y medio una fiebre la dejo en cama durante semanas. Los doctores les dijeron a sus padres que no viviría, pero Lauren lo hizo. A los cuatro años los doctores determinaron que su trasplante de corazón estaba siendo rechazado por su organismo. A los cinco se sometió a otro trasplante. A los siete le extirparon una parte del páncreas, lo cual la obligó a recibir dosis diarias de insulina. A los once su corazón fue rechazado nuevamente, y esto indicó otro trasplante. A los doce Lauren estaba deprimida, así que sus padres la llevaron al psicólogo; no es extraño que este le diagnosticara algo también: Asperger. A los quince Lauren dejo de asistir a la escuela y comenzó a recibir educación en casa, pues su madre llegó a la conclusión de que era lo mejor para ella. A los dieciséis Lauren estaba más deprimida que nunca, sin amigos y escuchando música a alto volumen mientras miraba por la ventana de su habitación, saludando a la anciana señora Marta durante las mañanas. Y, como siempre, vino otro problema: los riñones de Lauren comenzaron a fallar. Recibió varias donaciones, pero todas fueron rechazadas al instante. Es así como Lauren terminó viviendo de diálisis tres veces a la semana. Pero eso no era todo... Su corazón, de nuevo, estaba siendo rechazado.

Luego tenemos a Camila Cabello, una niña que solo había sufrido un par de resfriados en su infancia. Cuando su abuela, Marta Estrabao, murió y su madre heredó la casa por ser su única hija, Camila debió decir adiós a su vida en el hermoso México y decir hola a la ciudad de Miami. Los primeros días fueron difíciles; siempre lo son. La escuela fue difícil también. Allí no tenía amigos, y el ya tener diecisiete años, estar en el último curso y ser una chica no muy dada a hacer amistades fácilmente la hizo sentirse como una persona solitaria y deprimida durante los primeros meses. Luego, sin saber cómo, conoció a Dinah y Normani, y su vida dio un giro drástico. Podría decirse que Camila era feliz... Lo era hasta que un chico, Austin, comenzó a acosarla y ella terminó confesándole su más grande secreto solo para que la dejara en paz. Sí, Camila era lesbiana. Dinah y Normani no se alejaron de ella, pero eso no evitó el montón de burlas que comenzó a recibir diariamente, y así fue como Camila se convirtió en una joven deprimida que, al llegar a casa, se encerraba y lloraba en su habitación... Hasta que vio a la chica de ojos verdes que la miraba desde la casa vecina.

La chica de la ventana |CAMREN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora