Sinopsis

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Un Psicopata, Un Loco, Un Asesino Serial, Como lo quieran llamar.

El no es una persona normal.
Tiene transtornos,
Esta mal.
Si quiere hacer daño, lo hara no importara a quien cause dolor, y si no sacia su sed de sangre con una persona lo hara con miles hasta que quede satisfecho.

Al agarrar el mango de su navaja, desplegarla y mirar ese corto brillo al ser abierta era como una droga en pequeña cantidad, sosteniendo con agresividad y cerrando mucho su puño, Lo clava en su victima, pero no de una forma normal, lo hace tan rapido pero sintiendo cada tejido romperse, cada gota de sangre tratando de salir, este no lo hace solo una vez, cada victima tiene su numero, cada cosa que la hizo sentir. La primera vez lo hacia con serenidad como lo decia el... pero las otras veces solo reir y seguia, una y otra vez, no viendo la hora de que el cuerpo callera inerte para dejar su firma, pero no cualquiera y no como se la imaginan.
Hasta que el cuerpo estaba tumbado, la sangre corriendo al rededor de ella y por todo el suelo, el ponia su toque final, La cereza al pastel, un ultimo desgarre de tejidos y para la victima el ultimo dolor, esta vez agarrando su navaja lo mas fuerte posible, cortando su garganta, pero ya no de la forma de la que estamos acostumbrados a oir, la tipica de que, el chico viene silenciosamente por atras, la toma con fuera y desgarra su garganta con un rapido movimiento, No, este tenia la manera mas dolorosa posible, Ya cuando su victima estaba tumbada casi inerte, ponia una de sus manos en la cara de la victima para que fuera mas bueno disfrutar de su show, tras esto sin dejar el agarre a su navaja, poco a poco y dolorosamente cortaba sereno y dispacio, los tejidos se desgarraban, uno tras otro al pasar esto la sangre salia, unos lados salia como un largo chorro de agua, pero otros solo resbalaban, mientras que su victima seguia a gonizando y de su boca escuchar pequeños gemidos de dolor, pero esto no importaba el seguia disfrutando de ese corte profundo, viendo cada tejido romper, ver cada gota de sangre salir, hasta que llega al lado posterior del cuello, ahi la introduce por ultima vez, todo su largor de su navaja lo introducia pero esta vez no era despacio, lo hacia rapido como si de esto dependiera su vida, pero no era asi, esto lo hacia como si fuera su firma sobre papel, cuando al hacer su ultimo cruze con el lapicero regara un poco de tinta. Pues este no era papel y su navaja no era un lapicero pero lo sentia así, hasta que este no quedara cerciorado de que su victima no estuviera totalmente muerta, no se iba, no huia del lugar, al saber esto este daba 10 pasos, arreglaba su cabello, limpiaba con delicadeza su navaja, como si esta fuera un pequeño y indefenso bebe, al estar limpia la incertaba en uno de los bolsillos de su traje, el no tenia gotas de sangre, sus cortes eran tan perfectos, tan dedicado que se aseguraba de que en el no callera nada de sangre, No se inmutaba por salir de ahí, no mostraba desespero.

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