Capítulo I: Cercanos.

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En una de las residencias más grandes y populares de Tokio, se encuentra la mansion de la familia Hitakashi, propietarios de la Chocolateria Artesanal más importante de Japón. Son famosos por sus bombones y demás chocolates de sabores únicos y de  hermosos diseños. La familia tiene un sólo heredero, Hitakashi Riuji, un jóven de 19 años, cabello rubio, largo hasta debajo de sus hombros, de piel blanca y de ojos color  azul como el mar, alto y de contextura atlética. Un poco irresponsable y despreocupado para su edad, pero muy sociable y divertido. Aún estudiaba para poder especializarse en negocios y así heredar la empresa de su familia.
Cada vez que Riuji tenía la oportunidad de visitar la fábrica lo hacia. Una de sus razones es que adora el chocolate. La otra es que en la fábrica trabaja su mejor amigo Shinn, un jóven de 17 años, de cabello castaño con mechones rojizos, ojos verdes y contextura atlética al igual que Riuji, pero aún no acababa de desarrollar su cuerpo. Pese a ser menor a Riuji, era el mas centrado de ambos, y una persona muy responsable. Ellos habían sido amigos desde su infancia ya que Riuji acompañaba a su padre desde niño a la fábrica, conociendo a Shinn que es hijo de uno de los mejores pasteleros que tenía empleado la familia Hitakashi.
Un día como cualquier otro Riuji se dirigia hacia la fabrica.

Mr Hitakashi: -A donde vas tan deprisa Riuji? Deberías de comer algo primero

Riuji se acercó a su padre y besando su frente le dijo:

Riuji: -Buenos días padre! No te preocupes por mi. Comeré algo delicioso en la fábrica

Mr Hitakashi: -Deberías dejar el chocolate por hoy e ir a recortar tu cabello. Hoy tendremos una importante celebración.

Dirigiéndose a la puerta riendo salió con el entusiasmo de siempre a la chocolateria. Al llegar al lugar, el chofer abrió la puerta del vehículo para que Riuji bajara.
Después de esto, entró en la fábrica saludando a cada uno de los empleados hasta que llegó hasta uno de ellos en especial que se encontraba de espaldas. Se dirigió sigilosamente hasta él y tomandolo fuerte con sus manos por la cintura olio su cabello y le dijo:

-Adoro sentir como atesoras en tu cabello el aroma del chocolate.

El joven empleado rápidamente se dio la vuelta y con su cara encendida como una cereza le dijo:

Joven x: Riuuuu... Ya te eh dicho que no hagas eso. Me pones nervioso. Y que dirán las personas que te vean.- Murmuró el joven avergonzado.

Riuji riendo a carcajadas: -Oh Shinn, te ves adorable como cada mañana. Es increíble que te sigas sorprendiendo después de hacerte lo mismo durante 10 años.-

Shinn: -Eres un idiota.- Dijo ruborizado. -¿Que haces por aquí un día como hoy.? Supe que la alta sociedad tendrá un evento muy importante esta noche. Deberías al menos recortar un poco tu cabello.-

Riuji: -¿Tu crees que por ese motivo me perdería el ver tus suaves manos trabajando en algo tan... delicioso?

Shinn: -Ahí estas de nuevo. Te eh dicho que no soy una de esas niñas enamoradas que tienes a tus pies como para que me digas ese tipo de cosas.-

Riuji simulando que una espada atravesaba su corazon le dijo: -Que cruel eres! No es mi único motivo para estar aquí ¿sabes? También quería invitarte a que me acompañes esta noche. Detesto este tipo de fiestas, lleno de gente hipócrita, que sólo te saluda para calcular cuanto dinero entra en tu mano.

Shinn sin dejar de trabajar con sus manos en el chocolate le dijo:

Shinn: -No iré, de ningún modo lo haré. 

Riuji: -¿Que? ¿Por qué Shinn? No me hagas esto. Tu eres la única persona honesta que conosco además de mi padre. Acompañame por favor. Prometo que será divertido.- volvió a colocar sus manos en la cintura de Shinn y le susurro -Prometo que te recompensare cuando termine la fiesta.

Shinn: -Quita tus manos y deja de toquetearme. Sólo iré con una condición.

Riuji: -Eres Genial!- lo abrazo fuerte -Dime, ¿cual es la condición?-

Shinn se acercó sugestivamente a Riuji y tomando su rostro con sus manos lo acercó a él hasta que sus narices se tocaran, haciendo que Riuji se paralizara y su corazón se descontrolara.

Shinn: -Cortate en puto cabello y déjame trabajar.

Riuji riendo a carcajadas y robando un trozo de chocolate, le hizo a Shinn una guiñada y le dijo: -Eres increíble Shinn. Cuando seas mayor pediré tu mano.- y salió de la fábrica riendo.

Chocolate con pimientaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora