Latidos de sufrimiento

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Sarah una joven que nació el 3 de marzo de 1998, de niña vivió una infancia llena de felicidad junto a la unión de sus padres, siendo la adoración de ambos, la luz de sus ojos, su madre Maria le dedicaba casi todo el tiempo viendo como su niña crecía. Su padre Nelson al regresar de su trabajo, lo primero que hacia era tomar a su hija abrazarla y jugar con ella. Luego el tiempo paso, ya no era esa niñita ya tenia 13 años, su infancia fue considerada como una de las mejores por el cariño de sus padres. Todo ese cariño y la atención que le daban se debía a que los doctores le habían dicho a sus padres que solo podían tener hijos bajo tratamiento y que Maria solo podría aguantar un parto.

Esto convirtió a Sarah en una niña mimada y consentida. Tiempo después la ya joven fue tomando una actitud diferente a la de antes, está cambiando, siendo ya, engreída y se sentía superior a los demás por tal razón no tenia muchos amigos. Esta ya tiene 16, todo en su vida empieza a cambiar, sus padres viendo como se convertía en una típica adolescente rebelde que no respetaba ni escuchaba a nadie, ella tomaba sus propia decisiones entre ellas faltar a la escuela y sus llamados amigos en verdad eran mala influencia.

Maria estaba destrozada al ver como su única hija se deja llevar por sus amistades, sabiendo que esta iba por mal camino. Nelson le reprochaba porque ella siempre llegaba a altas horas de la noche y a pesar de los castigos que le otorgaban para ella esto no era barrera para irse de fiesta con sus amigos.

Una de las tantas noches que ella llegaba tarde, fue en la que sus padres se dieron cuenta que tenían que hacer algo de inmediato. Al día siguiente le informaron que la enviarían a una academia militar a lo que ella se negó por completo, pero esto ya había sido una decisión definitiva.

Esta cuando llego se dio cuenta lo recta que era esa escuela pero ella al ser tan rebelde no le importaba eso, ella al ver que era peor de lo que imagino, pidió ayuda a su amiga, Natalie, aquella cómplice de Sarah para todo. Luego de haber salido de allí, ella salio para casa de sus padres acompañada de su amiga.

Sus padres se sorprendieron al verla pues para ellos, ella estaba en la academia, en ese momento sus padres le reprocharon y a la vez solo pensaban que iban a hacer con ella pues su personalidad y sus actos eran insoportables. Al día siguiente en la noche luego de haber tenido una fuerte discusión con sus padres, Sarah decide irse de la casa a vivir con su mejor amiga. Maria llorando le pedía que no lo hiciera y a la vez se preguntaba que donde fue a parar su niñita al igual que Nelson la miraba con cara de decepción. 

Después de irse su amiga la invita a la considerada fiesta del año a lo que ella responde que si, mas tarde su amiga le presenta un chico llamado Daniel, al conocerse ambos se gustaron en lo que la conversación fluyo rápido entre ellos. Al pasar de las horas mientras tomaban, bailaban hubo un momento en que el chico le ofreció una sustancia que para ella era desconocida pero no dudo en probarla ya que confiaba mucho en el, desde ese momento ella perdió la conciencia, Daniel aprovechándose de su estado tan vulnerable y frágil no dudó el abusar de ella.