LA PUERTA DEL INFIERNO

10 0 0
                                    


Ya son las 2:30 de la madrugada y aun no logro dormirme, los recuerdos del pasado me atormentan, siento su energía junto a mi, quizás ya este enloqueciendo, a veces creo oír su voz, pero por mas que lo intento no logro recordarlo de otra forma que no sea dentro de su ataúd, ya son 6 años desde que me dejo, era tan solo una niña de 10 años, que veía por sus ojos, pues mi mundo era el;aun extraño su amor paternal, su muerte es lo que mas consterna mis noches, como puedes seguir con tu vida sabiendo que los asesinos de tu padre siguen sueltos, es muy difícil, pues te estancas en un mar de emociones, te preguntas que hiciste mal, escudriñas lo mas profundo de tu alma y mente para llegar a la misma conclusión, tu sed de venganza no se ha saciado. 

~Levántate Zaric es hora de ir a estudiar, hoy es tu primer día de clases en nuestro nuevo hogar, Lasterbil, te esperan tus nuevos compañeros no es emocionante, una nueva vida.

-MAMA POR FAVOR SAL DE MI CUARTO, no tuve una buena noche, no iré.

*Por su mirada de total desaprobación supe que explotaría en cólera, mi madre estaba en la parte inferior de mi cama, y no dudo ni un segundo en jalarme de los pies y tirarme al piso; 

-Oye que agresividad Mariana, digo mama, era bromeando.

*Tome mi toalla y huí rápidamente al baño, después de una larga ducha tome mi nuevo uniforme, contemplando la atrocidad e infamia que esa gente cometía contra el buen gusto y la moda, salí apresurada guardando mis libros en el recorrido del cuarto piso en donde vivía hacia la salida del edificio, en donde tropecé con un apuesto chico, el se quedo viéndome mientras me ayudaba a recoger  mis libros que por accidente me había hecho tirar, no se inmuto en pronunciar siquiera una palabra, los tomo me los paso, me miro y se fue, sin darle mayor importancia salí corriendo de la escena para lograr llegar a tiempo al nuevo Colegio; No encajo ni un poco, por lo que he visto en estos cinco minutos de mi estadía por cada dos hombres hay veinte mujeres, y las miradas reprobatorias de esas chicas no ayudan mucho a mi comodidad.

 ~ Buenos días, tu debes ser Zaric, mi nombre es Madelein, soy tu profesora de Calculo, y directora de curso, sígueme llegas algo tarde, tus compañeros ya fueron asignados y se encuentran en el aula. 

*Asentí con mi cabeza y la seguí cual cordero que es llevado al matadero, al llegar observo a los estudiantes de décimo "c", cualquier persona creería que parecen mas bien de sexto o peor aun una manada de orangutanes descontrolados; con un solo susurro de Madelein todos regresan a sus asientos, vaya esta mujer si que se sabe imponer.

  ~ Muy bien muchachos después de ese  espectáculo de bienvenida para su compañera Zaric alguien quiere decir algunas palabras, .......nadie muy bien, preséntate por favor Zaric.

*Ohhh maldita sea, y yo que creía que esto no podía empeorar, si ella supiese que los discursos no son lo mio.  

 - Emmm.. Buenos días, Mi nombre es Zaric, tengo 15 años... y... 

  ~ Niña no tenemos todo el día siéntese...

  ~ Saray se mas hospitalaria con tu nueva compañera, te vas para coordinación ahora mismo.

*Saray sale del aula no sin antes empujarme con su hombro y hacerme tambalear, me siento rápidamente en un acogedor rincón; esto no puede ser mejor mi primer día y ya tengo a una enemiga, me la paso el resto de las clases divagando en mi mente sin prestar mucha atención a las indirectas que lanza Saray sobre mi a su regreso. 

-RINCC-RINCC

* Por fin hora de salir, tomo mi maleta rápidamente y salgo como alma que lleva el diablo de ese manicomio, diviso las escaleras de mi edificio y creo al fin estar a salvo, pero un ruido interrumpe mis pensamientos de tranquilidad.  

  ~ ¡ Hey tu mongolica... ahh cierto Zaric ! 

* Genial es la tarada de Saray que querrá ahora.

- ¿Que quieres?

 ~  No creas que te voy a dejar tranquila tan fácilmente idiota, dame tus cosas.

