Las gemelas Harley y Halsey tienen una vida normal como cualquier otra. A sus 14 años deciden aventurarse en un bosque que se encuentra cerca de su casa. Se encuentran con un hermoso lago en el que se consumen, o al menos ese es su último borroso...
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Este día en especial era extremadamente aburrido, al menos más aburrido que cualquier otro. El instituto me distraía de cualquier preocupación y hoy no tenía que asistir. Y si, lo sé, también puede ser estresante, pero, estar en mi casa es una peor opción, ahí tengo que hacer tareas inmensas, ahí no tengo a mi mejor amiga Katy, la persona que más quería en el mundo, obviamente después de Halsey, mi hermana gemela. A mis catorce años no creí llegar a querer a una persona tanto, y Katy se había ganado todo mi cariño.
No teníamos que asistir al instituto así que mi hermana y yo decidimos ir al bosque que se encontraba a unos kilómetros al sur de la casa. No nos quedaba más que hacer eso, la idea fue mía, aunque Halsey no estaba convencida por completo. Decía que podría ser peligroso ir sin nuestros padres. Habíamos ido otras veces a ese bosque con papá y mamá pero no nos habíamos adentrado mucho, solíamos acampar en la orilla. Esta vez quería explorar, o al menos esa es mi esperanza, mi hermana suele arruinar todo con sus idiotas reglas y su miedo. Siempre hemos sido diferentes, no en el ámbito físico, me refiero a que yo siempre he sido la más independiente y mi hermana Halsey siempre ha dependido de quien la rodea, se encuentra como una pequeña niña apunto de caer en un agujero, pero yo siempre le tenderé una mano.
Una vez estuvimos en el bosque Nos empezamos a adentrar. Era un poco raro que mi hermana aún no hubiera protestado. Llegamos a un pequeño río. Había un árbol volcado que llegaba hasta el otro lado, parecía que estuviera allí desde hace mucho tiempo, estaba lleno de lana y la maleza colgaba hasta casi tocar el agua. - ¡Halsey vamos!-le dije emocionada - ¿Qué? - ¿Qué esperas? Vamos a pasar por aquí. ¡Anda vamos! - ¿Estas segura de que no va a pasar nada? No estoy segura de ir. ¡Mejor demos la vuelta! - ¡Halsey¡ ¡No seas aburrida! - ¡Harley¡ tengo un mal presentimiento, no debemos permanecer aquí por más tiempo, se está haciendo tarde. El sentido de la intuición de mi hermana era impresionante, casi siempre acertaba, pero estaba convencida de que este no era el caso. « ¿Qué nos podría pasar?» - ¡Vamos Halsey! ¡No va a pasar nada! ¡No si estás conmigo! - ¡Esta bien! Pero tenemos que regresar antes de que anochezca o mamá podría preocuparse. - ¡Tranquila! ¡Además no estamos tan lejos de casa!-aproximadamente estábamos como a unos quince minutos de la carrera y de la carretera a casa a unos cuarenta minutos. Tomé a mi hermana por la mano y subí por el árbol, lo pase con mucho cuidado, intentando no resbalar, aunque es tuve a punto.
Cuando llegamos al otro lado nos adentramos aún más, estaba emocionada, había sido un día aburrido y ya estaba comenzando a divertirme. Podía comenzar a sentir la frescura en el aire que soplaba mi rostro, esto debido a que estaba comenzando a anochecer. Quise explorar más y mi hermana soltó mi mano, no me preocupé mucho, creo que se estaba divirtiendo tanto como yo.
Miré hacia arriba y apenas se podía apreciar la punta de los largos pinos. Era una vista preciosa. Estaba rodeada de naturaleza y bichos, podría acostumbrarme a esta paz fácilmente. Los hermosos colores de las alas de las mariposas hacían un entone delicado y perfecto con las flores azules que nacían a montones por todo el lugar. Todo estaba tranquilo, yo estaba tranquila y Halsey... Cuando me di cuenta mi hermana ya no estaba al lado mío, trate de no entrar en pánico, empezó a caer la noche y no me había dado cuenta. « ¿Dónde diablos estas?» Grité y nadie me respondió, pensé lo peor. Caminé para intentar encontrarla. Sabía que ella no se separaría de mí nunca, menos en estas circunstancias y a esta hora del día en medio de un bosque. Pasé bajo unas ramas, al principio me costó un poco después las logre atravesar y seguí caminando. Mientras me adentraba cada vez más entre los árboles, lograba percibir el leve y vacío ruido de agua moviéndose. Me adentre aún más y logre distinguir la silueta desdibujada de mi hermana a punto de entrar al agua. No pude haberme sorprendido más. ¿Un, un...?
Había un inmenso lago, la luna se reflejaba en él y su luz se esparcía a todas las direcciones. El lago se tornó de tonos fríos gracias a los millones de estrellas que también se reflejaban en él.
Advertí a mi hermana que no se metiera al agua. La miré y parecía que estaba consumida en un largo y hermoso sueño. Me acerqué a ella con la intención de tomarla del brazo para halarla y arrastrarla devuelta a la orilla, pero en el momento que mi piel toco el agua todo se volvió todo completamente diferente. Me embargué con una sensación de paz y curiosidad. Tomé a mi hermana por la mano y de inmediato nuestras presencias se conectaron formando un hilo invisible entre nuestros dedos que solo ella y yo podíamos sentir. La miré a los ojos, sonreí y de la misma manera, ella me respondió con una tierna y delicada sonrisa. Movimos nuestro cuerpo y poco a poco nos sumergimos más y más. Mi ropa se humedeció y un escalofrío me recorrió delicadamente la espalda hasta llegarlo a sentir en la punta de mi lengua.
Esa agua me envolvía, me llamaba, me obligaba, pero también me tranquilizaba. Mi pelo ya había tocado el agua. Estaba flotando. Poco a poco sentí como el agua me cubría la cara. Me estaba hundiendo. La sensación del sueño me embriagó, sentí como si me hubiera transportado a otro planeta. "No sabía dónde me encontraba"
