Entonces me di cuenta de que no lo quería como se quiere a un amigo, sino que... me gustaba, inclusive no supe cuándo, pero aquel cosquilleo en el estómago se hacía presente en mí cada vez que él me daba alguna muestra de cariño ¡Hasta me ponía nervioso cuando Jin aparecía frente a mí, con su sonrisa traviesa, pidiéndome disculpas por haber llegado tarde! No me podía convencer, ¿me había enamorado de mi mejor amigo? ¡Mi mejor amigo! Eso significaba el inicio de mis tormentos.
Lo conocía, incluso más de lo que me conocía a mí mismo. Sabía de su propia boca las cosas que hacía, de los errores que cometía e incluso sabía si la noche anterior había tenido sexo con un desconocido o no.
No merecía esto, ni siquiera mis pecados debían sufrir tan alto castigo como éste. Estaba destrozado y aun así debía fingir una sonrisa, un consejo, una felicitación, un reproche.
Ya no había noche en la cual no llorase debido a mi no correspondido amor. Me estaba perdiendo, estaba dejándome caer en las tinieblas por convencerme de que jamás podría besar sus labios. Él siempre disfrutando ante lo que le deparaba la vida, viendo todo con inocencia, jugando con todos. En cambio, yo sufría, no podía siquiera traer de vuelta a mi antiguo yo que disfrutaba tanto como él. Me había perdido, todo por amarlo.
No, jamás le confesaría mis sentimientos a Jin, jamás, de eso estaba cien por ciento seguro, pues confesarme significaría el que se alejara de mí para siempre. Fue así que decidí comenzar a odiarlo por no darse cuenta de mis sentimientos, por no darse cuenta de que fingía ante él, hasta que un día, sin previo aviso, me sorprendió ante una pregunta;
¿Estás bien, Kookie? Siento como si estuvieras enfadado conmigo, ¿te hice algo?
Apenas pude contener mi asombro, se había dado cuenta, por mínimo y vago que haya sido, notó que algo no andaba bien conmigo, inclusive se había percatado de que mi problema era con él, así es que, fingiendo una sonrisa, le respondí que no fuera idiota, que estaba cansado, que eso era todo.
Fui un imbécil, pero estaba feliz y luego me sentí contrariado al no saber si lo mejor era amarlo u odiarlo. Él, él era mi maldito problema y no podía darle solución a aquello. Debía librarme de mis sentimientos, debía abandonar el dolor que sentía. Por ello, esa noche de viernes al ingresar en el bar iba dispuesto a no sentir celos de quien bailase con él, de no sentir celos de quien besase sus labios. Era yo, yo, yo, yo... Me había abandonado tanto que ya no era preciso que viviera para y por él, debía encontrarme, así es que bebí, bebí tanto que no recuerdo el momento exacto en que alguien me tomó de la mano para ir a bailar. Sólo sé que bailé, grité, salté, reí y besé hasta que quedé exhausto, o hasta que Jin fue en mi rescate, la verdad. Así, me tomó del brazo y, riendo, me dijo que fuéramos a su casa o terminaría follando con cualquiera sin importarme si lo hacía frente a todos.
Entonces reí, luego no recuerdo lo que ocurrió, sólo recuerdo estar recostado sobre su cama. Todo me daba vueltas y en un intento por no vomitar ahí mismo, me vi ayudado por sus manos para alcanzar el baño. Después, un tanto más calmado y tras quitarme aquel agrio sabor de la boca, me di cuenta de que Jin me observaba con aquella sonrisa, mezcla de picardía y burla, y se fue acercando lentamente hasta que rozó sus labios con los míos. Estaba ebrio, es mi excusa para decir que tomándolo de la nuca le correspondí el beso de manera apasionada. Él no se quedó atrás y, aprisionándome contra la pared, jugó con mi lengua mientras su mano bajó a acariciar mi miembro. Ahora, no sé si decir maldito o bendito mareo que me atacó nuevamente, que consiguió con ello el que lo apartara con cuidado antes de arrodillarme frente a la taza del baño para vomitar otra vez.
Nunca más tomo, dije llevándome la mano a la sien en el momento en que volví a recostarme en su cama. Así, mi último recuerdo de esa noche fue su sonrisa, casi paternal que me dedicó antes de que cayera en un profundo sueño.
Al despertar nada había cambiado, sólo el hecho de que me había fallado a mí mismo. Lo había besado, le había permitido el que me acariciase sin pudor alguno ¿Se habría dado cuenta de que lo amaba? ¿Por qué Jin me había besado? Para mis dudas no tenía respuestas, pero no debía seguir torturándome, sólo vivir y, por ello, le seguí el juego, aunque no estoy seguro realmente si le seguí o caí en su juego. En fin, eso ya no era lo importante, pues sólo me dejé seducir por él.
Entonces, cada vez que salíamos de fiesta, yo bailaba con otro y Jin me miraba a lo lejos con aquella picardía característica y luego se acercaba, me apartaba de quien estuviera frente a mí y, tomándome de la cintura, me apegaba a su cuerpo para que siguiera su ritmo, sus caricias, sus besos... Ya no quería entenderlo, quería disfrutarlo, disfrutarlo hasta que me dejara por otro, sin previo aviso, sin previa advertencia. Jugábamos, simplemente eso.
Sin embargo, lo conocía, ¡cómo lo conocía!, que tuve que haberme percatado de que si él jugaba conmigo despertaría el interés de quien a él realmente le gustaba, de su amor imposible, platónico, de NamJoon. Así, lo comprendí, lo comprendí hasta que maravillado vino a mí a contarme que al fin había conseguido estar con él. Le gustaba, en verdad a Jin le gustaba NamJoon, lo comprobé y a medida que avanzaba en su relato mi corazón se hacía mil trizas, pero fingí como lo había hecho desde hacía tiempo atrás. Fingí mi sonrisa y mis felicitaciones, también fingí alegría y cordialidad cuando me lo presentó como su nuevo novio. Ya no me necesitaba para ir a bailar, pues ahora lo tenía a él.
Por consecuencia, nos alejamos y por consecuencia yo me quedé sumido en el dolor. De a poco he vuelto a ser el mismo, pues de a poco me he permitido olvidarlo, me he obligado a acostumbrarme a ese dolor en mi corazón. Ya aparecerá la persona que me ame, me digo a veces o, quizá, en mi tonto afán creo que llegará el día en que Jin dirá que me ama. Entonces, por ahora, sólo debo acostumbrarme a vivir así... Fingiendo.
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He procrastinado como nunca, por eso me puse a hacer fmv en vez de escribir :c
Así es que, como compensación a mi dispersión, fue que encontré este one shot olvidado y lo edité un poquito para compartirlo con ustedes ♥
Gracias a NakiryHideki por sugerir el trío amoroso~
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PRETEND│JINKOOK。o○.。o○.
FanfictionA JungKook no le gusta nadie más que Jin. Es verdad. Sin embargo, ¿Jin se habría dado cuenta de que JungKook lo amaba?