Esta historia trata de un pequeño grupo de adolescentes que pocos días antes de halloween se empezaron a interesar por lo paranormal y sin pensarlo comenzaron a jugar con este tema. Pocos días después decidieron ir a un pueblo abandonado a 10Km de...
Cerré los ojos y... vi que estaba otra vez en mi casa. Estaba recordando el pasado:
+Hija comete la verdura, es saludable y te va a hacer bien.-dijo mi madre-
-No quiero mama! No me gusta!-dije gritando-
+Pero como no te va a gustar si ni siquiera la has probado...-
Sin pensarlo le tire la comida, tire el plato al suelo y me fui a mi cuarto enfadada porque yo quería macarrones. Mi madre se fue a su habitación triste por lo que había echo. Ella hacia cosas que yo no sabia. Se encerró en el baño y se hizo un corte en el brazo. Ella creía que la sangre que caía era un alivio encontrado. Ella lloraba en silencio. Aunque yo no lo viera mi madre lloraba y lo pasaba mal por mi culpa.
De repente desperté. Estaba en mi cama. Estaba junto a Hichiko. Al despertarme Hichiko sonrió.
En ese momento le pregunte que había pasado. Me dijo que me había muerto por unos segundos. Que como ya estabas bien que te llevararamos a casa.
Me arreglé y me fui a dar una vuelta por el parque. A mitad camino me puse a pensar en que a partir de que hicimos las invocaciones todo comenzó a salir mal... Cuando me di cuenta se me había echo de noche. De vuelta a casa tomé un atajo. Fuí por una calle solitaria, larga y un tanto siniestra. En ese momento no pensé que me podría pasar algo.
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Seguí caminando como si nada. Hasta que oí un ruido raro. Como si fueran pasos de una persona. De un momento para otro comenzó a llover mucho. Me mojé toda. Yo seguía oyendo los pasos, cada vez que comenzaba a correr los pasos aceleraban, cuando miraba hacia atrás no había nadie. Comencé a correr asustada, y los pasos comenzaban a sonar mas rápidos y mas cerca. Corriendo me resbale. Caí al suelo y sin esperarlo algo que no se podía ver me cogió del pie y me comenzó a arrastrar(me desmaye). Cuando me desperté estaba en la casa donde hicimos la invocación. Yo comencé a gritar. Quería que la cosa que había ahí me soltara. En ese momento paré de ser arrastrada. Yo por muchas veces que me intentara levantar había algo que me volvía a empujar al suelo. Comenzaron a aparecer muchas cosas raras. De repente me cogieron de los pies y de los brazos y me ataron a una cama de madera con unas cadenas. Comenzaron a estirar de las cadenas mientras yo estaba atada a ellas. Sentía como mis huesos se separaban poco a poco y como mi piel se iba rompiendo. El dolor era inmenso. No tenia gritos para describir el dolor que sentía. De repente apareció un señor raro como una cabra con cuernos en la cabeza de color rojo. Venia con una cuerda. Cuando le vi no tenia palabras para describir como para decir algo. El parecía seguro de lo que hacia. Mientras las cadenas me iban estirando mas y mas Lucifer alzó la cuerda y me comenzó a pegar con la cuerda, de tal forma que se me quedaban las marcas. Así durante 15min. Cuando terminaron sacaron una jaula con una cerradura con llave y me encerraron allí durante 30 min. Luego me sacaron de ahí y con un cuchillo comenzaron a hacerme cortes en todo el cuerpo, barriga, brazos, muñecas, piernas... Yo comencé a llorar y a gritar de dolor. Me dejaron colgada de la pared de forma que yo no pudiera moverme de ahí. Mientras yo estaba ahí Mitsu, Yuko y Hichiko comenzaron a preocuparse. Miraron el chip que llevaba mi móvil y vieron que estaba en el pueblo abandonado. Cogieron el coche del padre de Emi y se fueron camino allí. Aparcaron en frente del cementerio y comenzaron a gritar mi nombre. Yo intentaba gritar pero no podía. Antes de que ellos entraran Lucifer me cogió en brazos me ató una cuerda al cuello y la cuerda la ató en el techo. Cuando ellos entraron me vieron a mi colgando del techo. Hichiko lo primero que hizo fue cortar la cuerda de mi cuello. Al cortarla casi me caigo pero el me cogió en brazos antes de tocar al suelo. Luego corriendo nos subimos al coche y me llevaron al hospital. Allí me vieron los cortes, las marcas de la cuerda y mi piel casi rota. Estaba inconsciente.