- Jajaja disculpa tienes algún retraso mental Saray ?, podrás creerte mucho pero conmigo no te metas..* Vaya no se de donde esta saliendo este coraje, pero espero no me traicione.

  ~  ¿Quien te crees Zaric ? ¿No sabes quien soy yo ?

- Una tarada con delirios de bravucona.

* Al parecer mi comentario le molesto demasiado, pues se lanzo sobre mi cual fiera en cacería, agradezco a mi madre por haberme obligado a tomar lecciones de defensa personal en vacaciones de diciembre, con un movimiento la esquive fácilmente y cayo al suelo, se hace un ruedo de personas a nuestro alrededor,  los chicos y chicas la incitaban a seguir peleando, trate de huir de la escena, pero no tuve éxito, Saray se levanta y me agarro fuertemente del pelo, rápidamente tomo su brazo lo suficientemente fuerte pero sin lastimarla demasiado, la tiro nuevamente al suelo y me siento encima de ella; y  le susurro al oído:

-Mira Saray no quiero lastimarte, y no me interesa quien seas, no eres ni mas ni menos que yo, solo no te metas conmigo y todo saldrá bien. 

* Me levante rápidamente empuje a los espectadores e ingrese a la recepción del edificio corriendo, tropezando y haciendo caer a aquel apuesto chico cuyo nombre aun desconocía, le ofrecí mi mano para ayudarle a levantar y vi en sus ojos esa mirada que hace mucho no veía.... Fue cuando conocí a los asesinos de mi padre, una mirada fría y calculadora.

  ~ Tu eres Zaric no ? Vaya que has dado de que hablar en tan solo un día, que espectáculo, mi nombre es  Marcos, soy tu vecino, vivo un piso arriba tuyo, fíjate mejor la próxima vez de lo que haces, ya estas advertida chiquilla tonta.

- ¿Como rayos sabes mi nombre ?  ¿Eso fue una amenaza ?, al parecer no te han enseñado a respetar y a mi no me interesa enseñarte baboso.

  ~  Aprende algo indispensable  para tu supervivencia, en este pueblo todo se sabe en cuestión de segundos , y tómalo como quieras, disculpe señorita bien educada, pero si gustas yo si puedo enseñarte otras cosas.

- Ahh eres un imbécil, sabes que fue un disgusto conocerte adiós. 

~Lo mismo digo chiquilla tonta, adiós.  

* Subí rápidamente a mi apartamento, escuchando los pasos de Marcos seguirme, y como raro solo mi hermano menor Diego de 9 años esta en casa, almorzamos juntos, jugamos toda la tarde en la consola, y cuando cae la noche me dispongo a realizar un trabajo que nos dejaron, quien creería, estos profesores son demasiado obsesivos con la formación académica, al finalizar tipo 9:00 pm llega mi madre a casa, me sorprendo al ver que aun no se había enterado de mi espectáculo a las afueras del edificio,  al parecer Marcos se equivoco.

  ~ y dime hija ¿ Que tal estuvo tu primer día de clase? 

- Amm.. espectacular mama, pues lo normal ya sabes.  

  ~ Y aun no ha llegado ¿Sergio? 

- No mama no se nada de tu adorado esposo, me voy a dormir, descansa. 

  ~ Es mejor mañana debemos madrugar, descansa. 

* Sergio ha sido mi padrastro desde mis seis años, ha sido un buen consejero y amigo para mi, pero siempre he creído que hay algo raro en el; Divago un rato en mi mente hasta que logro quedarme dormida.   ...... ¡Que rayos fue ese ruido!, me despierto alterada, miro la hora 12:39 a.m. me quedo mirando en la oscuridad de mi habitación para ver si puedo divisar el causante de aquel ruido; y una figura negra se posa en frente de mi, se lanza sobre mi y tapa mi boca, siento ganas de gritar y llorar.

  ~ ¡No grites Zaric!, quise pasar a visitarte, así que salte por tu ventana, deberías cerrarla te pueden robar. 

* Su voz la conozco ohh es ese imbécil.. 

- Eres un idiota, casi me matas del susto... las visitas se hacen de día retrasado...




HOLA CHICAS Y CHICOS  ESTA ES MI PRIMERA VEZ ESCRIBIENDO, ESPERO LES GUSTE, Y ME APOYEN, SUBIRÉ CAPITULO CADA MARTES, DISFRUTEN LA HISTORIA, BESOS...

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 23, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

CARA A CARA  CON EL MIEDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora