Él la quería, realmente la quería, no podía negarlo aunque quisiera. Lo sabía porque cada vez que estaban juntos, se sentía completamente feliz...Tan feliz que hasta llegaba a pensar que sólo quería estar al lado de ella. Quizás la ambicionaba, por el motivo que contiguo a Emily se sentía amado. Ella hacía que su lado humano saliera a flote, aquel lado que había perdido cuando estuvo encerrado aquellos tres años en ese laboratorio. No importa las razones, sólo distinguía que la amaba.
-Emily Evans es la ganadora. –Anunció el entrenador, una vez que la batalla entre la castaña y uno de sus compañeros de clase finalizó.
La aludida se inclinó respetuosamente frente a su contra-atacante y este hizo lo mismo, aunque ninguno de los dos decía nada, Nicholas escuchó claramente que aquel chico la odiaba, y no sólo el, sino...Todos aquellos a los que ella se había enfrentado y ganado. ¿Pero que esperaban? Emily se había criado en este instituto, conocía a la perfección los métodos de pelea y su cuerpo estaba entrenado desde que nació para esto. Su padre se había encargado de ello.
-Nicholas Agrés, al frente. –Se puso de pie cuando su nombre fue anunciado. Era el último al que la castaña debía enfrentar para ganar la clase, sonrió con diversión cuando la observó dubitativa sobre si debía luchar contra él o no.
'¿Y si le hago daño?'
'No quiero pelear con él'
Nicholas sintió felicidad ante la preocupación de su novia, ella era inteligente pero ciertamente despistada e inocente. Ella no podría tocarlo aunque quisiese debido a que él leía cada uno de sus movimientos.
La pelea comenzó y el rubio notó como ella se preparaba y empezaba a atacar, fácilmente evadió cada uno de sus golpes sorprendiendo a la clase y a ella misma. Al poco tiempo la castaña comprendió lo que sucedía y sonrió.
'Me estás leyendo la mente, tramposo'
Él soltó una risita y respondió en voz baja. –No es trampa, es una técnica.
La lucha se hizo más larga ya que ningún golpe lo alcanzaba, el tiempo en el reloj estaba agotándose, y entonces fue allí cuando decidió que ya era el momento de aflojar el paso, Emily lanzó un golpe dándole de lleno tumbándolo al suelo enseguida, al mismo tiempo que la campana emitió su sonido, avisándole que la pelea había terminado.
-Emily Evans, es la ganadora del día. –Anunció entusiasmado el profesor sosteniendo la mano de la castaña y elevándola en el aire, haciendo que todos den un aplauso.
-Ganó como siempre. –Dijo de mal humor una de las chicas en voz baja y pequeños murmullos desconformes se comenzaron a escuchar mientras los estudiantes abandonaban el salón de clases.
Emily soltó un suspiro mientras se secaba su frente con su brazo y miró a Nicholas quien estaba sentado en el suelo.
-¿Por qué me miras así? –le preguntó el rubio con una sonrisa divertida, para luego fruncir el ceño. – ¡Hey, no me insultes!
-Me dejaste ganar. –Lo acusó un tanto irritada.
-¿Yo? –Preguntó con inocencia.
-¡Sí! ¿Por qué? –Le cuestionó la castaña cruzando sus brazos. –Podías haber ganado fácilmente ¿Por qué no lo hiciste?
-Porque eres la número uno. –Respondió encogiéndose de hombros.
Emily entrecerró los ojos. –No es verdad. Ibas a ganarme, hubiera estado genial si hubieses ganado. No soy la número uno. –Respondió bruscamente dando media vuelta lista para irse. Nicholas se levantó rápidamente y la tomó suavemente del brazo y la giró para quedar frente a ella.
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LAS DOCE DIMENSIONES OCULTAS
Romance-En el mundo existen veinticinco dimensiones diferentes, una de ellas es la tierra ¿Y las otras veinticuatro? Se conoce que doce de ellas son actualmente vigiladas por guardianes que mantienen oculta su dimensión, aun así quedan doce totalmente desh...