Comienza el año, y nuevamente vuelvo a este infierno, en donde nadie me entiende o siquiera me escucha. En donde el viento es lo único que logro oír, o quiero oír, ya que nadie es capaz de preguntarme si estoy bien.
Será que de verdad no le importo a nadie? No lo se, pero creo que hay cosas mas importantes en las que preocuparse.
En fin, hoy empiezo 4 año de secundaria, tendré que socializar, algo que de verdad me cuesta. Por suerte tengo a mi mejor amigo, Kim, a quien conozco desde los diez años. Él es de esas personas con las que siempre hay un tema de conversación y nunca te aburres, personas con las que siempre quieres estar, y hoy por fin se suponía que lo vería de nuevo, pero está enfermo.
Me preparé para la escuela, me puse el uniforme, me lavé la cara, los dientes, y me dirigí hacia la cocina en la cual estaba mi madre esperándome para desayunar.
-Buenos días!- grita desde la cocina mientras voy llegando a donde ella se encontraba -Hey, por qué esa cara?- dice mi madre intrigada al verme.
-No es nada, solo estoy cansado- le contesté con pocos ánimos
-Bueno.. Kim te acompañará a la escuela?- pregunta ella
-Llamó su madre, dijo que no podrá ir porque está enfermo, nada grave, solo espero que mejore pronto- le di un beso en la mejilla a mi madre, tomé mis cosas, una manzana, y me dirigí hacia la puerta principal camino a la escuela.
El viaje a la escuela básicamente consistió en ver el paisaje (la mierda de perro que había en el piso), y tararear canciones mientras caminaba.
Lo bueno es que ese día mi mochila no estaba tan pesada porque era el primer día y no había que llevar tantas cosas.
Cuando llegué al colegio pude ver como un montón de chicos entraban rápidamente, por el gran portón que dividía la calle de la escuela, hacia sus respectivas clases.
Al entrar me puse a buscar mi aula, tenía biología, la materia que a Kim y a mi más nos gusta.
De pronto siento como alguien me toca el hombro, eran unas manos cálidas. Me di vuelta y pude ver a un chico un tanto más alto que yo, pelo castaño y una bella sonrisa que me pareció muy simpática.
