Eran las dos de la tarde del viernes 19 de junio,el timbre que recibe el verano y el más esperado por los estudiantes anuncia el inicio de la que por muchos,es considerada la mejor estación. Tras despedirse de sus amigos,Laura sube al coche, conducido por su padre. Se sentía libre por fin después de el esfuerzo invertido.Pero algo la incomodaba,quizás la actitud de su padre que parecía preocupado. Laura siempre pensó que su padre era muy estricto y serio,pero al fin y al cabo el era un prestigioso juez,por lo tanto no le sorprendía.Llegaron a casa sin mediar palabra hasta que aparcaron frente a la puerta. Al entrar en casa,su padre le dio una cálida caricia , y le dijo.
--Laura, tu madre y yo tenemos que hablar sobre algo muy importante contigo
La joven se quedó de piedra, no sabía a que podía referirse su padre. De pronto le vino una idea a la cabeza. Recordó que sus padres le prometieron un viaje a Nueva York si los resultados académicos eran buenos y sintió una vitalidad que le hizo recordar a la ilusión con la que vivía las historias que le contaba su madre sobre Don Quijote,ya que lo recordaba como uno de sus momentos más felices de su vida
Sus padres le propusieron que se sentara y su padre comenzó a hablar.
--Laura,se que nunca te ha gustado mi trabajo pero me han comunicado que me asignan
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Tardes de verano
Teen FictionLaura es una joven residente en Madrid que ve temblar su mundo cuando por motivos de trabajo,ella y sus padres se ven obligados a mudarse a una localidad costera de Galicia llamada Ribeira. Lo que empieza como una pesadilla se convertirá en el mejor...
