Una Lucha Inesperada

Camino a las brisas del mar

¡Y LLEGO EL DÍA!
No estaba emocionado si no que, estaba un poco nervioso porque era mi primera vez acampando y a mi no me gustaban los mariscos en ese entonces. Eran las 10:00 pm yo estaba sentado en la sala de mi casa esperando a que Damián fuera por mí a mi casa, el plan era quedarme a dormir una noche en su casa para salir a primera hora al campamento, y por fin llego, me despedí de mi abuela y subí mis maletas al auto, nos subimos en la cajuela, ya que era mucho equipaje el que llevaba pero que esperaban, quise meter todo mi cuarto en unos pedazos de tela en forma de rectángulo.

Aún recuerdo cómo me miraba camino a su casa, esa mirada que reflejaba alegría solo porque yo iba, que al igual yo iba encantado de ir con el, su mama me iba contando cosas de él, cuando era pequeño, yo iba riéndome y el quería esconder su cabeza debajo del asiento.

Cuando llegamos a su casa después de cenar y charlar un poco con sus padres, nos acostamos a dormir en su sala, y yo solo miraba el techo pensando en:

¿Cómo demonios sobreviviré 5 días en la playa sin luz, internet, televisor?

Pero cuando me pregunte eso, voltee a ver a Damián mientras dormía y escuchaba sus suspiros, de inmediato me daban ganas de abrazarlo, pero solo me contuve ya que tenía miedo a despertarlo y qué viera que lo estoy abrazando y me dejará de hablar y todo eso, pero debo admitir que se veía hermoso.

Dieron las 06:00 am, y el papa de Damián nos despertó y me dijo con una sonrisa de gracia:

"Evans espero que lleves la ropa interior necesaria para 5 días, porque ahí te entra arena hasta ya sabes dónde"

Cuando dijo es le conteste:

"Jaja descuide llevo más de la necesaria"

Y a decir verdad llevaba como 10 pares, es que aún no sabía lo que era acampar tanto tiempo, es más no sabía que era acampar exactamente, pero me decidí a vivir esa aventura con Damián, cuando el despertó solo me dio un golpe en la frente (Con cariño) y me dijo:

"Evans espero que te diviertas mucho, y si te da miedo en la noche no te preocupes, que ahí estaré yo"

Yo solo sonreí y le di un golpe en el hombro después me puse cómodo para el largo viaje en auto hacia la playa.