Shooting Kiss {Mingyu x Yehana}

Capítulo Único. Shooting Kiss

                Día de san Valentín, un día extremadamente difícil para Kim Yewon desde hacía 4 años atrás, o para ser más precisos, desde que se dio cuenta de que se había enamorado de Kim Mingyu, su amigo de la infancia. A Yewon le gustaba recordar los días en los que le estaba en prescolar, todos los días salía de la escuela llorando porque sus compañeros le decían "ratata" debido a sus grandes mejillas, y todos los días Mingyu, su vecino de un año mayor que ella, le hacía reír, la animaba y la mimaba ya fuera con dulces o con abrazos y besos completamente inocentes; todo para hacer a la pequeña reír.

Ahora, Yewon con 16 años, se encontraba en la terrible situación de que se había enamorado de esas bromas malas que hacía el mayor solamente para romper el hielo, y de su torpeza que a menudo hacían enfadar a más de uno, aunque la menor siempre pensó que eran adorables. Por no hablar de la altura del mayor, todavía no entendía cómo es que sus amigas siempre le decían que ser baja debería ser horrible, ¡tenía la mejor vista de Mingyu! Siempre que veía la sonrisa del mayor tenía detrás el cielo, ya fuera el cielo estrellado de la noche como el cielo claro del día, la sonrisa de Mingyu siempre era la estrella más brillante del cielo de Yewon (algo aun más interesante ya que Gyu significa estrella).

Sí, Kim Yewon estaba terriblemente enamorada de su amigo de la infancia, y por eso todos los años cuando hacía chocolates para San Valentín, rellenaba los que eran para Mingyu con jalea, como sabía que a él le gustaba. Pero aunque practicase y practicase mientras hacía los dulces, su declaración nunca salía cuando llegaba la hora de entregar sus chocolates. Y sabía que ese año no iba a ser distinto, pero al año siguiente Mingyu se iría a la universidad, seguramente una bastante lejos ya que ellos vivían en un pequeño pueblo lejos del centro; y no podía permitir que el amor de su vida se fuera y se olvidara de ella sin haberse confesado a él primero.

Viernes 14 de febrero y en su instituto, cómo hacían todos los años, se encontraba lleno de desconocidos debido a su gran forma de celebrar San Valentín. Pledis School, en su particular forma de celebrar dicha fecha, hacía un mercadillo de postres abierto al público en el que había desde las tartas más extravagantes hasta pequeños y simples bombones comprados en el supermercado más cercano: la clave era que cada alumno tenía que traer al menos un dulce, ya fuera comprado, como hacían la mayor parte de los estudiantes, o casero, como Yewon o Mingyu hacían.

Ese día era agotador, los estudiantes tenían que hacer con que sus postres se vendieran, y la clase con menos postres se libraría de limpiar el patio por un trimestre entero. Pero no había grande competencia desde que Kim Mingyu y Kim Yewon participaban en el concurso, haciendo ambos la mayor parte de los postres de sus clases por sus compañeros para así vender más ya que eran mejores que los comprados en tiendas; y no por nada la escuela, y principalmente aquel evento, habían ganado tanta popularidad. Había rumores de que ese año incluso habían ido cocineros profesionales para probar los postres de estos dos jóvenes tan talentosos para la cocina.

Al terminar el evento la escuela cerró para que los alumnos pudieran limpiar tranquilos, y una vez terminar de limpiar, se reunieron todos para entregar sus chocolates junto a la gran hoguera en el centro del patio. Yewon hizo lo mismo que todos los años: les entregó sus chocolates a todos sus amigos, menos a Mingyu, y este hizo exactamente lo mismo. Todo porque 5 años antes el mayor había reservado los chocolates de la contraria para cuando volvieran a casa, queriendo entregarlos en un momento a solas con la chica, pero no pudiendo hacer su verdadero objetivo.

Y cómo Yewon y Mingyu vivían fuera de la ciudad, tuvieron que irse antes de que la ceremonia terminara del todo, despidiéndose de sus compañeros antes de empezar a caminar juntos rumbo a sus casas.