Capítulo 11

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Y ahí estaba Alonso, seguía durmiendo y tenía el ceño un tanto fruncido. Decidí no despertarlo y comencé a vestirme, me dirijo al baño para hacer mis necesidades y me lavo la cara. Al salir lo vi ya despierto y cuando me vio sonrió

—Buenos días, princesa- se sentó en la cama y noté que estaba sin camisa

—B-buenos días Alonso- le sonreí de igual manera y me acerqué a él. Me senté a su lado y me atrajo hacia su cuerpo haciendo que cayera encima de él
Reí levemente y de un momento a otro ya me estaba besando,sabía a donde quería llegar así que decidí alejarme un poco e hizo un puchero a lo cual sonreí

—Alonso es muy temprano y alguien podría entrar, mejor vayamos abajo para desayunar porque muero de hambre- me senté de nuevo en la cama

—Está bien bajemos, pero esto queda para después, eh- me miró perversamente y reí

—Claro, pero ahora bajemos que tengo hambre- me dirijí a la puerta, pero antes de abrirla lo miré y recordé que no trae ropa puesta- ¿qué esperas para vestirte? Muéve ese lindo trasero que tienes y ponte tu ropa- frunció el ceño y luego rió

—Lindo trasero, ¿eh?- me mira pícaro y me sonrojo al recordar lo que acababa de decir, él sólo ríe y comienza a vestirse.
Después nos dispusimos a bajar e ir a la cocina donde se encontraba su madre y Braulio

—Buenos días, espero y hayas dormido bien _____- dijo su madre con un poco... ¿Pícaro? OH DIOS MÍO!!! Espero y no hayamos hecho mucho ruido anoche

—Emm... S-si claro, dormí estupendo- le sonreí nerviosa y ella solo rió

Después de desayunar nos despedimos y partimos camino a la casa de nuevo, hoy era domingo así que no tenía nada que hacer. Al llegar subí a mi habitación y prendí mi grabadora para empezar a escuchar mi playlist a través de bluetooth, comenzó a sonar Thinking  Out Loud de Ed Sheeran, saqué mis zapatos de mis pies y empecé a bailar al ritmo de la canción. De repente sentí unos brazos en mi cintura y me sobresalté, giré y me encontré con un Alonso sonriente.
Me tomó de la cintura y yo enredé mis brazos en su cuello y comenzamos a bailar, dejé mi cabeza reposar en su pecho. Podía escuchar los latidos de su corazón, me tomó del rostro para que lo mirara y me besó. Era un beso cálido y tierno, pero cada vez se volvía más intenso, metió su lengua a mi boca y así empezamos una guerra de lenguas. Me tomó del trasero e hizo que enredara mis piernas en su cintura, caminó hasta chocar con la fría pared. Comenzó a levantar mi blusa hasta sacarla y arrojarla al suelo, besó y mordisqueó mi cuello y sé que más tarde tendré marcas ahí, pero en estos momentos no me importaba.
Le saqué la camisa y besé su abdomen. Más tarde me bajó para sacar mi short junto a mis brajas, me volvió a alzar y bajé su pantalón con su ayuda. Bajé mi mano y masajeé su miembro a lo que soltó leves gruñidos

—Nena... Ya.... Ya no aguanto- dijo roncamente y bajó su bóxer para luego penetrarme.
Arqueé mi espalda y solté un grito de placer. Empezó a moverse en mi interior, quitó mi sostén y besó mis senos mientras yo tiraba de su cabello

—A-aah... A-Al-Alonso.... S-sigue- gemí

—Oh si nena... Gime mi nombre- gruñó y me penetró más fuerte

—AAH, AAAH.... ALONSO, ASÍ.... S-SIGUE- Grité llena de placer

—N-nena... M- me vengo- gimió y me penetró más rápido

—Y-yo.... Yo t-también- dije como pude

—______!!!!!

—ALONSO!!!!

Ambos gritamos al llegar al preciado orgasmo. Nos quedamos quietos hasta recuperar la respiración, salió de mi y me besó

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Después de eso decidimos salir a dar un paseo por el parque, luego de estar caminando, hablando y riendo de tonterías fuimos a comprar helados.
Yo pedí de chocolate y él de vainilla, nos dirijimos a una banca
Miré la hora y eran las 16:28. El tiempo se pasó volando

Volvimos a casa a eso de las 20:45, fui a mi habitación, me puse mi pijama y caí rendida.
Hoy si que había sido un día agitado....

Mi Niñero-Alonso Y _____Donde viven las historias. Descúbrelo ahora