𝚂𝚎𝚌𝚞𝚎𝚗𝚌𝚒𝚊𝚜

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Khirt;—

Una suave sensación me inundo levemente,pero fue interrumpido por un dolor agudo que brotaba de mi pecho;

—Parece que despertaste— Oía una cálida voz me hablaba a mi lado, voltee con un poco de dolor en mi cabeza, lo que él notó de inmediato.

No, no te muevas aún estas muy débil, tranquilízate—mi vista de a poco aclaraba, para visualizar una silueta familiar.

—¡WOW! Wow, Ném, ¿que estoy haciendo en este lugar? Y, sobre todo ¿Por qué estás lleno de sangre? ¿Qué estás...?—
Mi voz fue interrumpida por una masa de carne que presionaba mis labios, para cuando me di cuenta, él me estaba besando. Me separe bruscamente haciendo que mi estómago me doliera no entendía que pasaba tenía tanto en mente que no comprendía perfectamente.

Estaba confundido.

—Oh, creo que te asusté, lo siento pero es que estaba preocupado y yo, bueno. ¡Me gustas!—

Realmente, me quedé en shock, no por la declaración, sino por la situación. Esta situación, es una mierda, pero es una buena mierda.

—¿Estás...? ¿Estás jugando verdad?—

Su mirada de sorpresa se posaba sobre mi, y  con sus ojos pude ver qué no era una broma. Así que volví a preguntar.
—¿Por qué?—

Tú me gustas, tus ojos son como dos bellas esmeraldas bailando hacía el infinito dejando atrás brillos que son capaces que iluminar cualquier noche.
Yo te amo, y te lo demostraré de la única manera en la que sé.—

Sus labios nuevamente se posaron en los míos, pero está vez con mayor delicadeza, intentaba introducir su lengua así que de a poco abría mi boca para él, el beso se intensificó, estando en donde supondrían que serían su cama comenzó a besarme el cuello, dejando marcas hasta llegar a dónde se encontraba mi herida, entonces se detuvo. Sus ojos parecían marchitos, entonces cayó rendido a mis pies. Literalmente.

—Hey, despierta, ¿Te pasa algo? ¿Ném? ¡¿NÉMESIS?!—
Me asusté, él no se movía, intenté levantar su cuerpo y dejarlo donde estaba, pero al tratar de levantarlo noté, que debajo de su ropa, tenía una herida, no era muy grande pero al parecer, ya estaba infectada. Por un momento me entró el pánico. 

Me levanté cómo pude y corrí a dónde supuse estaría el baño, no, llegué amos cocina, crucé el pasillo otra vez, la última puerta del pasillo era el baño, busque por todo ese cuarto, me sorprendió la cantidad de cosas innecesarias en un estúpido baño, hasta que detrás del inodoro estaba el botiquín de primeros auxilios.

Busqué vendas, alcohol, algodón o algo que debería detener, el bastardo era lindo, pero todo estaba desordenado, «¿Cómo iba a encontrar lo que necesitaba si ni siquiera están dónde deberían de estar?»

Debió de haber sido una sorpresa grata, saber realmente donde estaba todo.

Cuando cargaba con todo en mano, me caí, en realidad no recuerdo haber salido herido de la situación anterior, ni siquiera recuerdo mucho, pero mi herida si era más grande que la de él.

Me levanté cómo pude, caminando y tambaleando, llegué al cuarto y él ahí seguía, inconsciente, lo acomode y levanté su ropa, trate de la manera más delicada posible, comencé a ver borroso, pero no podía rendirme, no ahora, incluso si tan solo habían pasado unas horas, ya sentía que lo amaba. 

Que estupidez

Terminé y me acerqué para vernos aún respiraba, me alegren por un momento, y entonces recordé mi situación, me senté en el suelo a su lado, mire mi abdomen y parecía sangrar más.

—Realmente imaginaba que moriría por un suicidio y no una pandilla, mi vida siempre a sido miserable, quizás ahora sí podré estar con mamá, hace mucho que quiero verla. 

Quizás, ya es hora de dormir.—

Y mis ojos lentamente comenzaron a caer, creo, creo que podré descansar;

—Te extraño, mamá.—

¿𝔑𝔬𝔰 𝔄𝔪𝔞𝔪𝔬𝔰? ˗ˏˋ𝕭𝖔𝖒𝖇𝖔𝖓𝖊𝖘 𝕬𝖘𝖊𝖘𝖎𝖓𝖔𝖘ˎˊ˗ +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora