Mi Dulce Tormento (Jimin y ___) ✔

Capítulo 15

CAPITULO LEMON, LEA A SU DISCRESIÓN 

Narro yo

De regreso al apartamento de Jimin, el y ___ se detuvieron varias veces a compartir besos y caricias apasionadas. Ambos sentían como si sus cuerpos estuvieran ardiendo en llamas. Al llegar al apartamento de Jimin, rápido se quitaron la ropa y cayeron sobre el sofá...

Narra Jimin

Desesperado por unir nuestro cuerpos, coloque mi mano entre las piernas de ___ y corrí mis primeros dos dedos por su entrada y su clítoris y no pude resistir el deseo de gruñir. ___ estaba completamente mojada y resbaladiza en su calentura. Me mordí el labio inferior y empecé a correr la cabeza de mi miembro sobre sus labios inferiores y a masajear su clítoris con el, haciéndola gemir fuertemente y arquear su espalda.

-Maldición mujer...estas tan mojada. Temo que vas a arruinar mi sofá.- ___ se rió y me miro con molestia.

-¿De veras has tomado este momento para preocuparte por tu maldito sofá, Park Jimin? Eres tan pretencioso, si quieres me voy para no arruinar tu precioso sofá. - 

Mirándola salir de debajo de mí y agacharse para conseguir su ropa, me levanté del sofá, me puse detrás de ella y la penetré con fuerza, haciéndola agarrar sus manos contra los cojines del sofá mientras la cogía por detrás, haciéndola gritar mi nombre. Le di una palmada a su lindo trasero, dejando una marca rosada,  y sonreí de manera arrogante. Mi pelvis chocaba bruscamente contra su trasero haciéndolo que brincara, su humedad recubría completamente a mi miembro y empapaba gran parte de mi pelvis. Me tomé la libertad de moverla más cerca del sofá mientras seguía moviéndome dentro de ella, entonces levanté su pierna un poco, haciéndola abrirse más, y mis ojos se rodaron a la parte de atrás de mi cabeza mientras movía mis caderas para golpear su punto G.

-¡AHH JIMIN! ¡Sigue, se siente rico, dame más!- Dejé caer su pierna, moví mi mano entre sus piernas y comencé a frotar su clítoris. Podía sentir que ella empezaba a apretarse y temblar alrededor de mi miembro así que dejé de moverme dentro de ella lo que la hizo gritar en protesta.

-Dime hermosa ¿De quien eres?

-Jimin...por favor, no pares...Te lo suplico...

-No haré nada hasta que no me digas de quien eres.- Ella gimió y comenzó a mover sus caderas, pero  la detuve agarrando sus caderas con mis manos, ella protestó, pero finalmente contestó. 

-¡Maldita sea, soy tuya Jimin! ¡Toda tuya, siempre lo seré!- Volví a sonreí y esta vez comencé a moverme con mucha más fuerza hasta sentí que ___ se tensaba y finalmente llego a un clímax explosivo, llevándome con ella sobre el borde del placer. Me corrí dentro de ella sin siquiera pensar en que no utilizamos preservativos, pero me preocuparía de eso más tarde.

Narro yo

Jimin y ___ continuaron teniendo sexo apasionado en diferentes partes del apartamento durante toda la noche hasta que por fin culminaron en la cama de forma suave y cariñosa. El timbre de un celular despertó a  ___ y se acordó que tenia que presentarse al hospital hoy. Rápidamente se levanto, beso a Jimin y a pesar del dolor, ella se vistió, le dejó una nota diciendo que estaba en el trabajo y que llegaría más tarde esa noche para la cena si le gustaría unirse a ella y se dirigió a su apartamento donde se duchó, se vistió con pantalones de vestir , una camisa con un lindo lazo en el cuello y tacones.

Al contrario para nuestro querido Jimin, su día fue muy largo. Su apartamento olía a ella, a su perfume, y estaba ansioso por verla. No creía poder esperar hasta por la noche para poder verla así que decidió ir a sorprenderla al hospital. Se vistió casualmente y se detuvo en una cafetería para comprar unos cafés y un pastel, ya que estaba seguro de que ___ no había desayunado. No podía esperar a verla, cada vez que pensaba de su noche juntos, se formaba un bulto dentro de sus pantalones. Fue en un semáforo que comenzó a pensar nuevamente en su noche juntos, cuando un camión se dirigía incontrolablemente hacia su coche, el fuerte bocinazo  del camión lo trajo de su ensueño cuando lo último que recordó haber visto fue el camión golpeando el frente de su coche y su cuerpo sacudiéndose violentamente y el impacto de su cabeza chocando contra el volante antes de que todo fuera oscuro en su mundo. Su último pensamiento fue...

___... ¿Te volveré a ver de nuevo?