Amnesia y Otras Historias

Amnesia

Despierto en una habitación oscura, llena de cosas que desconozco, me visto con lo primero que encuentro y salgo por la puerta principal, afuera de la habitación se despliega un pasillo, las personas que están allí me saludan amistosamente, me llaman por lo que parece ser mi nombre, pero éste no me resulta familiar, sus caras no las reconozco, tampoco el lugar, quiero preguntarle a ellos quién soy, pero las palabras no nacen, ni siquiera paro a saludarlos, sólo siento un impulso irrefrenable que me obliga a salir de ahí. Al final del pasillo doy con unas escaleras que bajan y parecen no tener fin, desciendo por ellas y llaman mi atención las paredes de un blanco perfecto. Tras descender unos escalones las paredes se inundan de imágenes en las cuales veo rostros a los que me siento emocionalmente conectado, aunque no los reconozco. Mientras más escalones bajo, más imágenes aparecen, veo a un niño que da sus primeros pasos , juega con sus hermanos, sale con sus amigos, crece con su familia, hasta enamorarse y formar una propia. Avanzo. Imágenes, o quizás recuerdos que siguen apareciendo mientras continúo descendiendo, y luego de bajar lo que parecieron kilómetros, logro ver una puerta con una luz que me encandila. Con cada paso que doy hacia la puerta las imágenes que antes abarrotaban mi mente se van desvaneciendo. Corro desesperado a la puerta, por el miedo en la oscuridad olvidado. Cruzo la puerta pensando en aquel niño que vi en las paredes de la escalera.

Abro los ojos.

Una luz en el techo me ciega. Trato de moverme pero mis brazos y piernas están inmovilizados, llenos de tubos y cables conectados a monitores que parpadean y emiten un sonido ensordecedor. Desesperado, temo estar en otra pesadilla interminable y busco por todos los rincones una nueva luz que me saque de este lugar, hasta que mis ojos se encuentran con un niño de la mano de una mujer. Trato de hablar, pero antes de emitir sonido escucho "¿Papá estás bien?"